La I+D y la f¨¢bula de Al Mendruco
Mi colega Alfredo Mendruco (Al, para los amigos) trabaja en el departamento de I+D de una importante empresa de ¨¢mbito estatal. Es el responsable de generar los nuevos productos y tambi¨¦n se ocupa de formar a los trabajadores.
El presidente de la compa?¨ªa, que no se cansaba de declarar que el departamento de I+D era sagrado por ser fundamental para el porvenir de la sociedad, le ha dicho ahora que, por culpa de la crisis, va a hacerle un nuevo contrato y a rebajarle el sueldo un 3 %. Alfredo, aunque admite que la crisis puede obligar a reducir gastos, no entiende muy bien por qu¨¦ le ha tocado a ¨¦l. En la principal empresa competidora, que tambi¨¦n est¨¢ sufriendo la crisis, el recientemente elegido presidente (que, seg¨²n el jefe de Al, son muy amigos) destin¨® la semana pasada, de una tacada, 50 ronaldos (1 ronaldo= 85.000.000 euros) a fortalecer su departamento de I+D.
En cualquier caso, mi amigo estaba bastante resignado a reducir su sueldo de los 500 microronaldos (1 microronaldo o microR= 0,0000001 ronaldos) que cobra en el 2009 a 485 microR en el 2010. Sin embargo, al leer el contrato, ha descubierto que la letra peque?ita establece que su nuevo salario ser¨¢ realmente de 435 microR, pero que le conceder¨¢n un cr¨¦dito de 50 microR a bajo inter¨¦s que podr¨¢ devolver c¨®modamente en 15 a?os. De esta manera, la suma alcanzar¨¢ los 485 microR supuestos. Cuando se quej¨® diciendo que el cr¨¦dito ni lo quer¨ªa ni le serv¨ªa para nada, que lo que ped¨ªa era mantener su nivel de vida, le contestaron que el cr¨¦dito era necesario para que en el informe anual de la empresa no se notara la rebaja real y que era tonto si no lo entend¨ªa.
Aunque Alfredo es de ciencias, no lo ve¨ªa nada claro. As¨ª que fue a hablar con la segunda de a bordo pensando que podr¨ªa explic¨¢rselo, ya que antes trabajaba en el departamento de I+D. Le ha dicho, en primer lugar, que deb¨ªa estar m¨¢s que satisfecho pues inicialmente el gran jefe quer¨ªa dejar su sueldo en 325 microR, pero que, seg¨²n sus ¨²ltimas cuentas, su salario incluso aumentar¨ªa el 0,2% (no dijo c¨®mo y mi amigo sospecha que es un farol, pero no se atrevi¨® a llevarle la contraria para que no le llame mentiroso). En segundo lugar, le hizo notar que la parte base del salario destinada a su alimentaci¨®n y subsistencia, que este a?o era de 108 microR, se la iban a aumentar un 9,9% hasta 120 microR, con lo cual incluso comer¨ªa mejor. Alfredo cree que algo falla en el razonamiento pues este a?o recibi¨® adem¨¢s cheques restaurante del Plan Eco por valor de 100 microR y ¨¦stos ni se mencionan en el nuevo contrato. Por cierto, gracias al Plan Eco tambi¨¦n han levantado y vuelto a pavimentar el aparcamiento de la empresa, que ya hab¨ªan asfaltado el a?o pasado.
Por otra parte, le han confirmado que para el a?o pr¨®ximo no va a poder comprar nuevos instrumentos ni hacerles el mantenimiento. Por si acaso, le han sugerido que vaya ahorrando durante lo que queda de a?o y que, con eso y con un rinconcito que le quedaba, podr¨¢ hacer alguna reparaci¨®n de emergencia.
Lo m¨¢s asombroso es que ahora pretenden dedicarse a la econom¨ªa sostenible y, al parecer, para eso no hace ninguna falta el departamento de I+D. Mi amigo, como la mayor¨ªa, no sabe en qu¨¦ va a consistir esa nueva actividad, pero se pregunta qu¨¦ van a vender dentro de pocos a?os si pierden la capacidad de crear las nuevas l¨ªneas que sustituyan a los productos actuales, labor que reca¨ªa en su departamento. Antes incluso se iba aguantando con poca renovaci¨®n del cat¨¢logo, pero ahora todo se queda obsoleto muy r¨¢pidamente por culpa del principal competidor (ese que ha aumentado su inversi¨®n en I+D). Puesto que la empresa gan¨® en los ¨²ltimos a?os mucho dinero con una filial que se dedicaba a la construcci¨®n, Alfredo piensa que igual se plantean volver al negocio del ladrillo.
Yo le he recomendado que vaya a ver a otro antiguo colega del mismo curso que ahora trabaja en administraci¨®n y que ha contribuido a elaborar el presupuesto para el a?o pr¨®ximo. Estoy seguro que sabr¨¢ explic¨¢rselo todo. ?O no?
Joan J. Guinovart es bioqu¨ªmico del IRB y profesor de la Universidad de Barcelona
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