La quimio, solo si hace falta
Hay tumores de mama poco agresivos que no requieren de esta medicaci¨®n Las pruebas gen¨®micas logran ahorrar el tratamiento a cada vez m¨¢s mujeres
La quimioterapia ha salvado y sigue salvando miles de vidas de pacientes oncol¨®gicos. Pero hay ocasiones ¡ªcuando los tumores de mama son poco agresivos y est¨¢n muy localizados¡ª en que el beneficio que aporta esta medicaci¨®n tras la cirug¨ªa puede ser m¨ªnimo o inexistente. Decidir si compensa o no administrar el tratamiento antineopl¨¢sico es delicado, pues comporta importantes riesgos. Para ayudar a los m¨¦dicos a tomar la mejor decisi¨®n, un n¨²mero creciente de hospitales espa?oles de la red p¨²blica est¨¢ incorporando pruebas gen¨®micas que analizan la probabilidad de reaparici¨®n de la enfermedad y el beneficio que la quimioterapia podr¨ªa aportar.
Evarista Tejedor tiene 80 a?os. ¡°Aunque los m¨¦dicos dicen que mi edad biol¨®gica es de 60 o 65 a?os¡±, precisa por tel¨¦fono desde su descanso veraniego en Vilarnegrillo (Segovia). En marzo del a?o pasado le diagnosticaron un tumor en el pecho. ¡°Me lo analizaron y me indicaron que no me hac¨ªa falta quimioterapia tras extirparlo¡±, comenta. ¡°Tengo amigas que han recibido esta medicaci¨®n y se notan los efectos f¨ªsicos y ps¨ªquicos¡±. A ella le irradiaron tras la intervenci¨®n y le recetaron un tratamiento antihormonal. Eso fue hace un a?o. ¡°Estoy estupenda, en ning¨²n momento he tenido que interrumpir mis paseos o mi nataci¨®n¡±, explica.
Evarista, que reside en Madrid, tuvo que pagar de su bolsillo la prueba (en torno a los 3.000 euros), porque entonces a¨²n no estaba cubierta por la red p¨²blica. Ahora ya no hubiera hecho falta. Madrid ha incorporado este servicio en sus centros desde mayo (ya los han probado 70 pacientes), como explica el jefe de Oncolog¨ªa del hospital Gregorio Mara?¨®n, Miguel Mart¨ªn. El Pa¨ªs Vasco implantar¨¢ los test en sus principales hospitales a partir de septiembre, Catalu?a tambi¨¦n est¨¢ desplegando esta tecnolog¨ªa en una decena de centros y otras comunidades como la valenciana est¨¢n estudiando ofrecer este servicio a sus pacientes, explica Anna Lluch, jefa de servicio de la especialidad en el hospital Cl¨ªnico de Valencia. Entre el 30% y el 50% de mujeres a las que se diagnostica un c¨¢ncer son candidatas a someterse a la prueba gen¨®mica, explica Mart¨ªn.
Hospitales espa?oles est¨¢n incorporando test para evitar terapias agresivas
Cuando un tumor de mama ha evolucionado hasta el punto de afectar al racimo de ganglios linf¨¢ticos de la axila ¡ªal menos, a tres o m¨¢s de ellos¡ª no existe m¨¢s alternativa que, una vez extirpado, administrar quimioterapia a la paciente para evitar su posible reaparici¨®n. Lo mismo sucede en dos tipos de neoplasias especialmente agresivas. Una de ellas es la denominada triple negativo, que posee una alta tasa de proliferaci¨®n celular ¡ªy, por ello, cuenta con elevada capacidad de extenderse por otras partes del cuerpo¡ª. La otra modalidad es aquella cuyas c¨¦lulas malignas expresan de forma amplificada la prote¨ªna HER2, que aumenta la capacidad de crecimiento y divisi¨®n del tejido neopl¨¢sico.
Pero existe un gran grupo de tumores, alrededor del 70% de los casos, que presenta un riesgo menor de migraci¨®n. Sus c¨¦lulas est¨¢n poco diferenciadas y son hormonosensibles, es decir, son c¨¢nceres cuya biolog¨ªa est¨¢ condicionada por receptores hormonales, de forma que al entrar en contacto con estr¨®genos o progesterona (que act¨²an de est¨ªmulo), activan sus mecanismos de crecimiento. Por ello, son muy sensibles a tratamientos hormonales, hasta el punto de que en muchas ocasiones se evita la quimioterapia.
De los tumores poco agresivos, solo al 4% les beneficia este tipo de tratamiento. ¡°Pero, como no ten¨ªamos la certeza de cu¨¢les eran las que necesitaban quimioterapia, se la administr¨¢bamos a las que ten¨ªan tumores de un cent¨ªmetro o m¨¢s¡±, explica Miguel Mart¨ªn, que tambi¨¦n es presidente del Grupo Espa?ol de Investigaci¨®n en C¨¢ncer de Mama (Geicam). En algunos casos, se discriminaba en funci¨®n de criterios como el grado histol¨®gico (diferenciaci¨®n respecto a las c¨¦lulas del entorno) o por la afectaci¨®n de los ganglios de la axila, ¡°pero eran motivos muy subjetivos¡±, a?ade.
Hay un gran grupo de c¨¢nceres muy sensibles a los medios hormonales
Las pruebas gen¨®micas han comenzado a dar la vuelta a esta situaci¨®n al dar informaci¨®n mucho m¨¢s fiable para que los onc¨®logos discriminen mejor si la quimioterapia ser¨¢ necesaria. Estos equipos analizan la actividad de un grupo de genes a partir de una muestra de tejido mamario canceroso. En funci¨®n de la presencia de determinados genes y de su nivel de expresi¨®n, los test arrojan un resultado de la probabilidad de reaparici¨®n del tumor. Si la tasa es muy baja, no har¨¢ falta quimioterapia. Aunque la decisi¨®n final est¨¢ en manos del onc¨®logo y la paciente, ya que la puntuaci¨®n a la que hace referencia la prueba siempre hace referencia a la probabilidad de recurrencia, no a certidumbres.
Mart¨ªn explica que, en t¨¦rminos generales, en la mitad de las mujeres a las que se les somete a este tipo de pruebas (hay dos plataformas denominadas Oncotype DX y MammaPrint) se decide prescindir de la quimioterapia. Quiz¨¢s pueda parecer una tasa baja, teniendo en cuenta que lo ideal ser¨ªa administrar el f¨¢rmaco solo al 4% de pacientes que realmente se benefician de este tratamiento, pero ese 50% ¡°ya es un avance muy notable¡±, dice. Especialmente al tratarse de una tecnolog¨ªa muy reciente que a¨²n se est¨¢ implantando, pero nuevos tests m¨¢s avanzados ya est¨¢n en camino.
La prueba cuesta 3.000 euros. ¡°Pero compensa por el ahorro en toxicidad para las pacientes¡±, asegura Agust¨ª Barnadas, jefe de Oncolog¨ªa del hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona. ¡°Adem¨¢s de la incomodidad de ir al hospital, las n¨¢useas, el cansancio o la ca¨ªda del cabello, existe un riesgo de infecci¨®n grave por la ca¨ªda de defensas¡±. Por ello, ¡°se puede decir que es una medida coste-efectiva¡±. Lo mismo opina Miguel Mart¨ª, que recuerda que una de cada ocho mujeres sufrir¨¢ un c¨¢ncer de mama a lo largo de su vida.
Medicina personalizada de verdad
La medicina personalizada, aquella que adapta cada terapia a las condiciones espec¨ªficas del paciente, es una expresi¨®n que ha hecho fortuna en un n¨²mero creciente de parcelas de la sanidad, aunque no siempre se emplea con propiedad.
Pero si hay una parcela en la que se puede hablar de medicina personalizada sin riesgo a equivocarse, esa es la oncolog¨ªa y, dentro de ella, el tratamiento de algunos tipos de c¨¢ncer de mama. Parte del ¨¦xito de la lucha contra los tumores de pecho reside en contar con medicamentos que se dirigen a dianas terap¨¦uticas concretas.
Existen dos claros ejemplos de ello. Uno es la terapia basada en un anticuerpo monoclonal denominado trastuzumab. Este tratamiento se ha mostrado eficaz para combatir uno de los tumores de mama m¨¢s agresivos, que se caracteriza por la sobreexpresi¨®n de la prote¨ªna HER2, que impulsa el crecimiento y la diseminaci¨®n del c¨¢ncer (en torno al 20% de los casos). ¡°Todas las mujeres con el gen alterado reciben este tratamiento en Espa?a, que cuesta unos 40.000 euros al a?o¡±, apunta Miguel Mart¨ªn.
El otro tiene que ver con los tumores de mama con receptores de hormonas positivos. En estos casos, la actividad hormonal act¨²a como un activador del crecimiento del c¨¢ncer y de posibles reca¨ªdas. Para evitarlo, distintos medicamentos (inhibidores de la aromatasa, tamoxifeno) impiden que los estr¨®genos, por ejemplo, act¨²en sobre estas c¨¦lulas.
Los tests gen¨®micos caminan en la misma direcci¨®n, pues pueden determinar la conveniencia o no de administrar quimioterapia a las pacientes en funci¨®n del riesgo de recurrencia de la enfermedad a partir del comportamiento observado de los genes del tejido canceroso.
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