Una ni?a amish enferma de leucemia no ser¨¢ forzada a someterse a quimioterapia
Sarah y sus padres dejaron su casa en Ohio para evitar que una tutora decidiera el tratamiento. Esta ha dado por perdido el caso
La ni?a amish de 11 a?os enferma de?leucemia, Sarah Hershberger, no se ver¨¢ forzada a someterse a quimioterapia. La decisi¨®n pone punto final a meses de lucha judicial en la que se han visto implicados los derechos de la enferma, los del Estado, la ¨¦tica m¨¦dica y la religi¨®n, informa AP.
El caso de Sarah, que se conoci¨® en agosto, comenz¨® con la decisi¨®n de un hospital de Ohio de emprender acciones legales para conseguir que la ni?a se sometiera a tratamiento, despu¨¦s de que sus padres decidieran que lo abandonara en junio. Sarah padece un linfoma linfobl¨¢stico y sus padres acudieron al centro m¨¦dico Akron Children para tratar sus tumores malignos en ri?¨®n, cuello y pecho.
En un primer momento Andy y Anna Hershberger aprobaron la quimioterapia, pero tras varias semanas, y ante las s¨²plicas de su hija, los progenitores decidieron interrumpirlo e informaron a los m¨¦dicos de su intenci¨®n de tratarla con medicina natural. A pesar de que el tumor hab¨ªa disminuido, no hab¨ªa sido erradicado totalmente. Los m¨¦dicos siempre han defendido que con el tratamiento Sarah tiene un 85% de probabilidades de curarse. Sin ¨¦l, su esperanza de vida es de un a?o.
Tras meses de batalla judicial, el pasado octubre, un juez entreg¨® la custodia m¨¦dica de Sarah a una tutora legal, abogada y enfermera, tras sentenciar que ¡°las convicciones y las creencias de los padres no son m¨¢s importantes que la obligaci¨®n del Estado de proteger a un menor¡±. Pero la responsable de su custodia, Maria Schimer, decidi¨® este viernes entregar sus obligaciones como tutora y dar por perdido el caso.
¡°No se sabe d¨®nde est¨¢ Sarah y es imposible verificar su estado de salud y tomar decisiones sobre qu¨¦ tratamiento es mejor¡±, asegur¨® Claire Dickinson, abogada de Schimer. ¡°No tiene sentido alargar m¨¢s tiempo esta historia¡±, a?adi¨® la letrada. ¡°Los padres no han tenido ning¨²n tipo de contacto con mi cliente. Nos percatamos de que se hab¨ªan marchado cuando la tutora acudi¨® a recoger a Sarah para llevarle al hospital¡±, asegur¨® la abogada de Schimer.
Dickinson ya hab¨ªa aclarado que no hab¨ªa intenci¨®n de "interponer una demanda con el fin de buscar a la familia o volver a forzar a la ni?a a que se trate con quimioterapia¡±. La postura tomada por Schimer todav¨ªa necesita ser aprobada por un tribunal.
La iniciativa de la tutora llega unos d¨ªas despu¨¦s de que el abogado de los padres de Sarah, Maurice Thompson, informar¨¢ de que la familia hab¨ªa abandonado su casa en el noreste de Ohio ¨Cque, incluso, habr¨ªan abandonado el pa¨ªs- ¡°para evitar que los m¨¦dicos forzar¨¢n a la ni?a a tratarse con quimioterapia tras la decisi¨®n del magistrado de poner a Schimer al cargo¡±. Los padres tomaron la decisi¨®n unos d¨ªas antes de que entrar¨¢ en vigor la potestad de la enfermera sobre la menor. Para ¨¦l, este caso era un ejemplo claro de c¨®mo ¡°los Estados pretenden interponerse en la libertad de los padres de elegir qu¨¦ es lo mejor para sus hijos¡±.
No sabe d¨®nde est¨¢ Sarah y se ha vuelto imposible verificar su estado de salud y tomar decisiones sobre qu¨¦ tratamiento es mejor¡±
La familia, miembros de una comunidad Amish, est¨¢ en contra de muchas de las cosas que definen la vida moderna y es profundamente religiosa. Viv¨ªan en una granja a unos 60 kil¨®metros de Cleveland. ¡°La aprobaci¨®n por parte de un juez permitir¨¢ que la familia regrese a casa, lo que permitir¨¢ que Sarah reciba el tratamiento elegido por la familia entre todas las opciones posibles¡±, explic¨® Thompson.
La ¨²ltima sesi¨®n de quimioterapia de Sarah fue el pasado mes de junio cuando la ni?a dijo encontrarse muy mal y ten¨ªa miedo de volverse est¨¦ril, seg¨²n explic¨® la propia enferma. Los efectos m¨¢s comunes de la quimioterapia, entre otros, son las na¨²seas, el da?o de ¨®rganos y la esterilidad. A pesar de estas consecuencias, lo m¨¢s importante para los m¨¦dicos segu¨ªa siendo que el tratamiento, en este caso, significaba vivir o morir.
Aunque estas disputas judiciales son raras en EE UU, s¨ª hay antecedentes. En 2009, la madre de un chico de 13 a?os lleg¨® a los tribunales del Estado de Minnesota para evitar que le sometieran a quimioterapia y le dejaran tratarse con m¨¦todos naturales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.