Holanda teme una subida de medio grado que desborde su nivel de aguas
"Este pa¨ªs existe porque llevamos a?os prepar¨¢ndonos para el futuro; no solo para reaccionar ante un desastre", dice Henk Ovink, enviado especial del agua
Naciones Unidas calcula que hay en el mundo 25 millones de refugiados por los problemas del agua derivados del cambio clim¨¢tico. Para 2050, cree que la cifra habr¨¢ aumentado a 250 millones: el 10% de ?frica. Trasladando la cifra a Holanda, es como si 1,7 de los 17 millones de sus habitantes tuviera que dejar su hogar. El 30% del territorio del pa¨ªs est¨¢ bajo el nivel del mar y un 60% presenta riesgo de inundaci¨®n. Para los holandeses resulta vital no superar una subida de temperaturas de 1,5 grados, como han pedido en un informe los asesores de la ONU. Medio grado m¨¢s duplicar¨ªa la posibilidad de una elevaci¨®n extrema del nivel de las aguas.
La altura que alcanzar¨ªan no est¨¢ clara. El IPCC (siglas en ingl¨¦s del informe de Naciones Unidas) habla de un aumento de entre 30 y 60 cent¨ªmetros en este siglo. En cambio, estudios gubernamentales holandeses se?alan hasta 1 o 2 metros de subida del Mar del Norte para el a?o 2100, si las temperaturas se incrementan hasta 2 grados. Como Holanda es geogr¨¢ficamente un delta, el deshielo de los glaciares derivado del calentamiento global y las lluvias extremas previstas pueden desbordar a su vez los tres grandes r¨ªos que la atraviesan: Rin, Mosa y Escalda. Y lo contrario, las sequ¨ªas subsiguientes, tambi¨¦n se?aladas por los expertos, complicar¨ªan la navegaci¨®n fluvial.
¡°El agua es esencial en cualquiera de sus principales estados: poca, demasiada o contaminada. Holanda existe porque llevamos a?os prepar¨¢ndonos para el futuro; no solo para reaccionar ante un desastre. Su manejo y su seguridad aparecen en la Constituci¨®n, que involucra a las autoridades locales, regionales, provinciales y nacionales¡±, dice Henk Ovink, enviado especial de su pa¨ªs para asuntos del agua. Recibe a la prensa internacional poco antes de salir para Banglad¨¦s, situado en el delta del r¨ªo Ganges. ?l re¨²ne a Gobiernos, expertos y empresas mundiales para ¡°afrontar juntos la amenaza, pero tambi¨¦n oportunidades del agua¡±. ¡°Holanda es otro delta vulnerable ante la alteraci¨®n de las temperaturas. El mensaje de los expertos de la ONU nos obliga a pasar a la acci¨®n. La clave est¨¢ en colaborar, ser flexibles y adaptarse, porque no hay una p¨ªldora que solucione el cambio de clima¡±. Ovink dice que todos cuentan en este empe?o, ¡°pero si el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, abandona, no se para el mundo¡±. ¡°Con o sin su ayuda, hay que mitigar el calentamiento global y sacar partido al agua porque nos va la vida en ello¡±.
El pasado 16 de octubre, poco despu¨¦s de esta charla, Ban Ki-moon, ex secretario general de Naciones Unidas, el multimillonario fil¨¢ntropo Bill Gates, y la directora general del Banco Mundial, Kristalina Georgieva, presentaron en La Haya la Comisi¨®n Global de adaptaci¨®n al cambio clim¨¢tico. Eligieron Holanda por su lucha y manejo del agua, y esperan poner as¨ª en marcha ¡°un movimiento global, con expertos y empresas, para poder adaptarnos a tiempo al nuevo entorno que nos espera¡±.
Mucho antes de que el alza del nivel del mar se convirtiera en una amenaza acuciante, Holanda tuvo su ¡°momento Katrina¡±, el hurac¨¢n que inund¨® Nueva Orleans en 2005 causando en total cerca de 2.000 muertos. Se produjo en 1953, y como ocurri¨® en Estados Unidos, los diques cedieron debido a su mal estado. En el caso holand¨¦s, el factor desencadenante fue la combinaci¨®n de un temporal y una marea viva procedente del Mar del Norte. Perecieron 1.800 personas en la provincia de Zelanda, al suroeste, y la tragedia oblig¨® a reforzar sus defensas. Ese mismo a?o se puso en marcha el Plan Delta. Cost¨® el equivalente a 5.000 millones de euros actuales, para levantar represas, esclusas, diques y compuertas hidr¨¢ulicas contra la subida del agua en las provincias afectadas, alrededor de la desembocadura del Rin, Mosa y Escalda. En 1997, los trabajos culminaron con la barrera de Maeslant, ubicada a la entrada del puerto de R¨®terdam, en uno de los brazos del delta formado por el Rin y el Mosa. Protege a la ciudad, y a Zelanda, de las inundaciones. La compuerta se cierra cuando el caudal se eleva tres metros m¨¢s de lo normal, y su mantenimiento es riguroso, en especial ahora.
Estas barreras han evitado nuevas cat¨¢strofes y han permitido gestionar los r¨ªos de otro modo. Pensando en un deshielo m¨¢s r¨¢pido de lo previsto, se puso en marcha en 2010 el programa Espacio para el r¨ªo, que les deja inundar la tierra circundante de forma controlada. Hace sitio a base de apartar de la orilla los antiguos diques de contenci¨®n, y de rebajar el lecho para que pueda llevar m¨¢s agua. Incluye el Ijssel, afluente del Rin, y para 2019 el Gobierno ha reservado ¡°375 millones de euros para adaptarnos a los retos del cambio clim¨¢tico¡±, seg¨²n explican fuentes del Programa del Plan Delta.
Afsluitdijk, una barrera contra las mareas que dejar¨¢ pasar a los peces
El buen manejo del agua tiene su m¨¢xima expresi¨®n en Holanda en la barrera contra las mareas -Afsluitdijk- que cierra desde 1932 el Zuiderzee (Mar del Sur), la antigua bah¨ªa formada por el Mar del Norte al noroeste del pa¨ªs. El agua atrapada dentro se convirti¨® en un lago de agua dulce -Ijsselmeer- que toma el nombre del r¨ªo Ijssel. ¡°Afsluitdijk debe soportar las grandes tormentas previstas por la ciencia a raz¨®n de una cada 10.000 a?os, y no ha dejado de renovarse. Hasta 2023, se invertir¨¢n 900 millones de euros en su conservaci¨®n. El cambio de clima obligar¨¢ a reforzarla poniendo en el agua 75.000 bloques de cemento de 6.500 kilos cada uno. Tambi¨¦n se construir¨¢ un canal para facilitar la migraci¨®n de los peces, que no pueden cruzarla hoy, e impulsaremos la econom¨ªa local subrayando la faceta tur¨ªstica de un lugar pensado en origen para protegernos¡±, afirma Tjalling Dijkstra, gerente del programa de renovaci¨®n.
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