Terapia para hombres que han ejercido la violencia machista
El Servicio de Atenci¨®n a Hombres del Ayuntamiento de Barcelona atiende a 330 hombres que han pedido ayuda
Enrique abri¨® el Google y tecle¨®: ¡°ayuda hombres violencia de g¨¦nero¡±. ¡°Porque me di cuenta de que mis relaciones no eran sanas, pasaron cosas que me asustaron mucho y pens¨¦ que as¨ª no pod¨ªa continuar¡±, relata. Y dio con el SAH, el Servicio de Atenci¨®n a Hombres del Ayuntamiento de Barcelona, un servicio gratuito y voluntario dirigido a j¨®venes u hombres que han ejercido o ejercen la violencia machista, sobre todo contra sus parejas, y deciden cambiar su comportamiento.
Ha transcurrido m¨¢s de un a?o desde entonces. Enrique acudi¨® a una decena de sesiones individuales con psic¨®logos del servicio y despu¨¦s a las 32 sesiones de terapia grupales del programa que ofrece el SAH. Ahora tiene controles cada seis meses. ¡°He pasado de esperar en la calle antes de tocar el timbre del SAH, porque me daba verg¨¹enza que alguien me reconociera, a estar aqu¨ª cont¨¢ndolo, muy orgulloso del esfuerzo que he hecho y de la mejora que ha supuesto para m¨ª y mi entorno. Lo cuento por si puedo ayudar a alg¨²n hombre¡±, se?ala.
Enrique lanza una alerta: ¡°En los medios siempre sale el final dram¨¢tico¡± de la violencia de g¨¦nero, ¡°pero hay muchos niveles previos y yo no era consciente¡±. ¡°Cosas tan sencillas como no hablar a tu pareja en todo un d¨ªa, utilizar el sarcasmo, menospreciar a tu pareja o a un compa?ero de trabajo¡ eso tambi¨¦n es violencia y es muy doloroso para la persona que lo vive, si no te lo dicen no entiendes que es violencia, como si solo lo fuera la f¨ªsica¡±, reconoce y asegura que el trabajo interno es duro y dif¨ªcil, pero que ha valido la pena. ¡°Compensa, por uno mismo y por la gente que quieres¡±, resume. En su caso, la relaci¨®n de pareja no lleg¨® a romperse. ¡°Estamos mejor que antes, y todo lo que he aprendido tambi¨¦n lo pongo en pr¨¢ctica en otros espacios. Por un lado tienes m¨¢s presi¨®n, pero es bueno porque interiorizas [lo aprendido]¡±.
El testimonio de Enrique permite entender su evoluci¨®n durante la terapia. ¡°Llegas a las sesiones de grupo y apenas hablas, respondes con monos¨ªlabos, pero a medida que te abres y explicas, m¨¢s respuesta tienes del resto¡±, relata y no esconde la dureza de ponerte en el lugar del otro o admitir que las actitudes que ha dejado atr¨¢s ¡°las haces porque no est¨¢s bien, o te sientes mal o inseguro¡±. ¡°Es importante reconocer que el ¨²nico responsable de lo que haces eres t¨², no puedes estar con ¡®el otro me ha dicho o me ha hecho¡¯¡±. Y habla de ¡°desaprender¡±. ¡°Igual que has aprendido comportamientos, los puedes desaprender¡±, asegura y cita la herramienta que resulta m¨¢s ¨²til: ¡°La empat¨ªa, la asertividad, entender las necesidades de la persona que tienes delante¡±.
El Ayuntamiento de Barcelona ha doblado las horas de profesionales del SAH desde 2017 y ha querido explicar este mi¨¦rcoles su funcionamiento coincidiendo con la semana contra las violencias de g¨¦nero. Unas fechas en las que ha lanzado una campa?a de v¨ªdeos contra las violencias machistas que apela a los hombres. ¡°Tenemos la convicci¨®n de que cambiaremos la sociedad si nos sentimos todos y todas empoderadas, es imprescindible fortalecer servicios que acompa?en la transformaci¨®n personal de los hombres¡±, ha defendido la teniente de alcalde de Derechos Sociales, Feminismos y LGTBI, Laura P¨¦rez. Desde que se reforz¨® el SAH, en 2017 ha pasado de atender 190 hombres a 330 este mes de octubre.
La directora del SAH, Mariona Auradell, destaca que no hay un ¨²nico perfil entre los hombres que ejercen la violencia: son de todas las clases sociales, or¨ªgenes y niveles formativos. Los casos que atiende en servicio, apunta, son hombres que han ejercido la violencia psicol¨®gica y f¨ªsica en la pareja, que en general no han sido condenados, y tienen entre 35 y 55 a?os. Los estudios hechos sobre el servicio, celebra, "permiten concluir que los resultados muestran claramente que el SAH es eficaz para reducir la violencia psicol¨®gica, de control e intimidaci¨®n y la benevolente, no tanto las conductas hostiles, y tambi¨¦n reduce la violencia f¨ªsica¡±. Y a?ade que ¡°los resultados positivos han sido contrastados por las parejas o exparejas¡±.
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