¡°Los virus respiratorios disminuyen su poder de transmisi¨®n en tiempo c¨¢lido pero para esta pandemia eso no sirve¡±

Hay dos clases de virus, los envueltos y los desnudos y, al contrario de lo que cabr¨ªa esperar, los desnudos son m¨¢s resistentes, al fr¨ªo, al calor, a las radiaciones. La buena noticia es que el Covid-19 es de los envueltos. La membrana celular que lo recubre no le evita la fragilidad. Y ah¨ª se acaban las buenas noticias. Aunque varias l¨ªneas de investigaci¨®n m¨¦dicas est¨¢n tratando de acorralarle ya ha matado a miles de personas en su viaje alrededor del mundo. Desde el principio de la epidemia, se especul¨® sobre su mala relaci¨®n con el calor y se atisb¨® la esperanza de que en un clima c¨¢lido su poder mort¨ªfero disminuyera, pero ya ha recorrido latitudes diversas y su comportamiento es similar.

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En China, origen de la epidemia, se ha investigado sobre esto pero no se ha encontrado un dato concluyente para la humedad, ni la presi¨®n atmosf¨¦rica, ni el fr¨ªo ni el calor. ?De d¨®nde surge entonces esta creencia que circula por las redes? ¡°En general, los virus respiratorios disminuyen su poder de transmisi¨®n en los meses m¨¢s calientes y secos. Un largo y crudo invierno modifica las caracter¨ªsticas f¨ªsicas del tracto respiratorio porque al entrar el aire fr¨ªo por la nariz la vellosidad de la mucosa se mueve menos¡±, dice Mauricio Rodr¨ªguez ?lvarez, profesor de Virolog¨ªa de la Universidad Nacional Aut¨®noma de M¨¦xico (UNAM). El constante movimiento de esa escobilla atrapa polvo, moco, virus, bacterias y los empuja mec¨¢nicamente desde los pulmones hasta la tr¨¢quea, desde donde pasan al est¨®mago. ¡°Las condiciones del invierno no favorecen este proceso y, adem¨¢s, las personas se desenvuelven en lugares menos ventilados y con mayor concurrencia¡±, sigue este experto, vocero de la comisi¨®n de la UNAM para el Covid-19.

Una meteorolog¨ªa seca tampoco va bien al contagio porque las gotitas que dispersan el virus pierden su capacidad de transmisi¨®n. El agua en exceso tambi¨¦n lastima al virus, por eso se recomienda lavar las manos abundantemente. Pero todas estas son lecciones generales para los virus end¨¦micos, es decir, para las gripes comunes. Solo caben consideraciones gruesas, por ejemplo, sostener que estos virus encuentran mejor acomodo en las calles de Helsinki que en el desierto. ¡°En el caso de una pandemia como la actual todo esto no sirve, como se ha comprobado. Y adem¨¢s no estamos inmunizados, como en los casos end¨¦micos¡±, se?ala Rodr¨ªguez ?lvarez.

La gripe del turista

M¨¦xico tiene tres picos de influenza al a?o, el primero en febrero, coincidiendo con las semanas m¨¢s fr¨ªas; el segundo se dar¨¢ hacia abril, y un tercero en pleno verano en el sureste del pa¨ªs, como consecuencia de la entrada de turistas del hemisferio sur, que llegan de su invierno con el virus puesto. ¡°Esa intromisi¨®n en los meses de calor no es suficiente para que se propague por todo el pa¨ªs¡±, sostiene el experto. Pero la epidemia actual s¨ª y le dar¨¢ igual si llueve o hace sol. Llegar¨¢.

Y no sirve la vitamina B ni hay riesgo si se toma ibuprofeno. Esas leyendas surgen a veces de la propia ciencia, mal explicada o peor entendida. ¡°El coronavirus tiene predilecci¨®n por los receptores de la enzima convertidora de angiotensina, que est¨¢ en el tracto respiratorio, sobre todo en los pulmones¡±, explica el profesor de la UNAM. Y una vez digerida esta frase se pueden comprender las tres hip¨®tesis m¨¦dicas sobre las que se trabaja que se derivan de ella.

La primera es que los ni?os tienen menos receptores de esta enzima de los que le gustan al coronavirus. Y es un hecho que, al menos cl¨ªnicamente, est¨¢n menos afectados.

La segunda l¨ªnea m¨¦dica en la que se busca si no una soluci¨®n s¨ª un entendimiento previo es la que ha extendido el bulo del ibuprofeno en las redes sociales. ¡°Algunos antiinflamatorios promueven la s¨ªntesis de esos receptores de la enzima. Eso favorecer¨ªa el desarrollo de la enfermedad, pero la hip¨®tesis es tan primaria que no hay base cient¨ªfica a¨²n para afirmar nada de nada al respecto¡±, dice Mart¨ªnez ?lvarez. Sirva en todo caso este ejemplo para ver c¨®mo se contagia un rumor sin consistencia cient¨ªfica.

La tercera l¨ªnea m¨¦dica es de ¨ªndole psicosocial. Es bien curiosa y parad¨®jica. Los pacientes con hipertensi¨®n arterial (presi¨®n alta) suelen tomar unos medicamentos de la familia de los priles, llamados as¨ª por las marcas con las que se comercializan, como el Captopril. Se trata de inhibidores de la enzima, as¨ª que estas personas tienen menos receptores por los que el coronavirus siente afinidad, ergo, estar¨ªan en menor riesgo, y sin embargo ocurre todo lo contrario. De las cuatro familias de enfermedades cr¨®nicas: los inmunodeprimidos, los neum¨®patas, los infartados y los hipertensos, son estos ¨²ltimos los que han demostrado m¨¢s vulnerabilidad en esta crisis del Covid-19. ¡°Los hipertensos se cuidan menos, son m¨¢s activos, viajan m¨¢s, tienen m¨¢s relaciones sociales y todo ello propicia el contagio y sus complicaciones. En las etapas de contagio inadvertido como las que ha pasado China, los hipertensos fueron muy afectados¡±. Es algo que no duele, ni asfixia, no se siente uno mal. O como dice el profesor: ¡°Se creen m¨¢s chingones y eso les pasa factura¡±.