Organizar la selectividad se convierte en un sudoku imposible

Con las competiciones de f¨²tbol y los conciertos parados por la pandemia y las oposiciones suspendidas, solo se vislumbra en el horizonte un acto que movilice a grandes masas: la selectividad. A ella, si lo permite el Ministerio de Sanidad, se calcula que se presentar¨¢n 217.000 aspirantes a entrar en la Universidad el curso que viene, pero podr¨ªan ser m¨¢s si sus profesores ¡ªcomo la comunidad educativa imagina¡ª abren la mano a la hora de conceder el t¨ªtulo de bachiller. Esos 217.000 alumnos equivalen a la poblaci¨®n de Oviedo. Por eso, la log¨ªstica de las pruebas es tan compleja que tiene sin dormir a sus organizadores ¡ªun consorcio formado por representantes de las universidades p¨²blicas y de los Gobiernos auton¨®micos¡ª, porque al mastod¨®ntico montaje de cada a?o se suma ahora garantizar que no se contagien los alumnos ni los profesores de vigilancia, correctores, ujieres y el personal de limpieza y transporte.

Los aspirantes, tras el retraso de las fechas inicialmente previstas, se examinar¨¢n entre el 22 de junio y el 10 de julio, en la convocatoria ordinaria, y antes del 10 de septiembre en la extraordinaria, pero el Gobierno todav¨ªa no tiene cerradas las instrucciones para la ocasi¨®n. ¡°No sabemos si el protocolo lo va a dar Sanidad, Universidades¡­ Necesitamos saber algo la primera o segunda semana de mayo, porque gestionar tal volumen de ex¨¢menes es complicad¨ªsimo. Tenemos que informar a los estudiantes, ubicar a los alumnos con problemas de aprendizaje en alg¨²n lugar [tienen unas pruebas adaptadas para ellos], etc¨¦tera¡±, enumera Rosa de la Fuente, vicerrectora de Estudiantes de la Universidad Complutense, encargada siempre de coordinar la EVAU en la Comunidad de Madrid.

Distancias y desinfecci¨®n

Una portavoz de Educaci¨®n explica que no hay un equipo de trabajo de las pruebas en el ministerio porque son las comunidades las que se encargan de la organizaci¨®n, pero detalla que el protocolo de actuaci¨®n de Sanidad dar¨¢ indicaciones sobre la distancia social, la desinfecci¨®n de las aulas, el uso de hidrogeles o las mascarillas.

Silvia Carlos, m¨¦dico de Salud P¨²blica y profesora de la Universidad de Navarra, lo tiene claro: ¡°M¨¢s que aulas grandes se necesita que est¨¦n ventiladas y con una ratio peque?a de estudiantes¡±, explica, porque no se sabe cu¨¢nto tiempo se mantiene el virus en el ambiente. Adem¨¢s, ¡°al acceder al examen los alumnos deber¨ªan mantener las distancias, como en la cola del supermercado, y lavarse las manos seg¨²n entran con hidrogel¡±. Durante la prueba, Carlos cree que los aspirantes no deber¨ªan quitarse la mascarilla, porque ¡°pueden estar asintom¨¢ticos y contagiar, y por supuesto, los que tengan covid-19 se tendr¨¢n que quedar en casa¡±.

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¡°Nos preocupa que se sature el sistema inform¨¢tico durante la evaluaci¨®n de los alumnos¡±

A la epidemi¨®loga le preocupa la cadena de custodia de los ex¨¢menes. Ella recomienda que se dejen almacenados 24 horas, sin pasar de mano en mano, para asegurarse de que no hay contagios. ¡°Se ha comprobado que en el cart¨®n el virus puede vivir hasta 24 horas¡±, recuerda. Y este estricto protocolo se tiene que repetir durante cuatro d¨ªas seguidos ¡ªla duraci¨®n de los ex¨¢menes¡ª, un d¨ªa m¨¢s en las regiones con lengua propia.

¡°Necesitamos m¨¢s aulas y m¨¢s personal repartido en ellas, lo que supone m¨¢s dinero¡±, prosigue De La Fuente. ¡°Todos los evaluadores y el personal que est¨¢ all¨ª tienen que llevar EPI [equipos de protecci¨®n individual], y ese material lo tiene que conseguir la Comunidad de Madrid, porque la compra es complicada¡±, argumenta. En Madrid se plantean tres escenarios. Uno es abrir m¨¢s aulas en las universidades. ¡°Por ejemplo, nosotros podr¨ªamos utilizar espacios de la Polit¨¦cnica, con la que compartimos campus, que eval¨²a a 1.200 alumnos y nosotros a 12.000¡±, explica. El segundo, es centralizar parte de los ex¨¢menes en institutos, pero los espacios comunes y los ba?os son peque?os. Y el tercero, es mover a los alumnos al palacio de congresos de Ifema. En ese caso, ¡°no hay problemas de espacio, pero s¨ª de transporte. Preocupa concentrar a tanta gente y cabe la posibilidad de poner lanzaderas. Tambi¨¦n en Ifema hay que separar por secciones los alumnos adscritos a cada universidad¡±, prosigue De La Fuente.

¡°Dispersar no puede ser cambiar a los alumnos de sitio. En Arag¨®n pensamos en llevarles a la feria de muestras de Zaragoza, pero el problema no es tanto el espacio, como que luego se juntan a la salida del examen, a la entrada¡­¡±, remarca ?ngela Alcal¨¢, vicerrectora de Estudiantes de la Universidad de Zaragoza. La Consejer¨ªa de Educaci¨®n y su instituci¨®n han optado por abrir institutos en cada comarca para que acojan a los aspirantes de la zona y no saturar las sedes habituales de Teruel y Huesca capital, adem¨¢s de Zaragoza. A¨²n no saben qu¨¦ centros educativos ser¨¢n. Alcal¨¢, que es profesora de Anatom¨ªa, se preocupa por la hora de la comida. ¡°Se tendr¨¢n que llevar un bocadillo si siguen los bares cerrados¡±.

En Andaluc¨ªa, donde se examinan unos 50.000 bachilleres, las universidades p¨²blicas se turnan en la organizaci¨®n y este a?o le ha tocado a Huelva, acostumbrada a magnitudes mucho m¨¢s peque?as. En la provincia se eval¨²an 2.500 candidatos y ya se prepara todo para abrir alg¨²n instituto en otras comarcas para dispersar y que los estudiantes no se desplacen. Algo parecido har¨¢n en el resto de la comunidad aut¨®noma. En Granada se especula con el uso de su palacio de congresos.

La vicerrectora de Estudiantes de Huelva, ?ngela Sierra, explica que hasta ahora concentraban a los alumnos en tres maxiaularios de la universidad, con capacidad para 6.000 estudiantes en clase y 2.500 en caso de examen (hay que dejar sitios libres a los lados). Ahora contar¨¢n con m¨¢s o menos espacios en funci¨®n de la ratio de alumnos por clase que determine Sanidad. ¡°Pero lo preocupante no es cuando est¨¦n sentados, sino que los ex¨¢menes duran 90 minutos y hay descansos, tienen que pasar cada vez con su DNI¡­ Afuera har¨¢ mucho calor¡±.

La semana que viene, a petici¨®n de las autonom¨ªas, habr¨¢ una reuni¨®n telem¨¢tica de la Conferencia General de Pol¨ªticas Universitarias en la que est¨¢ presente el Ministerio de Universidades. Muchas decisiones a¨²n est¨¢n en el aire. La Comunidad Valenciana busca sitios, pero descarta los institutos. Lo contrario que en Baleares. ¡°Los alumnos de Menorca, Ibiza y Formentera realizaban sus ex¨¢menes en aulas de institutos y se est¨¢ buscando una alternativa para garantizar que los puntos de examen sean lugares acondicionados, refrigerados y con m¨¢s espacio entre los estudiantes¡±, explica una portavoz de la Universidad de Baleares. Navarra y Galicia no planean cambios, mientras Asturias, si los hace, ser¨¢n siempre para contar con m¨¢s espacios en las sedes de siempre, que acogen a 4.000 aspirantes: Oviedo, Gij¨®n, Avil¨¦s, Mieres, Cangas del Narcea, Tapia y Ribadesella.

En paralelo, hay universidades privadas que no piden nota de selectividad para entrar y otras que optan por hacer su propio acceso, que han tenido que modificar. El CEU San Pablo evalu¨® a los candidatos al grado de Medicina online con una herramienta de reconocimiento facial. No pueden retrasar la prueba porque el 30% de sus alumnos son extranjeros. Este s¨¢bado 2.071 j¨®venes buscan una plaza en la Universidad de Navarra con esta herramienta, pero durante el a?o examinaron a otros 2.500. Mientras Icade e ICAI, de la Universidad de Comillas, por el momento han retrasado su selecci¨®n ¡ªque sigue siendo presencial¡ª, aunque en algunos t¨ªtulos la criba se va a hacer con entrevistas personales online.

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