Canad¨¢ quiere el negocio de la marihuana legal en M¨¦xico
La inminente legalizaci¨®n total del cannabis en el pa¨ªs abre el camino para un negocio de miles de millones de d¨®lares y una carrera para ver qui¨¦n se quedar¨¢ con los beneficios
Hace cuatro meses, en el Senado de un pa¨ªs donde la guerra contra el narcotr¨¢fico ha dejado?m¨¢s de 250.000 muertos en poco m¨¢s de una d¨¦cada, un empresario canadiense dedicado al negocio del cannabis dijo ante los congresistas: "Su localizaci¨®n en el mundo es perfecta, sus costos laborales son perfectos, su clima es perfecto (...) Dejen que las empresas privadas expandan sus negocios, que hagan lo que saben hacer". Las palabras de Erick Factor, fundador de MYM Nutraceuticals, dejaban claro el giro en el debate sobre las drogas y tambi¨¦n los intereses en juego detr¨¢s del proyecto para la legalizaci¨®n total del cannabis en M¨¦xico. El pa¨ªs podr¨ªa convertirse en los pr¨®ximos meses en el mayor mercado de marihuana legal en el mundo. Y nadie se quiere quedar fuera.
Desde hace meses, los ojos de los grandes nombres en el negocio del cannabis est¨¢n puestos en el Senado mexicano. Algunas empresas tienen cabilderos que recorren los pasillos de la C¨¢mara alta con la esperanza de quedarse con una tajada de un negocio multimillonario. Algunos ya han hablado con un pol¨ªtico de alto perfil para que sea el sherpa que los gu¨ªe hacia la tierra prometida. Otros grupos revisan con lupa los requisitos para los peque?os productores en una industria que parec¨ªa inimaginable hace unos a?os. Varios inversores extranjeros siguen el proceso paso a paso, sobre todo de Canad¨¢,?el primer pa¨ªs industrializado que legaliz¨® el cannabis recreativo y el que tiene la industria cann¨¢bica m¨¢s grande del mercado mundial.
Pero mientras unos siguen el dinero, otros miran con suspicacia. Organizaciones civiles advierten de que una ley a la medida de los grandes capitales esfumar¨ªa la posibilidad de incorporar a peque?os productores y campesinos al mercado legal, y de pagar una deuda hist¨®rica por una pol¨ªtica prohibicionista que ha matado m¨¢s que las propias drogas. "Tal como est¨¢ ahora, la propuesta de ley privilegia a las empresas extranjeras porque necesitar¨ªas una inversi¨®n multimillonaria para entrar a ese mercado", afirma Zara Snapp, fundadora del Instituto RIA, dedicado a la investigaci¨®n de pol¨ªticas p¨²blicas. "Es preocupante, no queremos otra industria extractiva que explote los recursos y se lleve los beneficios", agrega.
En 2018, la Suprema Corte de Justicia declar¨® inconstitucionales cinco art¨ªculos de la Ley General de Salud que prohib¨ªan el consumo de cannabis con fines recreativos y dio un plazo de un a?o al Legislativo para que creara una nueva regulaci¨®n. Morena ¨Del partido en el Gobierno tras las elecciones de ese a?o¨D, y la oposici¨®n vieron el fallo como una oportunidad para impulsar una ley exhaustiva, que convertir¨ªa a M¨¦xico en el tercer pa¨ªs del mundo en legalizar por completo la marihuana. Pero el plazo venci¨® en octubre pasado sin que los legisladores se pusieran de acuerdo para emitir la ley, criticada por poner barreras de entrada infranqueables para los peque?os productores.
Ricardo Monreal, el hombre fuerte de Morena en el Senado, achac¨® el atolladero a la falta de consenso y a la influencia de grupos de presi¨®n. "Es impresionante la cantidad de cabilderos que est¨¢n por aqu¨ª", dijo. La Suprema Corte concedi¨® una pr¨®rroga que termina en abril y el Senado, que inici¨® sesiones el s¨¢bado pasado, ya apura un proyecto de ley para que se discuta en el pleno. Mientras tanto, los actores involucrados permanecen en vilo.
"M¨¦xico es definitivamente muy interesante, el pr¨®ximo gran acontecimiento para muchos empresarios del cannabis", se?ala en entrevista Factor, el empresario que particip¨® en un foro del Senado en octubre pasado. Factor dice que el escepticismo es comprensible, pero que hay oportunidades de negocio justas para todos los involucrados. "No calificar¨ªa mi visita como lobbying, se trat¨® m¨¢s bien de compartir la experiencia y el know how de nuestro pa¨ªs para dar claridad a los legisladores mexicanos", asegura.
"En M¨¦xico hay una oportunidad ¨²nica de contar con una legislaci¨®n amplia que aborde el tema del cannabis desde su producci¨®n hasta su comercializaci¨®n", afirma Canopy Growth, la empresa canadiense m¨¢s grande del sector en t¨¦rminos de capitalizaci¨®n del mercado, por correo electr¨®nico. "Estamos siguiendo con inter¨¦s el desarrollo de la legislaci¨®n y regulaci¨®n en M¨¦xico", dice la compa?¨ªa, pero insiste en que "a¨²n es muy prematuro" cualquier an¨¢lisis del nuevo marco legal. Canopy, inscrita en el padr¨®n de cabilderos del Senado, evita pronunciarse sobre las cr¨ªticas y sobre lo que ha discutido con los legisladores mexicanos.
La industria de Canad¨¢ ve en M¨¦xico un mercado potencial de 2.250 millones de d¨®lares que depender¨¢ en gran medida de que se libere la marihuana para uso recreativo, seg¨²n la consultora Cannacord Genuity. Sus analistas creen que la propuesta que fracas¨® en octubre ofrece oportunidades de negocio "factibles, pero no ideales" porque limitaba la participaci¨®n de extranjeros al 20% del capital social de una empresa e imped¨ªa la integraci¨®n vertical; es decir: que una sola compa?¨ªa controle varias fases del proceso de producci¨®n y comercializaci¨®n.
La consultora considera que Khiron, una empresa colombocanadiense, es la mejor posicionada para entrar en el mercado mexicano. Tiene experiencia con regulaciones en otros pa¨ªses de la regi¨®n como Colombia y Uruguay, y cuenta con el expresidente?Vicente Fox (2000-2006) en su junta de directores, una carta de presentaci¨®n que incluye en pr¨¢cticamente cada comunicado e informe financiero. Khiron planea llegar a M¨¦xico en el primer trimestre de este a?o y aspira a llegar a 11,7 millones de consumidores. EL PA?S solicit¨® una entrevista, pero la compa?¨ªa no contest¨®. Fox declin¨® por motivos de agenda. Aurora Cannabis, otra compa?¨ªa de Canad¨¢ que anunci¨® en diciembre del a?o pasado la compra de Farmacias Magistrales, la primera firma que obtuvo el permiso de importar materias primas con tetrahidrocannabidol (THC) a M¨¦xico, tampoco contest¨® las solicitudes. Al igual que Aphria, una de las compa?¨ªas m¨¢s grandes del mercado canadiense. Casi todos los interesados optan por la cautela y el silencio se vuelve elocuente. Nadie quiere arriesgarse ante un proceso legislativo en el que faltan muchas cosas por decidirse.
La llegada de capitales canadienses caus¨® pol¨¦mica en Colombia, que emiti¨® en 2017 una ley para regular el consumo y exportaci¨®n de cannabis medicinal. "Khiron y otras empresas con m¨²sculo financiero siempre iban un paso adelante", explica Luis Felipe Cruz, investigador de la organizaci¨®n De Justicia. "Ten¨ªan el dinero y los expertos, incluso mayor capacidad t¨¦cnica que el Estado, y por debajo de la mesa dictaban c¨®mo ten¨ªa que ser la regulaci¨®n", sostiene el especialista colombiano. "El Gobierno no supo manejar bien las expectativas y no cambi¨® nada para los productores en general ni en los mercados ilegales, que son trasnacionales", comenta. Diana Paola Valenzuela, directora jur¨ªdica de la empresa colombiana Anandamida Gardens, detalla que "ha habido trabas para todos, incluso para fondos canadienses que financiaron empresas locales y tuvieron que abrirse camino".
Algunas voces cr¨ªticas califican las pr¨¢cticas de las empresas canadienses como "colonialismo cann¨¢bico" y otras afirman que hay espacio para todo tipo de actores. El reto para el Congreso mexicano es enorme. En juego est¨¢ en garantizar los derechos de los consumidores, cambiar el rumbo de una pol¨ªtica antidrogas que ha hundido al pa¨ªs en la peor crisis de violencia de su historia reciente, delinear las reglas para el que podr¨ªa convertirse en el mayor mercado legal de marihuana hasta ahora y lograr un consenso pol¨ªtico que resista las presiones y los intereses dentro y fuera de la coalici¨®n de gobierno. Tienen tres meses para lograrlo.
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