?Tengo que hacer cuarentena? ?Siguen llamando los rastreadores? As¨ª se gestionan los contactos de covid en la nueva normalidad
Los expertos piden no bajar la guardia pese a la ca¨ªda de la incidencia: ¡°No podemos pensar que la faena est¨¢ rematada. No hemos terminado con la pandemia¡±
Espa?a se aproxima de nuevo a la llamada nueva normalidad. La poblaci¨®n arranca un nuevo curso laboral ¡ªy escolar¡ª con la pandemia a la baja y la mayor¨ªa de los ciudadanos vacunados. Seguir¨¢ habiendo casos positivos, brotes y cuarentenas, pero las reglas del juego han cambiado: si bien las medidas b¨¢sicas de protecci¨®n, como la mascarilla, el lavado de manos o la distancia interpersonal, permanecen sobre la mesa, se flexibilizan los aislamientos de contactos vacunados, por ejemplo. Esto significa, de facto, que las cuarentenas de contactos se reducir¨¢n de forma considerable porque los pinchazos se han generalizado y cerca del 75% de la poblaci¨®n ya tiene la pauta vacunal completa, que les protege contra las formas graves de la covid.
Con la incidencia acumulada a 14 d¨ªas en 109 casos por 100.000 habitantes y buena parte de la poblaci¨®n protegida con la vacuna, los expertos asumen que la amenaza de una ola de coronavirus de la misma gravedad que las anteriores es poco probable. Aunque no se puede bajar la guardia, matiza Salvador Peir¨®, epidemi¨®logo de la Fundaci¨®n para el Fomento de la Investigaci¨®n Sanitaria y Biom¨¦dica de la Generalitat valenciana: ¡°Estamos en un momento de incertidumbre, no sabemos c¨®mo evolucionar¨¢ la transmisi¨®n. Esperamos un cierto repunte a finales de mes, pero esperamos que sea m¨¢s leve en cuanto al da?o. La vacunaci¨®n no acaba de ser importante respecto a la transmisi¨®n, as¨ª que tendremos que guiarnos por los datos y actuar¡±.
De hecho, si bien la vacunaci¨®n tambi¨¦n act¨²a de cortafuegos y ayuda a limitar la transmisi¨®n del virus, el pinchazo no es esterilizante: las personas con pauta completa tambi¨¦n contagian y se contagian ¡ªla ministra de Sanidad, Carolina Darias, dijo el pasado julio que el 5,5% de las personas infectadas en las cinco semanas anteriores ten¨ªan la pauta vacunal completa¡ª. Daniel L¨®pez-Acu?a, exdirector de Emergencias de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud opina que hay que mantener la alerta pese a los altos ¨ªndices de vacunaci¨®n y apunta que la contenci¨®n de la pandemia pasar¨¢ por ¡°el control adecuado de los brotes¡±.
Con todo, en los ¨²ltimos meses ha habido cambios en las directrices de control de la pandemia y el nuevo curso arranca con un marco diferente al de septiembre de 2020. As¨ª se queda la hoja de ruta de las medidas de control y protecci¨®n ante la pandemia:
Un caso positivo en el trabajo o en la calle. Si una persona da positivo en covid, tendr¨¢ que aislarse durante, al menos, 10 d¨ªas. Eso no cambia. Sin embargo, si durante buena parte de la pandemia la regla general era aplicar tambi¨¦n la cuarentena de 10 d¨ªas a todos los contactos estrechos del positivo, esta directriz se limita desde el pasado junio a las personas no vacunadas. Los contactos estrechos que hayan completado la pauta vacunal o los que hayan pasado la enfermedad en los ¨²ltimos seis meses se libran del aislamiento, aunque el Ministerio de Sanidad recomienda realizarles, al menos, una prueba diagn¨®stica durante los d¨ªas posteriores.
Con la inmensa mayor¨ªa de la poblaci¨®n vacunada, esta medida implicar¨¢ una reducci¨®n importante de las cuarentenas entre eventuales contactos estrechos. Los expertos consultados, no obstante, muestran sus dudas sobre la conveniencia de esta flexibilizaci¨®n de los aislamientos e instan a extremar las precauciones en cualquier caso si una persona vacunada es contacto de un positivo. ¡°Esta medida la veo con muchas dudas. Me pasa con todas las medidas diferenciales con vacunados: lo veo delicado porque sabemos que los vacunados pueden contagiar¡±, apunta Salvador Peir¨®, y a?ade la necesidad de no ¡°descuidar el control¡± de los contactos aunque tengan un test negativo.
Un caso positivo en el colegio. Como en el curso pasado, si un alumno o un docente da positivo en covid, tendr¨¢ que aislarse durante, al menos, 10 d¨ªas. Si es sospechoso (tiene s¨ªntomas compatibles) y est¨¢ a la espera de una prueba diagn¨®stica, tampoco podr¨¢ acudir a clase hasta que tenga el resultado negativo del test. Como sucede con el resto de la poblaci¨®n, los contactos estrechos tendr¨¢n que hacer cuarentena 10 d¨ªas, a menos que ya est¨¦n vacunados o hayan pasado la enfermedad en los ¨²ltimos seis meses. En este curso, si cumplen alguno de los dos supuestos, los contactos quedar¨¢n libres del aislamiento, aunque tendr¨¢n que someterse a dos pruebas diagn¨®sticas, una al inicio y otra una semana despu¨¦s del ¨²ltimo contacto con el caso confirmado, indican los protocolos de Sanidad.
Cada comunidad articula esta normativa dentro de su margen de maniobra y Catalu?a, por ejemplo, ha aprobado este martes un decreto ley que permite a los responsables covid de los institutos ¡ªlos colegios de primaria todav¨ªa no tienen alumnos vacunados porque son todos menores de 12 a?os¡ª conocer qu¨¦ estudiantes de su centro escolar han completado la pauta vacunal y cu¨¢les no para gestionar las cuarentenas en las aulas en caso de que haya un positivo. El Pa¨ªs Vasco y la Comunidad Valenciana, en cambio, no dan a conocer esta informaci¨®n sensible a los centros.
Mascarilla. Desde el pasado junio, se flexibiliz¨® el uso de la mascarilla ¡ªcompletamente obligatoria hasta entonces¡ª y se limit¨® su indicaci¨®n a lugares cerrados p¨²blicos, pudiendo quitarla al aire libre si se garantiza la distancia de 1,5 metros entre personas. En los colegios, el tapabocas vuelve a ser obligatorio este curso a partir de los seis a?os, aunque los protocolos sanitarios dan margen para que se pueda valorar retirarlo en actividades concretas al aire libre. En Catalu?a, por ejemplo, los ni?os se pueden quitar la mascarilla en el recreo si se relacionan solo con alumnos de su burbuja del aula.
L¨®pez-Acu?a insta a ¡°reforzar la pedagog¨ªa e informaci¨®n sobre el uso de la mascarilla¡± y sus beneficios para no bajar la guardia en su utilizaci¨®n. ¡°Es importante no transmitir falsas seguridades¡±, resuelve.
Rastreadores. Ante cualquier caso sospechoso, la operativa de los servicios de vigilancia epidemiol¨®gica echa a andar: primero, para confirmar la sospecha y tambi¨¦n para iniciar la identificaci¨®n y control de los contactos estrechos del positivo. ¡°Cualquier persona que sea identificada como contacto estrecho deber¨¢ ser informada y se iniciar¨¢ una vigilancia activa o pasiva, siguiendo los protocolos establecidos en cada comunidad aut¨®noma¡±, reza el protocolo de Sanidad.
Los expertos consultados coinciden en que, despu¨¦s del aluvi¨®n de casos de la quinta ola y con la curva epid¨¦mica en niveles m¨¢s bajos, el rastreo vuelve a ser ¡°fundamental¡± para mantener a raya la epidemia. L¨®pez-Acu?a urge a las comunidades a no desmantelar los equipos de rastreadores ahora que la incidencia ha bajado, sino todo lo contrario: ¡°No podemos relajar las medidas de vigilancia epidemiol¨®gica, rastreo y pruebas diagn¨®sticas, si queremos contener la pandemia. La contenci¨®n se conseguir¨¢ ahora con el control adecuado de brotes y los rastreadores son importantes para detener la transmisi¨®n¡±.
A pesar de que el volumen de cuarentenas a controlar previsiblemente bajar¨¢ debido al alto n¨²mero de vacunados exentos de ellas si son contactos estrechos, los expertos defienden que la necesidad de reforzar la pedagog¨ªa y los mensajes de cautela entre los contactos: si han completado la pauta vacunal, no tienen que hacer cuarentena, pero es aconsejable que limiten sus interacciones sociales durante unos d¨ªas de forma preventiva.
Brotes. Cualquier agrupaci¨®n de tres o m¨¢s casos con infecci¨®n activa en los que se ha establecido un v¨ªnculo epidemiol¨®gico se considera un brote. Los expertos auguran que se seguir¨¢n detectando episodios infecciosos en centros de trabajo y tambi¨¦n en las escuelas, donde parte de su poblaci¨®n todav¨ªa no est¨¢ vacunada.
Para focos muy localizados, los expertos recomiendan emplear los cribados dirigidos como una herramienta m¨¢s para detectar casos de forma precoz. Peir¨® insiste, no obstante, en que este mecanismo ¡°solo tiene sentido en casos concretos asociados a brotes espec¨ªficos¡±, cuando hay una alta prevalencia en un grupo determinado y la posibilidad de encontrar asintom¨¢ticos es muy elevada.
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