Condenado el Ayuntamiento de ?cija por discriminaci¨®n salarial a las mujeres: ¡°?ramos malas por reivindicar. Nos dec¨ªan: ¡®Portaos bien¡±

Isabel, funcionaria del Ayuntamiento de ?cija (Sevilla) desde 1989, acaba de conseguir lo que llevaba luchando 20 a?os: que se reconozca que, por ser mujer, le estaban pagando menos que a sus compa?eros hombres. Dice que est¨¢ contenta pero agotada. ¡°Han sido momentos muy amargos, muy duros¡±, cuenta al tel¨¦fono, horas despu¨¦s de enterarse de que el Tribunal Superior de Justicia de Andaluc¨ªa (TSJA) ha dado por acreditado que ella y, al menos, otras dos trabajadoras municipales sufrieron discriminaci¨®n salarial indirecta por raz¨®n de sexo. Los jueces dan por probado que estas mujeres cobraron, durante a?os, alrededor de 6.500 euros menos que los hombres porque a ellos se les asignaba un complemento salarial por atribuciones temporales que, en realidad, era indefinido e irregular. Para llegar hasta aqu¨ª, han tenido que luchar casi durante dos d¨¦cadas, primero en los despachos y despu¨¦s en los tribunales. ¡°Hemos sufrido un acoso constante. ?ramos malas por reivindicar. Nos dec¨ªan: ¡®Portaos bien¡±.

Isabel, de 58 a?os, es gestora administrativa y trabaja en el ?rea de Econom¨ªa y Hacienda. En su negociado, el de Inspecci¨®n, ella es la ¨²nica mujer, frente a cinco hombres. Es tambi¨¦n la ¨²nica del equipo que entr¨® en el Ayuntamiento por oposici¨®n libre y tres de sus compa?eros son t¨¦cnicos, con menor categor¨ªa que ella, pero todos tienen salarios m¨¢s altos. Isabel empez¨® a protestar en solitario por las diferencias salariales hace m¨¢s de dos d¨¦cadas, y despu¨¦s se le unieron otras dos compa?eras de otros departamentos que sufr¨ªan situaciones similares. ¡°Intent¨¢bamos hablarlo y nos han llegado a echar de los despachos. Yo soy de fuera y me dec¨ªan que no ten¨ªa all¨ª ning¨²n apoyo y que me callara. Ha sido un camino muy duro, muy dif¨ªcil¡±, lamenta Isabel que, tras d¨¦cadas intentando revertir la discriminaci¨®n por la v¨ªa administrativa y exigiendo, sin ¨¦xito, otras medidas como la aprobaci¨®n de un plan de igualdad, en 2018 se decidi¨® a poner su queja en manos de un abogado y buscar justicia en los tribunales. Sus dos compa?eras no demandaron, pero la han apoyado en el proceso y una de ellas acudi¨® como testigo.

La sentencia del tribunal superior andaluz corrige una anterior del juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Sevilla, que desestim¨® la demanda de la mujer. Su abogado, Valent¨ªn Aguilar, recurri¨® en apelaci¨®n y el TSJA les ha dado la raz¨®n. Seg¨²n los jueces, las retribuciones anuales de 2016 a 2019 de las gestoras administrativas eran ¡°claramente¡± menores que las de los hombres. Los jueces analizan la situaci¨®n de las tres mujeres: una ten¨ªa una remuneraci¨®n anual bruta de entre 21.466 y 25.936; otra, entre 26.000 y 27.000; y la tercera, con antigu?edad desde 1981, de 30.000 euros. ¡°En cambio, a los gestores administrativos hombres se les reconoce en todas las n¨®minas de esos cuatro a?os unas diferencias complementarias de alrededor de 6.500 euros al a?o y, en definitiva, sus retribuciones anuales se mueven entre 32.000 y 36.000 euros brutos anuales¡±, se?ala la sentencia, que concluye que, al menos durante los cuatro a?os estudiados, todos los varones han cobrado m¨¢s que todas las mujeres de la misma categor¨ªa.

La f¨®rmula utilizada por el Ayuntamiento para incrementar el sueldo de los funcionarios era reconocerles un complemento por atribuci¨®n temporal de funciones, una pr¨¢ctica que legalmente est¨¢ limitada en el tiempo a dos a?os, pero que aqu¨ª se alargaba de forma indefinida y sin justificaci¨®n aparente, como denunci¨® la propia Secretar¨ªa Municipal. El efecto que esta pr¨¢ctica ha supuesto, advierte el TSJA, es el que denunci¨® Isabel: ¡°Menor retribuci¨®n salarial al colectivo de gestores administrativos mujeres frente al de hombres, al no reconoc¨¦rsele a las mujeres gestoras administrativas dicho complemento salarial¡±, pese a que la Intervenci¨®n inform¨® en 2015 a favor de que a ella tambi¨¦n se le asignara ese plus.

El fallo judicial admite la discriminaci¨®n salarial, aunque no concreta c¨®mo debe actuar ahora el Ayuntamiento. El abogado de Isabel entiende que debe revertir esa desigualdad, pero, en cualquier caso, recurrir¨¢ ante el Tribunal Supremo para que le indemnicen por el salario que ha dejado de ingresar y por el da?o moral. La mujer espera que su victoria sirva tambi¨¦n para que se visibilice la discriminaci¨®n de las mujeres y ayude a otras trabajadoras en situaciones parecidas. ¡°Este reconocimiento es muy importante. Siempre he cre¨ªdo en lo p¨²blico y he ido orgullosa a trabajar, me formaba en las plataformas inform¨¢ticas, intentaba estar por delante en todo. Pero me hac¨ªan da?o¡±, cuenta. Asegura que la batalla que ahora ha ganado le ha costado la salud. De momento, est¨¢ de baja y no sabe si podr¨¢ volver a trabajar. Tambi¨¦n lo est¨¢ otra de sus compa?eras, mientras que la tercera se ha jubilado sin ver reconocida la discriminaci¨®n que sufri¨®. ¡°Ha sido mucha lucha, mucho sufrimiento. Nos afect¨® a nivel psicol¨®gico y el cuerpo somatiza¡±, explica Isabel, que recuerda las duras cr¨ªticas y trato despectivo de sus superiores, todos hombres, menos una mujer. ¡°No entiendo que para llevar un plato de comida a mi casa haya tenido que sufrir tanto¡±, lamenta.