Un movimiento organizado en 11 pa¨ªses europeos inicia una recogida de firmas para garantizar el acceso al aborto

Los retrocesos comenzaron hace unos a?os. Primero fue Polonia. Se convirti¨® en uno de los pa¨ªses con m¨¢s restricciones en Europa para el aborto cuando, en 2020, el Tribunal Constitucional lo declar¨® ilegal a excepci¨®n de dos supuestos: cuando la vida de la madre corra peligro y si el embarazo es producto de una violaci¨®n. Luego, Italia, que con la llegada de Giorgia Meloni ha ido incorporando trabas para el ejercicio de ese derecho. Malta ya lleva a?os siendo el lugar donde las mujeres tienen m¨¢s dif¨ªcil poder interrumpir su embarazo. Y en el resto de territorio europeo, donde es un derecho reconocido con mayor o menor amplitud, su acceso tampoco est¨¢ garantizado para millones de mujeres. 20 millones, seg¨²n la organizaci¨®n Mi voz, mi decisi¨®n, que es tambi¨¦n el nombre de la Iniciativa Ciudadana Europea que ha abierto la recogida de firmas este mi¨¦rcoles. Necesitan un mill¨®n para que la petici¨®n tenga recorrido ante el Ejecutivo comunitario: que el aborto sea libre, seguro, gratuito y accesible, sea cual sea el pa¨ªs en el que vivan y la situaci¨®n econ¨®mica o administrativa que tengan.

Este movimiento europeo fue, en inicio, impulsado por organizaciones y coaliciones de ocho pa¨ªses europeos: Eslovenia, Polonia, Francia, Irlanda, Espa?a, Croacia, Austria y Finlandia. Fueron quienes registraron la iniciativa ciudadana ¡ªun instrumento que permite a la ciudadan¨ªa de la Uni¨®n solicitar al Ejecutivo europeo que plantee nuevas leyes, programas o actuaciones¡ª ante la Comisi¨®n Europea. ¡°A esos, se han sumado adem¨¢s Hungr¨ªa, Italia y Dinamarca¡±, ha contabilizado Kika Fumero, exdirectora del Instituto Canario de Igualdad y una de las coordinadoras en Espa?a, que tambi¨¦n ha explicado por qu¨¦ ¡°no se puede exigir¡± a la UE el aborto como ¡°un derecho realmente efectivo en todos los pa¨ªses¡±, pero s¨ª se puede exigir ¡°para todas las mujeres que est¨¢n en la Uni¨®n Europea¡±.

Dentro de la Uni¨®n Europea, ha a?adido Fumero, hay tres tipos de competencias: ¡°Las exclusivas de la UE, otras que forman parte de las competencias compartidas y un tercer tipo, llamadas de apoyo, que son las que corresponden a los estados miembros, a nivel nacional. Los derechos reproductivos forman parte de estas ¨²ltimas, por eso no podemos exigirlo en todos los pa¨ªses, pero s¨ª para todas las mujeres en Europa, mediante programas de financiaci¨®n, que sean plurianuales, y que vayan destinados a los pa¨ªses donde es legal y accesible para que aseguren recibir a las mujeres que residan en territorios donde eso no ocurre¡±.

¡°Planes como este existen para otras cuestiones en Europa, para que aquellas que no puedan hacerlo en sus pa¨ªses, puedan viajar, interrumpir su embarazo y volver a su pa¨ªs con todas las garant¨ªas, y de forma gratuita¡±, ha ampliado la escritora y periodista Cristina Fallar¨¢s, otra de las coordinadoras en Espa?a. Fallar¨¢s tambi¨¦n ha recordado que no son solo pa¨ªses como ¡°Malta, donde hasta mediados del a?o pasado el aborto ten¨ªa hasta tres a?os de c¨¢rcel, y donde ahora est¨¢ permitido ¨²nicamente si est¨¢ en peligro la vida de la madre¡±, sino que en aquellos pa¨ªses donde se supone que es accesible y est¨¢ asentado como derecho, ¡°tampoco es totalmente efectivo¡±.

¡°Tambi¨¦n¡±, ha a?adido Fumero, ¡°para las que no pueden hacerlo porque hay casu¨ªsticas restrictivas, como en Polonia; para aquellos lugares donde es legal, pero no gratuito, como en Austria; donde existen dificultades considerables para acceder, como Italia; y para aquellas mujeres que est¨¢n en un estadio de gestaci¨®n donde su pa¨ªs ya no permite que puedan interrumpir el embarazo¡±. En la mayor¨ªa de pa¨ªses europeos ese l¨ªmite es ¡°12 semanas, en Espa?a, de 14, en Francia, de 16, y en Pa¨ªses Bajos, de 24¡å, ha especificado la exdirectora canaria de Igualdad. Y ¡°tambi¨¦n en Espa?a¡±, ha recordado, ¡°a veces ese acceso se dificulta y las mujeres tienen que desplazarse¡±.

En territorio espa?ol, lo accesible que sea el aborto depende de la autonom¨ªa donde se resida, porque aunque la ¨²ltima reforma legislativa estableci¨® que debe ser en el sistema p¨²blico donde las mujeres tienen que poder ejercer ese derecho ¡ªy el propio sistema tiene que garantizarlo¡ª, a¨²n no sucede. Las listas de objetores que los centros ten¨ªan que hacer para reorganizar sus servicios y garantizar que cualquier hospital tuviese profesionales para realizar las interrupciones, a¨²n no han sido realizadas en todo el territorio, entre otras cuestiones.

Es decir, que no ha cambiado nada desde esa ¨²ltima actualizaci¨®n de Ley de Salud Sexual y Reproductiva; seg¨²n el ¨²ltimo informe del Ministerio de Sanidad, con datos de 2022, de las 98.316 interrupciones voluntarias del embarazo que hubo ese a?o, solo el 17,02% se realizaron en centros p¨²blicos. Y hay regiones que todav¨ªa no notifican abortos desde sus hospitales, como Castilla y Le¨®n, Castilla-La Mancha, Arag¨®n, Murcia y Extremadura.

El movimiento ha sido presentado este mi¨¦rcoles, a la misma hora, en diversas ciudades europeas. Aunque tienen un a?o para la recogida de firmas, seg¨²n lo que establece la Uni¨®n Europea para las Iniciativas Ciudadanas, quieren entregar ese mill¨®n que necesitan antes de las elecciones europeas, el pr¨®ximo 9 de junio. Seg¨²n han dicho Fumero y Fallar¨¢s, ¡°porque se acercan las pr¨®ximas elecciones europeas, vemos el ascenso de la ultraderecha no solo aqu¨ª, en Europa, sino en Estados Unidos y Latinoam¨¦rica, y en vista de lo que puede llegar, que no actuemos en reacci¨®n, sino que estemos esper¨¢ndoles para lo que pueda pasar¡±.