Un pleito espa?ol por el canon digital llega al Tribunal Europeo
La disputa se centra en si quien no usa soportes inform¨¢ticos para obtener una copia privada debe pagar tambi¨¦n el canon.- El conflicto nace de una demanda de las sociedades de gesti¨®n contra una tienda
Un pleito de una tienda barcelonesa, Traxtore, por impago del canon digital ha llegado hoy al Tribunal Europeo de Luxemburgo. Traxtore fue denunciada por las sociedades de gesti¨®n espa?olas en marzo de 2006. En 2007, un juez sentenci¨® que deb¨ªa pagar 16.000 euros por haber efectuado compras desde 2002 sin pagar el canon. La empresa recurri¨® a la Audiencia de Barcelona y entre su argumentario adjuntaba una respuesta del entonces comisario de Mercado Interior de la Comisi¨®n Europea a la pregunta de un eurodipuadto espa?ol en la que se afirmaba que "s¨®lo deben gravarse con c¨¢nones los soportes y equipos que efectivamente se utilicen para hacer copias realmente destinadas a uso privado. La Comisi¨®n considera que los equipos utilizados con fines comerciales, en empresas o en administraciones p¨²blicas, no deber¨ªan gravarse con c¨¢nones". Seg¨²n esta respuesta "el canon sobre productos digitales implantado en Espa?a se aplica a soportes y aparatos sin hacer distinci¨®n entre los consumidores que se proponen utilizarlos para la reproducci¨®n de material protegido y los que no tienen tal prop¨®sito".
En el recurso ante la Audiencia de Barcelona el abogado de la empresa, Josep Jover, volvi¨® a solicitar que ante la confusi¨®n interpretativa del alcance que debe tener el pago del canon se consultara a las instancias europeas. Esta petici¨®n, que hab¨ªa sido rechazada por el primer juez, fue escuchada en la Audiencia. Por esta raz¨®n, ahora ha llegado a Luxemburgo.
En los meses previos al inicio de la vista, el tribunal remiti¨® el caso a todos los estados miembros para que pudieran aportar sus alegaciones. Lo han hecho varios pa¨ªses. Finlandia y Gran Breta?a, por ejemplo, remitieron una opini¨®n favorable a la tesis de Traxtore. Hoy, ante el tribunal se han presentado, adem¨¢s de los abogados de las partes, representantes de Alemania, Grecia y Espa?a, que se oponen a las tesis de Traxtore aunque ofrecen matices en su argumentaci¨®n. Alemania, por ejemplo, considera que debe haber una mayor proporcionalidad al fijar el precio del canon, mientras que Grecia lo defiende en su integridad de la misma manera que los hoteles han de pagar por instalar televisores.
La audiencia, que ha durado toda la ma?ana, ha consistido en intentar responder a una pregunta altamente t¨¦cnica sobre si la compensaci¨®n equitativa (retribuci¨®n a quien tiene el derecho de la obra por el lucro cesante que supone la obtenci¨®n l¨ªcita de una copia para uso privado) debe entenderse como remuneraci¨®n equitativa (si alguien hace negocio con la copia de una obra debe retribuir a quien tiene los derechos de la misma). En definitiva, el debate se centraba en si aquellos que utilizan soportes inform¨¢ticos de almacenamiento pero con fines profesionales y no para obtener una copia privada de archivos sometidos a derechos deben pagar igualmente el canon digital. Por ejemplo, la Administraci¨®n de Justicia. En la audiencia, un abogado de las partes ha defendido el pago del canon por parte de la administraci¨®n porque sus equipos son empleados por sus funcionarios para obtener copias con fines particulares.
El 11 de mayo la abogada general del Tribunal elevar¨¢ sus conclusiones y la sentencia llegar¨¢ tras las vacaciones de verano. Lo que dictamine el tribunal de Luxemburgo generar¨¢ una obligaci¨®n de interpretaci¨®n en todos los estados miembros de la Uni¨®n Europea. Seg¨²n cual sea la misma, Espa?a y todos los pa¨ªses que aplican el canon con los mismos criterios podr¨ªan verse obligados a corregirlos.
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