Cuenta atr¨¢s para Windows 8

Windows se renueva. Microsoft asume el reto de ir m¨¢s all¨¢ del ¨¢mbito empresarial, donde sigue intratable. Pero en el mundo de la movilidad, el m¨¢s importante hoy le falta un producto estrella tan atractivo como el iPad o tan popular como los m¨®viles Android. Seg¨²n la consultora Gartner, en 2016 los aparatos de Google les habr¨¢n arrebatado el liderazgo absoluto (sumados ordenadores, tabletas y m¨®viles). Habr¨¢ 2.800 millones millones frente a 2.300. Quiz¨¢ por eso, adem¨¢s de salir con Windows 8, para tabletas y PC, el propio lunes estrene la versi¨®n para m¨®viles. En la actualidad hay 608 millones de ¡®androides¡¯ (sobre todo m¨®viles), frente a m¨¢s de 1.500 ordenadores con Windows.

Desde el lanzamiento de Windows 7, el 22 de octubre de 2009, la sucesi¨®n de acontecimientos ha sido vertiginosa. Apple ha copado el mercado de las tabletas con el iPad. Ayer con dos nuevas versiones, recortando cada vez m¨¢s el ciclo de renovaci¨®n de aparatos. Google sacar¨¢ nuevo m¨®vil y tableta de la chistera el lunes, junto con una nueva versi¨®n de Android, la 4.2.

El primer Windows naci¨® en 1985 y siempre le acompa?¨® la pol¨¦mica. ?Es una copia de Macintosh? Es probable que s¨ª, que el resultado de su interfaz gr¨¢fica fuese algo m¨¢s que fruto de la inspiraci¨®n, pero ya se encarg¨® Bill Gates en persona de matiz¨¢rselo a Steve Jobs. Ahora ni uno ni otro est¨¢n al frente de sus compa?¨ªas. Tim Cook en Apple y Steve Ballmer dirigen los dos gigantes tecnol¨®gicos.

En una m¨ªtica discusi¨®n reflejada en la biograf¨ªa del genio de la manzana, firmada por Walter Isaacson se explica c¨®mo Gates zanj¨® la discusi¨®n: ¡°Creo m¨¢s bien que ambos nos encontramos con este rico vecino llamado Xerox, y asaltamos su casa para robar su televisi¨®n, y descubrimos que t¨² ya te la hab¨ªas robado antes¡±.? S¨ª, Xerox, los de las fotocopiadoras ya llevaban tiempo trabajando en una interfaz gr¨¢fica para controlar los ordenadores, la clave de la democratizaci¨®n de la tecnolog¨ªa, el adi¨®s a las l¨ªneas de comando, a escribir ¨®rdenes casi en clave para la ejecuci¨®n de tareas sencillas. Jobs nunca ocult¨® su asombro ante este adelanto.?

Arrastrar y soltar, un documento, doble clic, el icono para el PC, la papelera, toda una serie de met¨¢foras visuales y gestos para entender el funcionamiento de una m¨¢quina; incluso el hecho de llamar Escritorio a la pantalla de inicial del ordenador est¨¢n ya interiorizados.

Desde su nacimiento Windows ha experimentado muchos cambios. Algunos s¨ªmbolos siguen, otros, como el bot¨®n de Inicio, desaparece, al menos en la versi¨®n t¨¢ctil. En 1995, el gigante de Redmond tir¨® la casa por la ventana y se hizo con los derechos de una m¨ªtica canci¨®n de los Rolling Stones: Start me up (enci¨¦ndeme). Los chicos malos de Windows unidos a Mick Jagger y compa?¨ªa, todo un contraste frente a Jobs, tan pacifista, tan hippie, tan cercano a Lennon y la beatleman¨ªa... Toda una declaraci¨®n de intenciones.

El viento se ha llevado todo eso. El nuevo Windows 8, el primer sistema de Microsoft pensado para la movilidad, tendr¨¢ dos formas de uso, una m¨¢s tradicional, muy parecida a la actual, y otra denominada Metro, para usarse con los dedos.

La versi¨®n t¨¢ctil de Windows 8

Para comenzar, los programas se llamar¨¢n, siguiendo la moda, aplicaciones. Se presentan como cuadrados y la navegaci¨®n ser¨¢ en horizontal, hacia la derecha, en lugar de vertical como hasta ahora.

Cuando el ordenador, tableta o h¨ªbrido que use Windows 8 est¨¦ en reposo se presenta una foto de fondo y en el lateral inferior izquierdo aparecen las notificaciones de correo, calendario y estado de la bater¨ªa.

A falta de botones, el control se desplaza al lateral derecho. Arrastrando el dedo (o el rat¨®n) hacia la izquierda aparecen los accesos a las funciones clave para manejarse: B¨²squeda, Compartir, Inicio, Devices (aparatos) y Configuraci¨®n.

La b¨²squeda es transversal: se busca tanto dentro de una archivo, como en un programa como en Internet -por defecto, con su servicio, Bing-. Compartir permite enviar por correo, poner un enlace en el muro de Facebook o mandar a Twitter cualquier contenido que se consulte en ese momento, ya sea una p¨¢gina web, un documento de Word, una foto... Esta opci¨®n es fluida, limpia, hace que se pierda la sensaci¨®n de pasar de un programa a otro.

Devices muestra qu¨¦ se tiene conectado al ordenador o tableta: un teclado Bluetooth, una c¨¢mara c¨¢mara, la impresora... Es el centro de gesti¨®n de complementos. Por ¨²ltimo, la Configuraci¨®n, que es mucho m¨¢s visual y sencilla que la forma actual de acceder a la memoria libre, archivos, estado de la bater¨ªa, acceso a redes wifi...

Una de las claves para la difusi¨®n en los 90 de Windows frente a Apple, entonces tan chic como minoritario, tan sexy como propio de dise?adores y artistas gr¨¢ficos, fue su apertura a todos los fabricantes de ordenadores. Apple hace tanto sus aparatos como su sistema operativo. Microsoft apost¨® por licenciar Windows y que los fabricantes ofrecieran diferentes modelos, tama?os, capacidades y aparatos. As¨ª fue hasta que en el nuevo siglo lanz¨® su propia consola, Xbox, aparte de algunos complementos (ratones, teclados, c¨¢maras..), pero nunca un ordenador propio, hasta hoy con Surface, una tableta hecha a medida para esta supuesta revoluci¨®n. Sin botones, muy parecida al iPad y con una funda que no solo recuerda a la de Apple, sino que se enriquece al esconder un teclado completo. Todo en uno, enfocado al entretenimiento, pero tambi¨¦n a la productividad.

Microsoft tiene un gran aliado: Office, su lote de programas de ofim¨¢tica. La familiaridad en el ¨¢mbito laboral, un punto a su favor. Surface aspira a convertirse en el aparato que invite a usarlo en casa y en el trabajo, sin necesidad de nada m¨¢s. Una frontera que Apple no consigue traspasar y en la que Android todav¨ªa se queda fuera, a falta de software de ese nivel.

La estrategia de Microsoft es francamente agresiva, tanto que le ha hecho volver a uno de sus fantasmas del pasado. La Uni¨®n Europea prepara sanci¨®n por volver a un viejo vicio, privilegiar su navegador Internet Explorer, en este caso el 10, frente a los competidores. El compromiso era dar al consumidor la posibilidad de escoger qu¨¦ instalar sin beneficiar su propio producto, poner al mismo nivel Chrome, Firefox, Safari y Opera.

Otra pol¨¦mica legal, esta vez referida a su tableta, Surface, es la garant¨ªa. A falta de confirmaci¨®n esta tarde del jueves, cuando permitan probarlo en un evento exclusivamente dedicado al aparato, contar¨¢ con un a?o de garant¨ªa cuando desde Europa se exigen que sean dos. No son los ¨²nicos en hacerlo, Apple se porta igual con sus productos y ofrece una versi¨®n de seguro de pago de hasta tres a?os.

Este jueves por la tarde, en Nueva York, d¨®nde Microsoft ha invitado a medios de todo el mundo, entre ellos a EL PA?S para el lanzamiento mundial de los prodcutos m¨¢ simportantes desde Windows 95, seg¨²n Ballmer, se desvelar¨¢n muchas de las inc¨®gnitas: fluidez, compa?eros de viaje, precio, compatibilidad con versiones anteriores..Y, sobre todo, si Microsoft podr¨¢ decir algo en el mundo de tabletas y m¨®viles.