Cruise paga m¨¢s de ocho millones de d¨®lares a la mujer arrollada por uno de sus robotaxis en San Francisco

Cruise, la compa?¨ªa de robotaxis de General Motors, ha llegado a un acuerdo con la peatona que fue arrollada en San Francisco por una de sus unidades en octubre. La empresa ha pagado entre 8 y 12 millones de d¨®lares a la v¨ªctima del incidente de tr¨¢fico, quien fue impactada y arrastrada varios metros debajo del taxi hasta que fren¨®. El suceso hizo que Cruise perdiera su licencia de operaci¨®n en California, su mercado m¨¢s importante en Estados Unidos.

El acuerdo ha sido dado a conocer por Bloomberg, quien asegura que la v¨ªctima del incidente fue dada de alta del hospital despu¨¦s de varias semanas de atenci¨®n. El accidente provoc¨® para Cruise un efecto domin¨® que llev¨® al despido de nueve de sus ejecutivos, al cambio de su consejero delegado y a p¨¦rdidas de 3.400 millones de d¨®lares derivadas del freno a sus operaciones en California. La crisis, ante reguladores y opini¨®n p¨²blica, tambi¨¦n provoc¨® el recorte del 24% de la plantilla.

El incidente ocurri¨® el 2 de octubre, apenas 53 d¨ªas despu¨¦s de que Cruise recibiera la autorizaci¨®n de los reguladores para ampliar sin l¨ªmites su operaci¨®n en San Francisco. Todo eso se evapor¨® sobre las 21.30 de aquella noche. Panini era el apodo de la unidad que avanzaba por las calles de la ciudad. El auto esper¨® en las intersecciones de Market y la calle Quinta.

Panini esperaba esa noche en el carril derecho a que la luz del sem¨¢foro pasara al verde. La unidad ten¨ªa a su derecha un carril bici protegido por bolardos de seguridad pl¨¢sticos. M¨¢s all¨¢, la mujer caminaba sobre la acera en la misma direcci¨®n de los veh¨ªculos. A la izquierda del robotaxi hab¨ªa un Nissan verde.

Cuando el sem¨¢foro se pone en verde, ambos coches avanzaron. La mujer ya hab¨ªa cruzado la calle frente a ella, la Quinta, y gir¨® a la izquierda sobre el paso de cebra de Market, intentado ganar a los veh¨ªculos. Lo hizo a pesar de que el sem¨¢foro peatonal le dec¨ªa que esperara. Las c¨¢maras de seguridad captaron a la mujer fren¨¢ndose en el carril sobre el que transitaba el Nissan y haciendo se?as para que este frenara.

El Nissan fue el primero en chocar contra la mujer. Lo hizo a una velocidad de 33 kil¨®metros por hora. Este impacto fue casi tres segundos antes de que el Cruise impactara a la peatona por segunda vez. El robotaxi avanzaba sobre su carril a una velocidad de 27 kil¨®metros por hora. La fuerza del choque hizo que la mujer subiera al cap¨® del Nissan y despu¨¦s al techo del veh¨ªculo, desde donde cay¨® de cara al pavimento justo frente al Cruise.

Los sensores del robotaxi emiten una colisi¨®n inminente solo 0,4 segundos antes de que este le pegue a la mujer. A pesar de esto, el coche no hab¨ªa desacelerado desde que abandon¨® el sem¨¢foro. El choque se dio cuando el veloc¨ªmetro marcaba los 28 kil¨®metros por hora, o 18 millas.

Panini frena 1,7 segundos despu¨¦s de atropellar a la mujer, de acuerdo a datos del accidente hechos p¨²blicos por Cruise en enero. Pero aqu¨ª es donde viene uno de los momentos m¨¢s delicados del incidente. Despu¨¦s del golpe, las c¨¢maras y sensores del coche no tripulado determinan que se trat¨® de una colisi¨®n lateral porque ven una de las piernas de la mujer estirada en direcci¨®n al carril izquierdo.

Esto hace que la m¨¢quina concluya incorrectamente que la mujer est¨¢ tendida sobre el costado izquierdo. En lugar de quedarse donde est¨¢, como hubiera hecho en un escenario de choque frontal, el Cruise comienza a moverse hacia adelante para aparcar. El sistema del auto siente la resistencia en sus ejes. Este viene de la mujer, que est¨¢ debajo del veh¨ªculo. Le toma casi nueve segundos al robotaxi detenerse por completo. La peatona fue arrastrada unos seis metros en total, de acuerdo a las investigaciones hechas por las autoridades y por la empresa. El ch¨®fer del Nissan se fuga del lugar antes de que lleguen los servicios de emergencia.

Cruise concluy¨® en enero que un conductor humano no habr¨ªa podido evitar impactar a la mujer despu¨¦s del atropellamiento iniciado por el Nissan. Pero admite que la reacci¨®n despu¨¦s del golpe habr¨ªa sido diferente. ¡°Un conductor humano no habr¨ªa continuado conduciendo sin antes hacer alg¨²n tipo de investigaci¨®n¡±, se?ala el an¨¢lisis.

A pesar de los meses turbulentos que ha vivido, Cruise prepara su regreso. La compa?¨ªa anunci¨® en marzo que est¨¢ lista para retomar sus pruebas de seguridad en la ciudad de Phoenix. En esta ocasi¨®n, estas se realizar¨¢n con copilotos humanos que puedan responder en casos como el de San Francisco.

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