C¨®mo cambi¨® una semana de incendios la ciudad de Los ?ngeles
Un recorrido por las zonas arrasadas revelan la destrucci¨®n que ¡®Eaton¡¯ y ¡®Palisades¡¯ dejaron a su paso
California llevaba a?os prepar¨¢ndose para la cat¨¢strofe. Las autoridades preve¨ªan que esta iba a ser ocasionada por un terremoto, pero ha sido finalmente una serie de incendios los que han cambiado el rostro de Los ?ngeles, la principal ciudad del Estado. Los fuegos han destruido en una semana m¨¢s de 12.000 estructuras. Han dejado de existir residencias, negocios, templos y monumentos hist¨®ricos al este y oeste de la emblem¨¢tica urbe. Los c¨¢lculos m¨¢s conservadores, todav¨ªa preliminares, indican que el monto de los da?os asciende a unos 25.000 millones de d¨®lares.
Hay algunas p¨¦rdidas que no se podr¨¢n recuperar. Es el caso del rancho de Will Rogers, una celebridad de inicios del siglo pasado y quien se convirti¨® en un agudo comentarista de la pol¨ªtica estadounidense. Rogers escribi¨® miles de columnas en diarios nacionales entre 1916 y hasta 1935, cuando muri¨® en un accidente a¨¦reo en Alaska. Su lujosa propiedad fue donada por su viuda al Estado en 1944. Hace d¨¦cadas es uno de los parques p¨²blicos m¨¢s visitados al oeste de Los ?ngeles. Su casa de rancho, con 31 habitaciones, fue convertida en museo y albergaba su colecci¨®n. La residencia fue reducida a cenizas por el incendio Palisades. Varios objetos de la vida de Rogers, sus caricaturas pol¨ªticas y accesorios vaqueros, fueron salvados del fuego. La fundaci¨®n Will Rogers est¨¢ haciendo un llamado para donar y apoyar a los guardaparques.
La avenida Sunset, una de las m¨¢s importantes y emblem¨¢ticas de Los ?ngeles, ha resultado gravemente da?ada por el incendio Palisades, que ha devastado el oeste de la urbe. En el cruce de esta arteria con El Medio se encuentran dos iglesias. De un lado de El Medio se encuentra una iglesia luterana, sin apenas da?os. En la acera este hay una presbiteriana, destruida casi por completo. Este templo se levant¨® en 1957 en un predio que fue propiedad del congresista Leland Ford, un legislador que apoy¨® p¨²blicamente que se enviara a japoneses residentes en Estados Unidos a campos de concentraci¨®n durante la Segunda Guerra Mundial. Los encargados de la iglesia de Pacific Palisades han se?alado que todos los empleados evacuaron sanos y salvos, aunque lamentan la destrucci¨®n de sus instalaciones. ¡°Muchos en nuestra congregaci¨®n han sufrido enormes p¨¦rdidas, as¨ª que agradecemos sus plegarias¡±, se?ala la organizaci¨®n, que tambi¨¦n recibe donativos para emplear en la reconstrucci¨®n.
Las compa?¨ªas han empezado a destinar ayuda para la emergencia. Netflix y Comcast, la matriz de NBC, han anunciado este lunes sendos apoyos de 10 millones de d¨®lares que beneficiar¨¢n a la Fundaci¨®n del Departamento de Bomberos de Los ?ngeles, la Cruz Roja y la organizaci¨®n World Central Kitchen, comandada por el chef Jos¨¦ Andr¨¦s. Estos grandes donativos se suman al de Disney, que el s¨¢bado anunci¨® 15 millones de d¨®lares para un fondo de reconstrucci¨®n. Fox ha dado un mill¨®n de d¨®lares. Bank of America y JP Morgan Chase han comunicado que permitir¨¢n pausar el pago de la hipoteca hasta por un a?o o reducir las mensualidades a los clientes que hayan perdido sus casas. La imagen anterior muestra una sucursal de Chase en Pacific Palisades.
La carretera esc¨¦nica del Pac¨ªfico, una larga v¨ªa que conecta San Diego con San Francisco, son hoy kil¨®metros y kil¨®metros de ruinas y ceniza en su paso al norte de Santa M¨®nica. All¨ª se encontraba esta casa, de la que solo ha quedado en pie el marco de la puerta. Tambi¨¦n han sido devorados por las llamas varios restaurantes de Malib¨² que formaban parte de la escena culinaria de la regi¨®n. Se han ido Gladstones, Moonshadows, Reel Inn, o Cholada, solo por decir algunos. Los due?os de estos negocios est¨¢n estudiando c¨®mo recuperarse de la tragedia. Para aliviarlos, el Gobierno estatal ha decretado una moratoria fiscal que permitir¨¢ retrasar nueve meses el pago de impuestos que venc¨ªan este mes.
El imparable avance de los incendios ha devuelto de nuevo el debate sobre la construcci¨®n en California. El fuego ha consumido en una semana miles de estructuras de madera, un material muy usado por su abundancia y precio. En 2019, el 90% de las casas erigidas ten¨ªan sus cimientos de madera. Esta es tambi¨¦n empleada porque el tiempo de edificaci¨®n es menor a las casas de concreto. En promedio, una casa de madera puede levantarse entre 12 y 14 semanas. Casas de ladrillo, como la que se muestra en la fotograf¨ªa, tambi¨¦n sucumbieron ante las condiciones extremas provocadas por los fuertes vientos de Santa Ana.
El paisaje de Malib¨² nunca ser¨¢ el mismo tras el Palisade, que ha arrasado con 9.500 hect¨¢reas y cuyo avance ha sido frenado hasta este lunes, a pesar de registrar solo una contenci¨®n de 14%. El siniestro, iniciado el martes de la semana pasada, se ensa?¨® especialmente con esta emblem¨¢tica costa del Pac¨ªfico. Un tercio de esta banda ha sido da?ada. El fuego destruy¨® 12 casas contiguas en la franja de tierra que se aprecia en la fotograf¨ªa. Las residencias representaban el m¨¢s elegante estilo de vida: a pie de una playa de bellas vistas frecuentada por surfistas. Ese estilo de vida ha sido reducido a cenizas. Los coches deportivos que estaban dentro de los garajes son ya chatarra. La chimenea es lo ¨²nico que queda en pie de muchas de las mansiones en la zona.
Este ¨¢rbol llam¨® la atenci¨®n en un recorrido hecho por la zona del este de Pacific Palisades, conocida como la zona del alfabeto. Era un barrio residencial poblado en su mayor¨ªa por la clase media. El precio de los lotes iniciaba en el mill¨®n de d¨®lares, una cifra que hac¨ªa la colonia m¨¢s asequible a diferencia de otras regiones m¨¢s exclusivas de Palisades. Era un lugar popular entre familias j¨®venes. La zona del alfabeto ten¨ªa comercios y negocios cercanos, una distancia que pod¨ªa recorrerse a pie. El barrio estaba ubicado en una zona pr¨¢cticamente plana. Esto hizo que las llamas saltaran casi de una casa a la contigua, apenas sin freno, lo que dej¨® pocos inmuebles en pie.
Muchas de las v¨ªctimas no solo han perdido sus residencias. El fuego tambi¨¦n se ha llevado sitios de servicio a la comunidad. Es el caso de esta iglesia de Altadena. Desde hace 78 a?os, esta daba servicio a una rica poblaci¨®n compuesta por residentes latinos, negros y blancos. Su congregaci¨®n ha mostrado la fuerza de sus lazos en estos d¨ªas tr¨¢gicos y se reuni¨® el domingo en una sede alterna, en Montebello. ¡°Nuestra iglesia se va a reunir siempre, hasta que sea imposible seguir adelante. Un incendio no nos va a parar¡±, dijo a Los Angeles Times Carl Whidden, el esposo del pastor de la iglesia, Paul Tellstr?m, quien hab¨ªa anunciado recientemente su jubilaci¨®n por sufrir de P¨¢rkinson.
La fotograf¨ªa de abajo es de una residencia t¨ªpica de Altadena, una construcci¨®n sencilla, de madera y una sola planta. Esta casa ubicada en la calle de McNally sorprende porque la casa construida en el patio trasero muestra apenas da?os. La principal, no obstante, ha desaparecido entre las llamas de Eaton.
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