La ¨¦lite pol¨ªtica conservadora celebra una fiesta en medio del paro armado en Colombia

Colombia es un pa¨ªs de realidades paralelas. Sobre todo en la guerra. La amenaza del Clan del Golfo que oblig¨® a pueblos enteros a confinarse durante tres d¨ªas no existi¨® para la ¨¦lite de una de las ciudades afectadas por la presencia del grupo paramilitar. En Monter¨ªa, en el departamento de C¨®rdoba, mientras las autoridades le ped¨ªan a la poblaci¨®n permanecer en sus casas, el s¨¢bado en el centro de la ciudad explotaban fuegos artificiales. Era el inicio de la celebraci¨®n de una boda que se extendi¨® hasta la madrugada y que incluy¨® un concierto y la participaci¨®n de figuras reconocidas en la pol¨ªtica nacional. El reflejo de un pa¨ªs desigual en una distancia no mayor a seis kil¨®metros.

En el sur de la ciudad cualquier sonido que se escuchaba asustaba porque pod¨ªan ser tiros, y a no m¨¢s de media hora de all¨ª, la fiesta. Las im¨¢genes, subidas por los propios invitados a las redes sociales, han circulado este fin de semana como una se?al (una m¨¢s) de un pa¨ªs que no siente igual la violencia. Al evento, que cont¨® con la presentaci¨®n del cantante Gusi (exintegrante de Gusi y Beto), hicieron presencia pol¨ªticos como el l¨ªder conservador David Barguil, una figura activa con su apoyo a la campa?a presidencial de Fico Guti¨¦rrez y que dos d¨ªas antes de la fiesta hab¨ªa dicho estar preocupado por la seguridad en la regi¨®n. ¡°La situaci¨®n de orden p¨²blico en C¨®rdoba es alarmante. ?No podemos estar a merced de los delincuentes. Hay que enfrentarlos con toda la contundencia del Estado!¡±, escribi¨® en Twitter. Pero a voluntad del Clan del Golfo estaban los otros habitantes, los que sab¨ªan que si sal¨ªan de su casa, corr¨ªan el riesgo de no regresar.

La presencia de este grupo armado en la regi¨®n es mayor al que ejercieron en su momento las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), desmovilizadas en 2006, cuenta una periodista, que prefiere no decir su nombre, para explicar por qu¨¦ cuando el Clan del Golfo da una orden, todos prefieren obedecer. ¡°Las escenas dentro del Club Campestre ¨Cdonde se realiz¨® la fiesta¨C parecen sacadas de otra realidad¡±, a?ade la reportera, acostumbrada a encerrarse cada cierto tiempo porque un paro armado como el de estos d¨ªas no es algo nuevo.

La lista de invitados a la fiesta de Rodrigo Pimienta y Camila Sotomayor, una pareja poco conocida en el pa¨ªs pero cercana a poderosos pol¨ªticos y empresarios, era larga, y aunque muchos decidieron cancelar la asistencia por miedo a las amenazas del grupo armado, nombres que resuenan en el plano nacional participaron de la celebraci¨®n cuando la regi¨®n estaba sitiada. Entre estos, Jorge Rodrigo Tovar, el hijo del exparamilitar Jorge 40, elegido representante de las v¨ªctimas en el Congreso. Tambi¨¦n estuvieron Erasmo Zuleta Bechara (del Partido de la U) y Wadith Manzur (del Partido Conservador), hijo del exsenador Julio Manzur, expulsado por la Jurisdicci¨®n Especial para la Paz (JEP) en su intento por acogerse en medio de un proceso en su contra por haber celebrado convenios pol¨ªticos con grupos paramilitares.

El Club Campestre, donde se celebr¨® la fiesta, est¨¢ ubicado en el barrio El Recreo, un sector donde vive la clase dirigente de la regi¨®n. En el sur, donde la noche del s¨¢bado parec¨ªa una ciudad fantasma y la gente apenas se atrev¨ªa a asomarse en la ventana, vive la poblaci¨®n de menos recursos. Es la zona popular y m¨¢s poblada de la capital de Monter¨ªa. Un recorrido del diario El Meridiano el mismo d¨ªa de la fiesta mostraba gran parte del comercio cerrado, poca movilidad, polic¨ªas patrullando y la Terminal de Transporte pr¨¢cticamente vac¨ªa.

El paro armado del Clan del Golfo dej¨® al menos seis personas muertas y 180 veh¨ªculos atacados, la mayor¨ªa incinerados. Seg¨²n el Ministerio de Defensa, el grupo armado, que se autodenomina como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), es responsable del asesinato de tres civiles, dos soldados y un polic¨ªa en hechos registrados durante los tres d¨ªas de ataques a 11 departamentos del pa¨ªs. Las autoridades han se?alado la extradici¨®n de Dairo Antonio ?suga, alias Otoniel, como el detonante de esta arremetida contra la poblaci¨®n civil.

Todav¨ªa nadie entiende c¨®mo se pudo hacer una fiesta en Monter¨ªa con decenas de invitados en d¨ªas en que incluso las caravanas escoltadas por el Ej¨¦rcito fueron amenazadas por los hombres del Clan del Golfo. La noche antes de la celebraci¨®n, el Deportivo Independiente Medell¨ªn cancel¨® su viaje a esa ciudad, donde ten¨ªa programado un partido de la primera divisi¨®n del f¨²tbol profesional con Jaguares, por considerar que no hab¨ªa garant¨ªas. ¡°Entendemos y nos solidarizamos con el pa¨ªs, sobre todo con los habitantes de C¨®rdoba y Monter¨ªa por la situaci¨®n que viven actualmente¡±, se?al¨® el equipo en un comunicado.

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