Se acab¨® el bien com¨²n
Si frente al delito se antepone el di¨¢logo como lo recomienda y practica el gobierno Petro estamos frente a un problema may¨²sculo
En Colombia se derog¨® el ¡°Bien Com¨²n¡± por la v¨ªa de los bloqueos. Si a una comunidad, por incapacidad del Estado, se le desatiende la prestaci¨®n de un servicio, puede apelar al mecanismo de ¡°interceptar, obstruir o cerrar el paso de una v¨ªa¡± poniendo en peligro la prestaci¨®n de un servicio esencial: el agua, la electricidad o el transporte de materias primas para la industria y los alimentos.
Las autoridades, si se presenta dicha circunstancia, deben inmediatamente proceder a adelantar un di¨¢logo con los protestantes en lugar de aplicar la fuerza para impedir que se interrumpa la asistencia de un beneficio a la totalidad de la poblaci¨®n.
El caso m¨¢s reciente se present¨® en una poblaci¨®n denominada El Guavio en el departamento de Cundinamarca, donde funciona una importante hidroel¨¦ctrica, parte esencial del sistema de interconexi¨®n. Sus pobladores se quejan con raz¨®n del estado lamentable de sus v¨ªas de acceso a la poblaci¨®n, pero por justas que sean las reclamaciones no pueden agravar las circunstancias poniendo en riesgo el suministro de energ¨ªa a Cundinamarca, Meta, Guaviare (m¨¢s o menos dos millones de personas) y agudizar y empeorar el preocupante aumento de las tarifas. Si no arreglan nuestras deterioradas carreteras, aqu¨ª nos tendr¨¢n 24 horas protestando, expresaron los organizadores. La batalla que gan¨® la comunidad en el Guavio, titul¨® el diario El Espectador. Como es natural, el mal ejemplo se extendi¨® a otras hidroel¨¦ctricas: Termocandelaria, La Miel y Merilectrica. Se obstruy¨® el ingreso de funcionarios.
Y, claro est¨¢, no se descarta que se aproveche el episodio del Guavio, donde los promotores del bloqueo consiguieron satisfacer sus pretensiones para repetir el entuerto con ¡°los aereopuertos, los puertos, las refiner¨ªas, las v¨ªas y otras infraestructuras cr¨ªticas para la econom¨ªa nacional y tambi¨¦n cualquier empresa privada. Todos legitimados por la pol¨ªtica gubernamental de dialogar, concertar, charlar y no actuar¡± como dej¨® dicho con claridad el ex vicepresidente Vargas Lleras en su columna dominical. En efecto ya pas¨® en el Canal del Dique donde los habitantes del Norte de Bol¨ªvar y el sur del Atl¨¢ntico realizaron un bloqueo por 10 d¨ªas para que se tomaran medidas de prevenci¨®n a posibles inundaciones. Para el medio de comunicaci¨®n Alerta Caribe, el chistecito cost¨® m¨¢s de diez mil millones de pesos.
El concepto Bien Com¨²n es muy claro. La constituci¨®n se refiere a ¨¦l dos veces, la primera para obligar a los miembros de los cuerpos colegiados de elecci¨®n directa en representaci¨®n del pueblo a actuar consultando la justicia y el bien com¨²n; y la segunda para limitar la actividad econ¨®mica y la iniciativa privada a los l¨ªmites del bien com¨²n. Estas restricciones no se aplican a las comunidades porque sus intereses est¨¢n por encima del Bien Com¨²n.
Es preocupante que la derogatoria de hecho del Bien Com¨²n no cause un esc¨¢ndalo mayor. Si frente al delito se antepone el di¨¢logo como lo recomienda y practica el gobierno Petro estamos frente a un problema may¨²sculo de solidaridad con la ley frente al delito.
¡°El consenso sobre la validez de unas normas ¨¦ticas universales se ha perdido.¡± El oportunismo justifica las violaciones de la ley y convierte a los protestantes que bloquean en h¨¦roes cuando estos han logrado triunfar.
Con la invasi¨®n de tierras que se ha presentado en varios departamentos se repite el mismo fen¨®meno. El gobierno di¨® un plazo para abandonar las tierras invadidas y esta orden perentoria no se cumpli¨®. Los delitos de invasi¨®n y bloqueo son primos hermanos.
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