Jorge Zorro, ministro de Cultura: ¡°La primera dama no va a definir la pol¨ªtica musical de Colombia¡±

¡°Yo lo quiero mucho, porque ese es un hombre de val¨ªa cultural enorme¡±, dijo el domingo pasado el presiente Gustavo Petro en una entrevista. Se refer¨ªa al m¨²sico Jorge Zorro, su ministro encargado de Cultura desde que pidi¨® la renuncia a la dramaturga Patricia Ariza. Esta ¨²ltima sali¨® del gabinete afirmando que la primera dama, Ver¨®nica Alcocer, era mucho m¨¢s cercana a Zorro, entonces viceministro, y que esa cercan¨ªa motiv¨® su retiro. Zorro niega rotundamente, en esta entrevista con EL PA?S, que la primera dama tenga poder en el ministerio. ¡°No tiene ninguna influencia¡±, asegura el hombre que recibe halagos del presidente.

El maestro Zorro (Bogot¨¢, 76 a?os), formado en en el conservatorio Tchaikovsky de Mosc¨² en los a?os 70, lleva d¨¦cadas liderando escuelas de m¨²sica cl¨¢sica en Colombia y ha influenciado considerablemente la sensibilidad musical de Petro. El presidente ha manifestado en Twitter que quisiera emular el sistema de orquestas venezolano, que Zorro conoce bien porque trabaj¨® con el fundador del sistema Jos¨¦ Antonio Abreu. Decenas de m¨²sicos colombianos han sido cr¨ªticos de ese sistema y temen que el Gobierno le de prioridad a las orquestas de m¨²sica cl¨¢sica por encima de otros g¨¦neros musicales. Desde su despacho, el maestro Zorro promete que no ser¨¢ el caso y no parece preocupado de que los m¨²sicos sigan esc¨¦pticos.

Pregunta. El domingo el presidente Petro explic¨®, en una entrevista, su ¡°teor¨ªa musical cl¨¢sica¡±: dijo que este tipo de m¨²sica impulsa el trabajo en equipo y la abstracci¨®n mental para fortalecerse en matem¨¢ticas y la sensibilidad ?Comparte esta visi¨®n?

Respuesta. S¨ª. Desde el punto de vista de la neurociencia esto ya se ha explicado. Lo que dice el presidente es que, si tocas el piano o el viol¨ªn, tienes el mismo el desarrollo en la motricidad fina y en las ¨¢reas del cerebro relativas a las matem¨¢ticas y los lenguajes. Por eso no es de extra?ar que en los alumnos que han tenido esa estimulaci¨®n sensorial son los mejores en matem¨¢ticas y lenguaje. Desde el punto de vista antropol¨®gico, con la m¨²sica se desarrolla la sensibilidad y le permite al ser humano apropiarse de las bondades de la cultura. Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez dec¨ªa que la cultura es el aprovechamiento social del conocimiento.

P. Dice el presidente que detr¨¢s de esta teor¨ªa musical cl¨¢sica est¨¢ lo que ¨¦l propone como ¡°explosi¨®n cultural¡±.

R. S¨ª, la explosi¨®n cultural se refiere a c¨®mo el ser humano puede aprovechar todas sus posibilidades: es la educaci¨®n de la sensibilidad. El presidente tambi¨¦n se?alaba en esa entrevista otra cosa importante, que la m¨²sica impulsa el trabajo en grupo, comunitario, algo que dan las orquestas y otros grupos art¨ªsticos, como la danza o grupos comunitarios de graffiti. Yo tuve la experiencia maravillosa de trabajar con el doctor Petro cuando ¨¦l era alcalde de Bogot¨¢. Creamos unas 116 orquestas en la ciudad, y atendimos unos 16.000 ni?os en los colegios. Ojal¨¢ pudi¨¦ramos extender esto a todo el pa¨ªs. Es lo que quiere el presidente, extenderlo, introduciendo la m¨²sica al sector educativo con un enfoque diferencial y territorial.

P. ?Desde cu¨¢ndo comparte con el presidente estas teor¨ªas musicales?

R. La primera vez que nos encontramos lo llev¨¦ a que conociera el proyecto ¡®Tocar y Luchar, Cafam Colombia¡¯, en Bosa. Es un proyecto que hab¨ªamos desarrollado con 700 ni?os tocando en orquestas. Ese d¨ªa tocaban la primera sinfon¨ªa de Beethoven, fue muy interesante. En la entrevista del domingo el presidente mencion¨® que ¨¦l una vez hab¨ªa llevado a Bogot¨¢ a unos de esos mechudos, rockeros, [el presidente se refer¨ªa a la banda Kiss], y que cuando les preguntaron qu¨¦ opinan de rock colombiano, respondieron: ¡®bien, pero les falta estudiar m¨²sica¡¯. [El presidente usa la an¨¦cdota para argumentar que hay que fortalecer el estudio de la teor¨ªa musical cl¨¢sica]. ?Por qu¨¦ es interesante? Porque el estudio de la m¨²sica exige niveles de abstracci¨®n que no son tan corrientes en otras artes.

P. Decenas de m¨²sicos lo critican por querer copiar el sistema de orquestas venezolano, en parte porque privilegia lo europeo y deja de lado la diversidad musical.

R. En Colombia no cabe una copia del sistema venezolano. El programa venezolano hace parte de la educaci¨®n informal, y hacen un trabajo maravilloso en ese sentido, pero lo que el presidente quiere, y estoy completamente de acuerdo, es introducirlo en el sistema educativo formal. Eso obliga a que todos los ni?os tengan la experiencia de desarrollar esa sensibilidad hacia las artes, hacia la m¨²sica. Claro, debemos hacerlo de forma diferencial, con enfoque territorial, porque no es lo mismo llegar a un sitio donde no cabe una orquesta sinf¨®nica y donde de pronto hay un grupo de chirim¨ªas, arpas llaneras o acordeones. Pero se cumple el mismo objetivo: sensibilizar a los ni?os, darles unos paradigmas diferentes, crear posibilidades de trabajo comunitario. El presidente se?ala que en Colombia el trabajo en equipo es muy pobre. Tenemos una oportunidad maravillosa para que los ni?os empiecen desde la edad m¨¢s temprana a colaborar entre ellos a trav¨¦s de las artes.

P. Los m¨²sicos lo critican por darle prioridad a las orquestas sinf¨®nicas en vez de fortalecer el Plan Nacional de M¨²sica para la Convivencia, que ha funcionado relativamente bien y no favorece un g¨¦nero musical

R. El Plan fue un trabajo maravilloso que hizo el maestro Alejandro Mantilla durante 20 a?os en el ministerio, y est¨¢ fundamentalmente relacionado con la educaci¨®n informal a trav¨¦s de las casas de cultura o de las escuelas de m¨²sica de los municipios. Pero no est¨¢n dentro del sistema educativo propiamente. Esa es la diferencia. Si no existiera el Plan Nacional de M¨²sica para la Convivencia, ser¨ªa casi imposible abordar todo el pa¨ªs. El Plan Nacional de M¨²sica para la Convivencia va a ser el soporte de esa visi¨®n desde lo formal.

P. ?C¨®mo piensa recuperar la relaci¨®n con los m¨²sicos que han sido cr¨ªticos?

R. Les dije ¡®este es un proyecto en construcci¨®n, ustedes tienen una sabidur¨ªa importante¡¯. Hicimos con ellos 11 mesas t¨¦cnicas que estar¨¢n en la creaci¨®n del sistema. Es muy importante que la comunidad participe, el Gobierno del cambio busca que todo sea participativo. Hay gente magn¨ªfica, muy preparada, que pueden hacer aportes muy interesantes.

P. La exministra Patricia Ariza dijo que usted era muy cercano a la primera dama. Una muestra de eso fue que usted viaj¨® con Ver¨®nica Alcocer a Venezuela y Ariza no estaba enterada del viaje.

R. A ver, hay unas narrativas de prensa que son ¡­ muy particulares de la prensa. Pero realmente no. Simplemente me llaman, me piden que acompa?e a la primera dama en un viaje a Caracas, y yo no puedo decir que no. No fue algo urdido, por debajo de cuerda, nada.

P. Pero la Ministra no fue informada del viaje y era precisamente para conocer el sistema de orquestas all¨¢.

R. Esa parte no la s¨¦ ?Por qu¨¦ me piden a mi el favor de que la acompa?e a Venezuela? Seguramente porque como yo conoc¨ªa el sistema, le pod¨ªa dar orientaciones. Fue solo un d¨ªa y nos mostraron cosas muy lindas: una orquesta de jazz espectacular, una obra de teatro extraordinariamente bien trabajada con los ni?os.

P. ?Por qu¨¦ es Ver¨®nica Alcocer la que viaja? ?La primera dama va a tener un rol en definir la pol¨ªtica de m¨²sica del pa¨ªs?

R. No.

P. ?La primera dama tiene gran influencia en el Ministerio de Cultura?

R. Desde que me posesion¨¦ como viceministro solo la vi en un consejo de ministros ampliado, donde estaban todos los viceministros, y en el avi¨®n cuando fuimos a Venezuela. No la he visto ac¨¢, en el ministerio. Es parte de los relatos que arma la prensa un poco¡­ imaginativos. No tiene ninguna influencia.

P. El diario El Espectador reporta que Manuel Grau, empresario catal¨¢n y cercano a Ver¨®nica Alcocer, tiene mucho poder en el ministerio.

R. Yo conoc¨ª a Manuel Grau en la alcald¨ªa, porque ¨¦l lleva muchos a?os en contacto con el presidente, y ¨¦l acompa?¨® a la primera dama a Venezuela. Pero ac¨¢, en el Ministerio, no lo he visto tampoco ni una sola vez.

P. En su primera semana como ministro encargado se reuni¨® con una fundaci¨®n musical de Yamaha. ?Tiene un acuerdo para comprar nuevos instrumentos?

R. No. Tuvimos una visita importante del embajador de Jap¨®n, y ¨¦l invit¨® a la gente de Yamaha a que estuviera. Fue solo una conversaci¨®n. Ellos se ofrecieron a colaborar con el Ministerio, seguramente trabajar¨¦ con el se?or embajador a ver si me dan alguna donaci¨®n de instrumentos (risas). Ojal¨¢. El embajador, como sabe del proyecto de m¨²sica del presidente Petro, seguramente por eso dijo: voy a llevar a Yamaha.

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