En Colombia no se puede¡
Hablar de casi nada. Ya no hay opiniones, sino bandos. Y esos bandos muchas veces son incapaces de aceptar matices
No se puede hablar a favor de la marihuana sin ser se?alado como comunista o petrista.
No se puede afirmar que el pa¨ªs va mal en seguridad porque le etiquetan de uribista fascita.
No se puede decir que la salud en Colombia es buena porque es sat¨¢nico opositor.
No se puede decir que el sistema de salud es malo porque eso lo convierte en comunista destructor.
No se puede mencionar con horror a los falsos positivos porque resulta convertido en mamerto.
No se puede hablar bien del sector empresarial porque es un capitalista explotador.
No se puede se?alar que hay que mejorar las condiciones de los trabajadores m¨¢s humildes a menos que quiera llevar el ¡®inri¡¯ de destructor de la econom¨ªa.
No se puede creer que hay que acabar con el narcotr¨¢fico a como d¨¦ lugar porque se vuelve un asesino de derecha.
No se puede so?ar con que el narcotr¨¢fico se regule, para acabar la guerra, porque hace metamorfosis en drogo marihuanero.
No se puede indagar sobre las acciones del Gobierno porque se vuelve un ¡®golpeblandista¡¯.
No se puede aplaudir un acierto del Gobierno sin verse convertido en un contratista.
No se puede defender a la prensa y a los periodistas porque eso lo hacen los vendidos a la agenda uribista.
No se puede apoyar a la Reforma Agraria sin que lo terminen condenando como guerrillero.
No se puede hacer una defensa de la propiedad privada sin ser calificado de paramilitar.
¡°No se puede pagar la gasolina a precio internacional porque somos pa¨ªs productor¡±, dicen los unos.
¡°No se puede subsidiar la gasolina porque as¨ª fue como el anterior gobierno termin¨® por ahogar la econom¨ªa¡±, responden los otros.
En Colombia est¨¢n matando la sensatez y el respeto. Ya no hay opiniones, sino bandos. Y esos bandos muchas veces son incapaces de aceptar matices. O meto gol o me meten gol, pero hay que eliminar al otro. Los l¨ªderes son mes¨ªas dementes que prefieren lanzar sus huestes al campo de batalla antes que aceptar que a veces es sano empatar. Eso es democracia.
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