Latinoam¨¦rica formaliza en Cartagena una plataforma fiscal conjunta para frenar la inequidad

Tres de las mayores econom¨ªas de Suram¨¦rica (Chile, Colombia y Brasil) han congregado, este jueves en Cartagena de Indias, a funcionarios y ministros de Hacienda de una quincena de pa¨ªses latinoamericanos para concretar una plataforma regional conjunta que permita abordar los desaf¨ªos que hoy supone un panorama econ¨®mico mundial en cabeza, entre otros, de los gigantes tecnol¨®gicos (Netflix, Spotify o Amazon). Se trata de una acci¨®n conjunta in¨¦dita, que incluye como firmantes a las otras tres grandes econom¨ªas de la regi¨®n (M¨¦xico, Argentina y Per¨²) para discutir y armonizar la reforma de algunas falencias en la estructura fiscal de un conjunto de naciones que configuran una de las zonas m¨¢s desiguales del mundo en la distribuci¨®n de su riqueza.

El debate sobre una tasa de gravamen corporativo a nivel mundial viene de tiempo atr¨¢s y los desbarajustes sociales heredados de la pandemia han hundido el acelerador. Las grandes econom¨ªas del mundo ya han alcanzado acuerdos recientes para gravar con un m¨ªnimo del 15% a los beneficios de las tecnol¨®gicas y otras grandes empresas transnacionales en estos pa¨ªses. El exministro de Hacienda de Colombia, Jos¨¦ Antonio Ocampo, quien desde ese cargo lider¨® la preparaci¨®n de la cumbre, recordaba en un art¨ªculo publicado esta semana por el diario El Tiempo de Bogot¨¢, que el aterrizaje y consolidaci¨®n de la econom¨ªa digital ha facilitado las cosas para que las grandes fortunas y corporaciones se sirvan de m¨¢s ¡°sociedades fantasmas¡± en para¨ªsos tributarios y as¨ª pagar una ¡°¨ªnfima parte de lo que les corresponde¡±.

Es bien sabido que tecnol¨®gicas como Google, Facebook o Amazon han pagado impuestos durante a?os en jurisdicciones e islas con tasas impositivas muy bajas donde, adem¨¢s, radican sus sedes financieras, y no en los lugares donde venden y producen. No en vano, el encuentro en Cartagena de Indias ha sido llamado la Primera Cumbre de Latinoam¨¦rica y el Caribe para una tributaci¨®n global incluyente, sostenible y equitativa. Desde la organizaci¨®n han explicado que el nuevo foro servir¨¢ como canal de di¨¢logo para desarrollar pol¨ªticas fiscales internacionales y regionales m¨¢s inclusivas. De acuerdo con un informe del Banco Interamericano de Desarrollo, para 2020 el 10% de las personas con mayores ingresos en la regi¨®n ganaba 22 veces m¨¢s que el 10% m¨¢s pobre. El 1% m¨¢s rico, a su vez, acapara el 21% total de los ingresos.

Por eso la agenda, impulsada por los tres pa¨ªses convocantes, que est¨¢n gobernados por mandatarios con agendas progresistas, pone sobre la mesa temas como la tributaci¨®n ambiental, la progresividad en estructuras que han sido regresivas e incluyen un amplio men¨² de prebendas para corporaciones y rentas altas, o, finalmente, la distribuci¨®n de los poderes econ¨®micos mundiales como las ya mencionadas multinacionales.

El pacto est¨¢ pensado para una era digital que, en muchos aspectos, no ha hecho si no ensanchar las desigualdades de Am¨¦rica Latina. De hecho, un informe del Fondo Monetario Internacional de 2015 se?ala que la regi¨®n pierde alrededor del 1,5% del PIB por cuenta de la baja tributaci¨®n de las grandes corporaciones y rentas m¨¢s altas de capital, ya sea mediante evasi¨®n directa o a trav¨¦s de estrategias m¨¢s sofisticadas de elusi¨®n. La cifra ya es preocupante, aunque se queda corta frente al 6,1% del PIB total que arrojan estudios de la Comisi¨®n Econ¨®mica para Am¨¦rica Latina y el Caribe (CEPAL). En todo caso, la evasi¨®n y elusi¨®n de impuestos se ha traducido, seg¨²n informes de diversas agencias multilaterales, en arquitecturas estatales desfinanciadas a la hora de proveer servicios b¨¢sicos.

La propuesta es un avance en la misma senda de los pa¨ªses del G-7, el club de los Estados m¨¢s poderosos del mundo, que desde 2021 viene tejiendo una serie de acuerdos para poner freno a las ventajas fiscales de las grandes corporaciones y robustecer la recaudaci¨®n para sus planes de reactivaci¨®n econ¨®mica. En el caso latinoamericano, 50 organizaciones de la sociedad civil han participado en la cumbre y han formulado una bater¨ªa de 10 reformas para la regi¨®n. Entre ellas sobresale la de reforzar los mecanismos de transparencia, as¨ª como tambi¨¦n incorporar un enfoque de g¨¦nero que elimine las ¡°discriminaciones¡± en las pol¨ªticas fiscales.

El Ministro de Hacienda colombiano Ricardo Bonilla, sucesor de Ocampo y anfitri¨®n entusiasta de la cumbre, record¨® durante el discurso de apertura del encuentro que la progresividad tributaria, que garantiza la participaci¨®n y distribuci¨®n equitativa de una sociedad, es un instrumento invaluable para amortiguar la concentraci¨®n y la desigualdad que se ha acentuado en el mundo: ¡°No se trata solamente de que las nuevas actividades econ¨®micas generen nuevos ingresos. Es que esos mayores ingresos tambi¨¦n se repartan justamente¡±, asegur¨®. El asunto, a?adi¨®, est¨¢ asociado con la idea extendida entre m¨²ltiples gobiernos durante los ¨²ltimos a?os de que hab¨ªa que hacer ¡°concesiones inadecuadas¡± a las empresas bajo el pretexto de que era la mejor forma de incentivar la inversi¨®n: ¡°Eso le hizo da?o a todos los pa¨ªses receptores. Solo est¨¢n ganando los pa¨ªses de origen. O los pa¨ªses sede¡±.

La cumbre ha contado con el acompa?amiento de la CEPAL, y dentro de los signatarios del acuerdo figuran pr¨¢cticamente todos los Estados latinoamericanos. Sin embargo, la Venezuela del dictador Nicol¨¢s Maduro, cuyo sistema financiero se ha acercado m¨¢s en los ¨²ltimos tiempos a los intereses del banco central ruso que al de sus vecinos, ha estado ausente.

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