Un d¨ªa en la vida del ministro Bonilla
Su mayor aliada es la regla fiscal, el muro de contenci¨®n de la represa presupuestal
El presidente Petro acaba de anunciar su ocurrencia de la semana. Quitar la regla fiscal. Dice que le impide al Gobierno gastar m¨¢s y salvar la econom¨ªa.
Lo que le impide gastar m¨¢s no es esa regla. Est¨¢ bien documentado que lo que tranca ejecutar el presupuesto de vivienda, infraestructura y regal¨ªas es la incompetencia de sus equipos, las dudas frente a la pol¨ªtica Mi casa ya, a las 4G y 5G de carreteras, y las regal¨ªas del petr¨®leo. A octubre solo se ha ejecutado una fracci¨®n peque?a de la inversi¨®n en vivienda e infraestructura. En regal¨ªas hay m¨¢s de 15 billones por ejecutar.
Pero extra?a m¨¢s es que el presidente Petro no para de anunciar gastos: 1) congel¨® los peajes, y eso requerir¨¢ que Hacienda pague un hueco de 500.000 millones; b) congel¨® el SOAT y eso cre¨® otro hueco de medio bill¨®n; c) no subi¨® suficiente la unidad de pago por capitaci¨®n de la salud, y eso cre¨® un hueco en las EPS de 5 billones, que el ministro Jaramillo pide que Hacienda le cubra; d) decidi¨® no subir m¨¢s r¨¢pido los precios de la gasolina y el di¨¦sel, y abri¨® un hueco de 20 billones en Ecopetrol y Hacienda; e) anunci¨® que la universidad p¨²blica ser¨¢ gratis, y el ministro Bonilla debe cubrir otro hueco de 1,7 billones; f) decidi¨® mantener la miope opci¨®n tarifaria de energ¨ªa el¨¦ctrica de Duque, y no gir¨® los subsidios a las electrificadoras, que abrieron un hueco de cinco billones.
Esa es la verdad: el presidente Petro no para de gastar billones y billones cada semana. No se entiende entonces que salga con el irrisorio anuncio de que no lo dejan gastar m¨¢s. Qu¨¦ tal que lo dejaran. Regalar¨ªa los tomates en las plazas de mercado, la sal y el salchich¨®n en las tiendas, y el agua y la luz en las casas.
Justamente para eso se inventaron las reglas fiscales. Para defender al presupuesto p¨²blico y al ministro de hacienda de mandatarios excesivamente generosos e irresponsables, que van regalando plata ajena a diestra y siniestra.
El presidente parece no saber cu¨¢nto vale un peso y lo dif¨ªcil que es producirlo ?Ha balanceado un presupuesto? ?Ha producido un bien o un servicio? ?Ha generado utilidades en una empresa?
El presidente Petro, adem¨¢s, muele a palos a los que s¨ª producen los pesos, pagan los impuestos y dan para que el Estado y los mandatarios posen de generosos: los empresarios. Los llama esclavistas y explotadores.
El presidente debe saber que cuando los empresarios no producen y no obtienen utilidades, se esfuman los impuestos. En esa circunstancia, el ministro Bonilla no tiene m¨¢s remedio que emitir bonos de deuda. Los impuestos y la deuda son las ¨²nicas fuentes para pagar por el inmenso y generoso coraz¨®n del presidente.
Pues bien, los compradores de bonos de deuda p¨²blica solo le creen a la regla fiscal. Saben que es el ¨²nico instrumento aceptado y visto por todos, que ordena la relaci¨®n entre ingresos y gastos del Gobierno.
Sin la regla fiscal, la fecundidad de regalos y prebendas semanales llevar¨ªan al traste al Gobierno. De hecho, como vamos, el a?o 2024 se ve muy complicado para las cuentas del ministro Bonilla, y ni pensar lo que ser¨¢ el 2025. No le van a alcanzar las reformas tributarias de los ministros Restrepo y Ocampo, ni la subida de los precios del petr¨®leo. No le va a alcanzar nada. Como en su momento no le alcanz¨® a Rojas Pinilla, el ¨²ltimo populista irresponsable que tuvimos. La regla fiscal es la forma de defendernos contra populistas irresponsables.
Estimados congresistas, lleg¨® el momento de constatar si ustedes tienen columna vertebral, o si en su lugar hay un trozo de caucho que sirve para las venias, las arrodilladas y servir de tapete al ejecutivo. Si dejan avanzar una reforma de salud que abrir¨ªa un hueco adicional de 12 billones al a?o, y contemplan desbaratar la regla fiscal, van a desaparecer los compradores de bonos del Gobierno.
El precio de la deuda p¨²blica se precipitar¨¢ al suelo como sucedi¨® en 2022, y la tasa de inter¨¦s que el ministro Bonilla tendr¨ªa que ofrecer para que le compren bonos aumentar¨¢ como la de Argentina, Nicaragua, Cuba o Venezuela. Ustedes dir¨¢n en qu¨¦ pa¨ªs quieren que vivamos 50 millones de colombianos. El pa¨ªs irresponsable que el presidente quiere crear, o en el responsable que hemos habitado por espacio de un siglo.
Ministro Bonilla, un d¨ªa en su vida debe ser un infierno, sumando cuentas y cuentas por pagar del presidente y su gabinete. Su mayor aliada es la regla fiscal. Usted lo sabe. Es el muro de contenci¨®n de la represa presupuestal. Sin ese muro, nos inundar¨ªamos de deuda e impuestos. No admita que, por una serie de disparates, acaben con la tradici¨®n centenaria de responsabilidad fiscal de Colombia.
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