El Gobierno se la juega con un presupuesto que tensiona al l¨ªmite la regla fiscal

El Comit¨¦ de la Regla Fiscal (CARF), un organismo estatal aut¨®nomo con facultades consultivas en asuntos de sostenibilidad presupuestal, ha encendido la alerta roja. Lo anterior se desprende del an¨¢lisis previo confeccionado por el comit¨¦ de expertos al borrador del proyecto de cuentas p¨²blicas presentado por el oficialismo ¡®petrista¡¯ para 2024. El texto, radicado el pasado s¨¢bado ante el Congreso, contempla un monto de 502 billones de pesos, un incremento del 19% en pesos corrientes frente al de este a?o. Es un tope riesgoso, seg¨²n los expertos que trazan la carta de navegaci¨®n en el tema, para el equilibrio y cumplimiento de las metas de d¨¦ficit establecidas en la ley.

En un contexto de tensi¨®n pol¨ªtica generada por los se?alamientos del presidente Petro a la gesti¨®n fiscal del conservador Iv¨¢n Duque, su predecesor en el Palacio de Nari?o, el proyecto del Presupuesto General de la Naci¨®n (PGN) nace con varios retos por delante. Las dos esquinas pol¨ªticas, aseguran los observadores, tienen algo de raz¨®n en sus quejas. El pa¨ªs, apurado por la gravedad y singularidad de la pandemia, sali¨® con ciertas debilidades estructurales tras acelerar el gasto p¨²blico. El d¨¦ficit fiscal lleg¨® al 57% del PIB, cuando el tope establecido es del 55%, y tension¨® las cuerdas de las finanzas p¨²blicas al igual que ha ocurrido en el resto del mundo.

?Cu¨¢l era el momento adecuado para encarrilar de nuevo el manejo de las finanzas? Desde la izquierda se?alan que el gasto del Gobierno Duque sigui¨® siendo exagerado cuando ya se deb¨ªa limitar la chequera. Desde la derecha responden que la administraci¨®n Petro tard¨® m¨¢s que otros pa¨ªses en iniciar el ajuste. Por lo pronto el CARF, un grupo aut¨®nomo que traza los linderos para el dise?o presupuestal del Estado, advierte en una circular de julio que las proyecciones del Gobierno para el PGN de 2024 comportan un riesgo a?adido para el equilibrio entre el gasto p¨²blico y los ingresos estatales.

En Colombia, desde hace unas d¨¦cadas, la brecha entre uno y otro se ha ido ensanchando. Por eso el CARF se muestra cr¨ªtico con algunas recetas propuestas desde el Ejecutivo para empezar a equilibrar la situaci¨®n. El Gobierno del progresista Gustavo Petro, en concreto, incluye dentro de sus c¨¢lculos ingresos equivalentes al 1,5% del PIB de fuentes tan vol¨¢tiles como los litigios o los arbitramentos contra particulares que adelanta el Estado en casos de elusi¨®n o evasi¨®n de impuestos. Se trata de una ¡°fuente¡± que le preocupa particularmente al CARF por depender de procesos que pueden tardar 10 a?os y con resultados inciertos.

Pero la senadora Clara L¨®pez, del izquierdista Colombia Renaciente y parte de la coalici¨®n de Gobierno, explica que la hoja de ruta establecida cumple todos los par¨¢metros de responsabilidad fiscal. Y a?ade, por su parte, que los tres ejes del presupuesto se centran en buscar la equidad social, la transici¨®n energ¨¦tica y la ejecuci¨®n de los acuerdos de paz de la Habana (2016).

A falta de que la propuesta enfrente los debates en las comisiones econ¨®micas conjuntas de Senado y C¨¢mara, se ha conocido que se ha dispuesto un aumento del 18,9% a los denominados gastos de funcionamiento, que comprenden los gastos de personal y de operaci¨®n del aparato burocr¨¢tico. Ser¨¢n en total 310 billones de pesos, cuya mayor tajada (237,5 billones) estar¨¢ dirigida a las transferencias, el dinero que el Ejecutivo nacional asigna a las entidades territoriales para el gasto en educaci¨®n, salud o asuntos similares. Al desgranar las partidas por sectores, el mayor receptor de recursos ser¨¢ la educaci¨®n, con una dotaci¨®n de 70,44 billones de pesos, un 28,5% m¨¢s que este a?o.

Los rubros que le siguen son la salud y protecci¨®n social, con 61,48 billones de pesos, y Hacienda, con 54,47 billones de pesos. El senador Juan Felipe Lemus, cr¨ªtico del Gobierno y miembro del independiente partido de La U, llama la atenci¨®n sobre el d¨¦ficit ¡°entre los ingresos proyectados, por 476 billones de pesos, y los gastos. El presupuesto para la vigencia entrante entra con un d¨¦ficit de 26 billones de pesos¡±. Pero el parlamentario antioque?o sugiere que la falta de ejecuci¨®n del Gobierno Petro le ha permitido ahorrar importantes recursos que podr¨ªa utilizar el pr¨®ximo a?o como colch¨®n para balancear las cuentas.

De acuerdo con el Ministerio de Hacienda, el grueso del presupuesto se pagar¨¢ a trav¨¦s de un recaudo tonificado gracias a la reforma tributaria de este Gobierno. Tambi¨¦n lo alimentan la renta petrolera y nuevas e indefinidas estrategias para aligerar y hacer m¨¢s eficiente el gasto p¨²blico. Prop¨®sitos, en todo caso, parciales frente a las inquietudes y estricta observancia del CARF. El horizonte fiscal, dicen los expertos, exige m¨¢s prudencia y austeridad: ¡°A partir de 2025 hasta 2031, la naci¨®n requerir¨¢ de cerca de 120 billones de pesos anuales en promedio de financiamiento interno y externo¡±, se lee en el informe publicado en julio.

El Gobierno Petro ha estipulado en el borrador del proyecto que el gasto p¨²blico seguir¨¢ en escalada hasta 2026. A partir de entonces, justo en el ¨²ltimo a?o del cuatrienio, pronostica que deber¨ªa bajar. Un hecho que los expertos tachan de improbable y que genera inquietud. ¡°Estos requerimientos de financiaci¨®n implican un riesgo no menor, que va a seguir presionando los mercados de deuda soberana de la naci¨®n y que necesitar¨¢ de un nivel importante de credibilidad en la sostenibilidad para lograrse¡±, se lee en el pronunciamiento a modo de advertencia. M¨¢s all¨¢ de esto, un hipot¨¦tico incumplimiento de la regla fiscal abocar¨ªa a un escenario complejo, con intereses crediticios a¨²n m¨¢s altos para el pa¨ªs y banderas rojas de riesgo para las agencias de calificaci¨®n internacionales.

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