730 largos d¨ªas, y lo que falta
Los dos primeros a?os del Gobierno de Petro han dejado incertidumbre pol¨ªtica, de seguridad y econ¨®mica, lo que ha hecho que estos 730 d¨ªas hayan sido dif¨ªciles y tortuosos. Aunque a¨²n hay tiempo para que cambie el ¡°cambio¡±
Si un Gobierno se dedica con decisi¨®n a desanimar a la gente y sembrar discordia; a cambiar las reglas del juego de sectores cr¨ªticos como petr¨®leo, vivienda, energ¨ªa, infraestructura, salud y pensiones; a subir los impuestos; a dar concesiones a los que matan y trafican droga, mientras debilita a la polic¨ªa y las Fuerzas Armadas; a insultar y matonear a los que producen e invierten; a regalar a los due?os de carros y camiones los dineros con los que deb¨ªa socorrer a los pobres; y a hacerse el de la vista gorda frente a actos rampantes de pillaje y corrupci¨®n entre sus colaboradores, no se puede sorprender de que la gente ande angustiada, la econom¨ªa se desinfle, el ahorro colapse, la inversi¨®n se estanque y muchos emigren, o saquen capitales del pa¨ªs.
Han sido dos a?os intensos en los que el crecimiento de la econom¨ªa se vio afectado porque el ahorro se desplom¨®, y con ¨¦l la inversi¨®n. Las familias pasaron de consumir mucho despu¨¦s de la pandemia, cuando recibieron dinero y se endeudaron con tarjetas de cr¨¦dito, a comprar mucho menos a ra¨ªz de que los precios han crecido m¨¢s que su ingreso, en especial en estratos medios y bajos. Los estratos altos pagan m¨¢s impuestos. Con menos plata en el bolsillo, las familias compran menos a las empresas; estas paran sus planes de inversi¨®n, y aparte tambi¨¦n tienen que pagar m¨¢s impuestos.
La inflaci¨®n se subi¨® en todas partes, pero en Colombia baj¨® m¨¢s lento. El Emisor ha tenido que mantener las tasas de inter¨¦s altas y los bancos han hecho lo mismo. A ese nivel de tasas de inter¨¦s poca gente se quiere endeudar. Es un c¨ªrculo vicioso en el que inversi¨®n, consumo y producci¨®n est¨¢n estancados. La econom¨ªa est¨¢ en un estado comatoso. Esto no vino del cielo. Es el resultado de decisiones estatales, respuestas racionales de hogares y empresas, y una dosis de mala suerte.
La actitud generalizada es esperar a ver qu¨¦ pasa, atrasar los planes econ¨®micos, las compras y los proyectos. El Gobierno no ayuda a reanimar a la gente, pues la actitud abrasiva y revanchista del presidente desanda los esfuerzos reactivadores de algunos ministros. Otros ministros comparten el activismo anti-econom¨ªa del jefe de Estado; un cuadro poco propicio.
Desde el punto de vista de los sectores econ¨®micos, unos han sido muy golpeados porque el Gobierno de Petro ha sido err¨¢tico en la pol¨ªtica de vivienda, haciendo que un sector que ven¨ªa bien, se estancara. Ha sido tremendamente nocivo y agresivo con el petr¨®leo y el gas, sectores que necesitan visibilidad a 15 o 20 a?os adelante. Si la regulaci¨®n es agresiva, no hay inversi¨®n. Ha sido opaco en la pol¨ªtica energ¨¦tica. No solo tardaron una eternidad en nombrar a los asesores t¨¦cnicos de la CREG, sino que hay problemas en el gas y en los precios de la energ¨ªa en la Costa Caribe, un sector donde se avecina una crisis que les estallar¨¢ en las manos. El supuesto gas de Venezuela nunca llegar¨¢, cosa que sab¨ªamos los que tuvimos que ver con eso en el pasado. ?C¨®mo depender, en un tema tan serio, de una cuentazo tan endeble? Es algo dif¨ªcil de entender.
La infraestructura ha visto aumentos en peajes tard¨ªos e incompletos. Falta claridad en las llamadas vigencias futuras, lo que equivaldr¨ªa a renegar de la deuda p¨²blica y de una tradici¨®n centenaria de buen pagador del Gobierno. Aparte, la incertidumbre sobre las pensiones llev¨® a parquear muchos fondos en t¨ªtulos de deuda p¨²blica, en lugar de en inversi¨®n productiva.
Se paralizaron el comercio y la industria, que sumados a los anteriores son m¨¢s del 60% de la econom¨ªa nacional. A hoy no hay un horizonte claro.
?Qu¨¦ ha hecho el Gobierno? Ha intentado compensar con gasto p¨²blico el declive en el consumo y la inversi¨®n privados. Para ello, se despacharon con dos reformas tributarias, una del Gobierno anterior y otra del actual, que nos han sacado mucho dinero del bolsillo. Los presupuestos de la Naci¨®n han aumentado considerablemente, pero el gasto efectivo ha sido escaso. La ejecuci¨®n del Gobierno ha sido deficiente y de baja calidad. Adem¨¢s, seg¨²n cuenta a diario la prensa, en lo ¨²nico que se afanan por ejecutar es en los numerosos esc¨¢ndalos de corrupci¨®n.
En resumen, tenemos incertidumbre pol¨ªtica, de seguridad y econ¨®mica, lo que ha hecho que estos 730 d¨ªas hayan sido dif¨ªciles y tortuosos. Se necesita un redireccionamiento desde la cabeza del Gobierno y desde los ministerios para que el pa¨ªs recupere un horizonte y claridad sobre hacia d¨®nde vamos. Bien trabajados, los 730 d¨ªas que quedan pueden enderezar el caminado.
Pero ese no parece ser el ¨¢nimo del Gobierno. Siguen empe?ados en que saben mejor que todo el mundo c¨®mo hacer la paz, ayudarle a los pobres y reactivar la econom¨ªa, mientras los anteriores 730 d¨ªas demuestran lo contrario. El cambio no funcion¨®. De sabios es reconocer y corregir. Cambien el cambio, o los cambian a ellos.
En contraste, inician el tercer a?o de Gobierno con una cacofon¨ªa de reformas: reelecci¨®n, constituyente, nueva de salud, servicios p¨²blicos, nueva laboral, nueva tributaria, inversiones forzosas al sistema financiero, agraria, en fin.
Esperemos que los pr¨®ximos dos a?os sean m¨¢s claros y que el Gobierno encuentre la luz y nos gu¨ªe, manejando mejor este gran veh¨ªculo, bus o avi¨®n, en el que vamos 52 millones de colombianos. Pero esa esperanza es ingenua.
El gran temor de mucha gente es que este Gobierno disfuncional a¨²n goza de un 30% de aceptaci¨®n. Eso los pondr¨ªa en la segunda vuelta presidencial de las elecciones de 2026. Con el presupuesto y la capacidad de influencia en determinadas regiones, ser¨¢ un enemigo formidable. La pol¨ªtica no necesariamente castiga la ineptitud, como lo demuestran muchas naciones cercanas.
Si 730 d¨ªas nos parecieron una eternidad, ?Qu¨¦ tal si en lugar de otros 730, faltaran 2.190 de este mismo enfoque gubernamental; es decir, hasta el 2030?
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