Urgen soluciones latinoamericanas a los desastres clim¨¢ticos

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En los ¨²ltimos 50 a?os, cada semana un pa¨ªs de Am¨¦rica Latina y el Caribe ha sufrido el impacto de un desastre clim¨¢tico en promedio, ya sea inundaci¨®n, tormenta tropical, hurac¨¢n, sequ¨ªa, ola de calor o incendio. Acumulados, estos desastres han impactado a cuatro de cada diez latinoamericanos y caribe?os, han causado casi 100.000 v¨ªctimas mortales y han generado p¨¦rdidas estimadas en m¨¢s de 360.000 millones de d¨®lares, equivalentes al PIB actual de Colombia, seg¨²n los an¨¢lisis de CAF. El cambio clim¨¢tico est¨¢ generando adem¨¢s un aumento de su frecuencia.

Por eso, no es de extra?ar que la Cumbre del Clima (COP28) de Dub¨¢i est¨¦ buscando soluciones para evitar que estos eventos clim¨¢ticos extremos sigan causando tantos estragos y, sobre todo, para preparar a la poblaci¨®n con mejores infraestructuras y sistemas de alarma m¨¢s eficientes. Pero como la regi¨®n es heterog¨¦nea, las estrategias deben ser personalizadas. Por ejemplo, los huracanes son frecuentes en el Caribe (el 97% de los desastres en la subregi¨®n, impactando a siete de cada diez caribe?os), las inundaciones y deslizamientos en la regi¨®n andina (que explican m¨¢s del 80% de los fallecidos), y las sequ¨ªas e incendios forestales en diversas ¨¢reas de la regi¨®n.

Los Gobiernos de Am¨¦rica Latina y el Caribe requieren planes con enfoques integrales, aliados comprometidos y muchos m¨¢s recursos para avanzar hacia una gesti¨®n efectiva en la prevenci¨®n y mitigaci¨®n de los riesgos de estos desastres. Hoy hay consenso sobre la necesidad de una visi¨®n y acci¨®n integrada entre la reducci¨®n del riesgo y la adaptaci¨®n al cambio clim¨¢tico. Y ello pasa por establecer sistemas de alerta temprana con mayor uso de tecnolog¨ªa; mejorar la planificaci¨®n urbana e invertir en m¨¢s y mejores infraestructuras resilientes; robustecer los programas educativos preparando y concienciando a las comunidades, en especial involucrando a las m¨¢s vulnerables, y maximizando la coordinaci¨®n entre todas las agencias estatales.

Para materializar esta visi¨®n se precisa de aliados y de recursos. Am¨¦rica Latina cuenta con una de las matrices energ¨¦ticas m¨¢s limpias del mundo y posee una enorme riqueza en biodiversidad, ambos elementos clave para mitigar el cambio clim¨¢tico e innovar en la adaptaci¨®n. Pero esto no es suficiente: es necesario movilizar financiaci¨®n y escalar todo el conocimiento, la experiencia y los recursos de bancos de desarrollo, instituciones globales y empresas presentes en toda la regi¨®n en sectores clave como la banca y los seguros (con instrumentos financieros tradicionales o m¨¢s innovadores como canjes de deuda y bonos resilientes), las telecomunicaciones y la tecnolog¨ªa (estableciendo sistemas de alerta temprana o permitiendo anticipar fen¨®menos clim¨¢ticos) para lograr una mitigaci¨®n y prevenci¨®n adecuadas.

La COP28 est¨¢ prestando m¨¢s atenci¨®n de la habitual a Am¨¦rica Latina y el Caribe. La regi¨®n decidi¨® presentarse como una regi¨®n de soluciones globales en temas clave como la seguridad alimentaria, la preservaci¨®n de la biodiversidad, la transici¨®n energ¨¦tica o las soluciones basadas en la naturaleza y, poco a poco, este planteamiento de alzar su voz en grandes foros globales est¨¢ dando sus frutos.

Una de las buenas noticias de la cumbre ha sido el anuncio de CAF de que invertir¨¢ 15.000 millones de d¨®lares hasta el 2030 (aproximadamente 2.000 millones al a?o) para que los pa¨ªses de la regi¨®n implementen estrategias integrales para hacer frente a los cada vez m¨¢s frecuentes desastres clim¨¢ticos. Este tipo de compromisos son imprescindibles para que, en poco tiempo, las ciudades y las comunidades est¨¦n menos expuestas y mejor preparadas ante el cambio clim¨¢tico.

Se necesita aprovechar este momentum de encuentros globales como la COP28 para recabar m¨¢s financiaci¨®n y acelerar la agenda verde de la regi¨®n. La atenci¨®n en la COP28 de Dub¨¢i poco a poco va transfiri¨¦ndose a la COP30 que se celebrar¨¢ en Bel¨¦m do Par¨¢, Brasil, el lugar donde se celebr¨® la cumbre amaz¨®nica de presidentes. Es momento de acelerar el paso y llegar desde Am¨¦rica Latina y el Caribe con soluciones que beneficien a todos, tanto a los latinoamericanos y caribe?os tan impactados por los desastres clim¨¢ticos, como a los ciudadanos globales. Solo as¨ª se conservar¨¢ la atenci¨®n lograda y se demostrar¨¢ que Am¨¦rica Latina y el Caribe es esa regi¨®n de soluciones globales.