Actores con par¨¢lisis cerebral, esquizofrenia o autistas se suben al escenario en Buenos Aires

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Domingo a la ma?ana en Villa Crespo, un barrio ubicado en el centro de Buenos Aires. En una antigua casa, a la que se ingresa por un largo pasillo, est¨¢ el Teatro Azul. En su sala, reina un clima de trabajo y algo de nerviosismo por el inicio de una funci¨®n, que comienza al mediod¨ªa. Las postales son de un engranaje bien aceitado: un t¨¦cnico sube a una escalera para acomodar las luces, otro prueba un video que forma parte del espect¨¢culo y uno de los directores pregunta si est¨¢n todos maquillados.

La escena se repite en otros elencos que montan cientos de obras en esta ciudad, quiz¨¢ la gran meca del teatro en Am¨¦rica Latina, pese a las constantes crisis del pa¨ªs y al recorte de subsidios para la cultura. Pero la obra Inmigrantes, ning¨²n ser humano es ilegal tiene una particularidad. Es una creaci¨®n de la Escuela de Teatro Inclusivo En Yunta y su elenco est¨¢ compuesto por una veintena actores diversos. ¡°Hay personas con par¨¢lisis cerebral, esquizofrenia, s¨ªndrome de Down y dentro de lo que se llama el espectro autista. Hay otros que no tienen nada. Por ejemplo, un pibe de 15 a?os al que le hicieron mucho bullying en la escuela. Ac¨¢ encontr¨® ac¨¢ un espacio de contenci¨®n y expresi¨®n¡±, cuenta Esteban Parola.

El actor y su colega Gimena Racconto Giunta dirigen la escuela y el espect¨¢culo que reflexiona sobre la inmigraci¨®n en el pa¨ªs desde inicios del siglo pasado. Llevan varias d¨¦cadas de trabajo con personas con discapacidad y tomaron el legado de Ana Mar¨ªa Giunta -madre de Gimena-, una pionera en el tema, que en 1994 inaugur¨® los Talleres de Arte para la Vida Todos en Yunta.

Antes de comenzar la funci¨®n, en la zona de boleter¨ªas, los actores Marcos Daniel Herrera, Catalina Kunik y Nicol¨¢s Steimberg cuentan qu¨¦ les fascina del hecho colectivo del teatro y la importancia de trabajar en cooperativa y tener una salida laboral. ¡°Esta obra nos da a las personas con discapacidad una oportunidad de trabajo. No hay nada m¨¢s lindo y terap¨¦utico que hacerlo desde lo art¨ªstico. Adem¨¢s de actuar, yo pinto, hago mandalas y rap. Cuando subo al escenario, siento que tengo que superarme a m¨ª mismo¡±, dice Herrera, que en la obra interpreta a un vendedor de diarios que pregona las noticias. ¡°Es muy divertido hacer teatro -agrega- y lo m¨¢s emocionante es el aplauso final, aunque antes de subir al escenario me pongo muy ansioso¡±.

Una historia de migrantes

Su compa?era Catalina interpreta a una polaca. ¡°Mi apellido es polaco¡±, cuenta ella. Para crear la obra, los actores tuvieron que indagar en el origen de sus familias. Hablaron con sus padres y abuelos, llevaron fotograf¨ªas a los ensayos y fueron creando la historia, que se centra en el Hotel de Inmigrantes, construido en 1911 para recibir y orientar a los que arribaban principalmente de Europa a la Argentina.

¡°Este teatro y este grupo son mi segunda casa. Ya estoy acostumbrada a actuar y me encanta. Siento mucho entusiasmo antes de salir a escena. A veces, me cuesta decir el gui¨®n y me trabo. Pero lo puedo superar eligiendo otras palabras¡±, dice Kunik. A Nicol¨¢s Steimberg le gustan los momentos previos al inicio de la funci¨®n: ¡°Para entrar en calor, nosotros caminamos, hacemos as¨ª (hace un adem¨¢n de descarga con las manos). Me gusta para relajar¡±.

Los actores toman su posici¨®n. La funci¨®n est¨¢ por comenzar. Inmigrantes, ning¨²n ser humano es ilegal es una alegor¨ªa preciosa sobre la diversidad, la hermandad y los v¨ªnculos en comunidad, a partir de las historias de los reci¨¦n llegados al pa¨ªs. La historia surgi¨® en el fog¨®n de la escuela, un espacio de ronda en el que los alumnos traen alguna inquietud o problema, m¨¢s all¨¢ de la clase de actuaci¨®n en s¨ª.

¡°En un juego pregunt¨¦ el origen del apellido de cada uno. Nadie sab¨ªa. A veces, las familias no les cuentan. Empezamos a indagar y a ser sujetos activos de curiosidad¡±, cuenta Parola. ¡°Trabajamos mucho con las familias. Nos preguntamos qu¨¦ pasar¨¢ con estas personas cuando sus padres no est¨¦n. Es fundamental trabajar sobre su independencia y autonom¨ªa¡±, agrega Racconto Giunta.

Desde que iniciaron el trabajo con personas con discapacidad, cambiaron algunos paradigmas en la sociedad. De todas formas, los directores de la Escuela de Teatro Inclusivo En Yunta creen que hay todav¨ªa un largo camino por recorrer. ¡°Hubo durante mucho tiempo -hoy tambi¨¦n pasa- una tendencia a romantizar la discapacidad. Cuando habl¨¢s del tema, muchos dicen: ¡®Trabaj¨¢s con chicos discapacitados¡¯. Yo digo que trabajo con adultos que tienen una discapacidad. Nuestro proyecto genera cooperativas teatrales y forma artistas. Hist¨®ricamente, se trabaj¨® la discapacidad desde el lado del no poder, desde la falencia, desde la falta¡±, destaca Racconto Giunta.

Parola da un ejemplo concreto en el montaje de la obra. ¡°Una vez que escribimos los textos, comenzamos la adaptaci¨®n para cada actor. No pensamos en qu¨¦ pueden hacer sino en c¨®mo pueden hacerlo, que es muy distinto. La pregunta es c¨®mo puede este actor desarrollar lo que yo quiero como director o autor que suceda en el escenario¡±.

Una de las actrices, por ejemplo, tiene dificultades en el habla. Parola habla de la necesidad de un p¨²blico que entienda esa ¡°est¨¦tica de la diversidad¡±. ¡°Nosotros le entendemos porque tenemos el o¨ªdo acostumbrado y compartimos mucho a?os con ella. Si sos espectador, te sugerimos que te banques el tiempo que tarda ella en decir su texto. Eso es entender el tiempo de los otros¡±.

En la charla con los actores, surge la cuesti¨®n del amor por el arte, la grupalidad y, principalmente, el trabajo. Como una gran mayor¨ªa de los elencos de teatro independiente de Buenos Aires, ¨¦ste funciona como una cooperativa. Los alumnos pagan una cuota para su formaci¨®n en la escuela. Pero a la hora de montar un espect¨¢culo, los ingresos -y las tareas- se dividen entre todo el elenco.

¡°Cuando montamos una obra -dice Parola- nos corremos del lado educativo y pasamos a tener una mirada m¨¢s laboral. ?Qu¨¦ implica ser una cooperativa? Hacer un espect¨¢culo, convocar al p¨²blico, llegar a horario, respetar al resto del elenco, dejar los camarines en condiciones¡­ Muchos nos dicen: ¡®Es la primera vez que me pagan por trabajar¡±.

¡°Cobrar por el trabajo que hacen -ampl¨ªa Racconto Giunta- les da autonom¨ªa y val¨ªa. Es decir: ¡®Lo que yo hago, vale¡¯. Tambi¨¦n implica responsabilidad y disciplina, cosas que quiz¨¢ no suceden en otras instituciones donde acuden¡±.

Cuando el tel¨®n cae, los aplausos resuenan en la sala llena. Las historias de los inmigrantes se desvanecen en el aire. Y dejan lugar a la alegr¨ªa y la adrenalina del teatro en el cuerpo. Los actores, siguiendo el antiguo ritual del teatro, se inclinan ante el p¨²blico en se?al de agradecimiento. Marcos Daniel Herrera revela que tiene un rap que espera poder incorporar a la obra y comparte un sentimiento: ¡°Aqu¨ª puedo expresar lo que llevo guardado dentro. Eso es muy curativo para m¨ª¡±.