¡°La gran potencia no tiene m¨¦dicos¡±: padres de ni?os enfermos denuncian la crisis de salud en Cuba
A la falta de medicamentos e insumos, acrecentada por los problemas econ¨®micos de la isla, se suma el ¨¦xodo de personal sanitario
En un papel cualquiera, lo que parece ser la hoja de un cuaderno de escuela, el doctor Goar Valeriano Gonz¨¢lez inform¨® a Maydelis Solano la imposibilidad de operar a su hijo. El Hospital Pedi¨¢trico de Holgu¨ªn no cuenta con los recursos para hacerlo, dice, y Jordan Daniel Montero Solano, de 13 a?os y apenas 28 kilos, seguir¨¢ sin saber lo que es alimentarse por la boca. ¡°Est¨¢ en espera de que se pueda operar¡±, escribi¨® con bol¨ªgrafo azul el cirujano. ¡°No se ha hecho por la situaci¨®n que tiene el pa¨ªs¡±, aclar¨®. Luego el doctor Goar estamp¨® su firma y un cu?o oficial del Ministerio de Salud P¨²blica de Cuba (Minsap), como para dejar constancia de que la hoja rayada de cuaderno de escuela realmente se trata de su historia cl¨ªnica.
Varias veces al d¨ªa, Solano coloca una jeringuilla en un extremo de la sonda que Jordan tiene conectada al est¨®mago. Las jeringuillas debe reutilizarlas por tiempo indeterminado y las lava con agua caliente. La sonda debe cambiarse cada 21 d¨ªas, pero Solano las alarga hasta dos meses, tiempo en que re¨²ne 600 pesos (casi dos d¨®lares al cambio) para comprar otra en el mercado informal. El ni?o solo puede ingerir alimentos l¨ªquidos: leche, maicena, yogurt, jugos naturales, compota o pur¨¦ a base de viandas o carne, lo que su madre pueda conseguir. Pero Jordan cada vez asimila peor la comida. Padece atresia esof¨¢gica, una enfermedad cong¨¦nita en la que parte del es¨®fago, que conecta el est¨®mago con la boca, no se desarroll¨® debidamente. ¡°Ya sus huesos se est¨¢n degenerando, impidiendo su capacidad motora¡±, lamenta Solano. ¡°Adem¨¢s, tiene una desnutrici¨®n cr¨®nica debido a la alimentaci¨®n que ha tenido en sus 13 a?os de vida¡±.
A las innumerables cartas que la madre ha enviado a las oficinas del Gobierno cubano, solo le han respondido que su ¡°planteamiento ha sido trasladado al Ministerio de Salud P¨²blica¡±. En otras de sus misivas, ha recibido de vuelta respuestas al modo ¡°agradecemos su comunicaci¨®n¡±, ¡°su asunto ha sido recibido y puede darle seguimiento¡±, una correspondencia que habla menos de la salud de un ni?o que de la ineficiencia de un Estado.
Cuando era peque?o, los m¨¦dicos no pudieron operarlo hasta que subiera de peso. Cuando subi¨® de peso, no pudieron atenderlo por la crisis de coronavirus. Ahora, que Jordan necesita de manera urgente entrar al sal¨®n de cirug¨ªas, no hay insumos. Tampoco hay gasas, el medicamento Evermin, insulina para su diabetes, y una serie de materiales m¨¦dicos que necesita.
Jordan apenas sale de su cuatro. La madre lo define como alguien muy solitario. No juega con otros ni?os. No va a la escuela, recibe clases de parte de un maestro que va a su casa. En cambio, oye m¨²sica, pinta, cose, y juega con el tel¨¦fono de su madre. ¡°Estoy desesperada, dolida, desamparada¡±, dice Solano en una entrevista virtual, mientras el hijo permanece en el cuarto.
Jordan, quien solo saldr¨¢ a la hora de comer, es uno de los cinco casos m¨¦dicos presentados el pasado el 19 de septiembre ante el Fondo Internacional de Emergencia de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) por activistas cubanos, que reclaman un pronunciamiento por parte del organismo de la ONU ante la situaci¨®n que viven muchos ni?os imposibilitados de atenderse en hospitales de la Isla.
El pa¨ªs, que por a?os se vendi¨® como una potencia m¨¦dica ante el mundo, lleva tiempo en una crisis sanitaria que solo se ha acrecentado tras la pandemia de coronavirus, como mismo se han deteriorado otros sectores de la econom¨ªa y la vida en general. Incluso cuando los enfermos, los hospitalizados o los pacientes de ocasi¨®n se quejaban de la falta de medicinas, la escasez de camas en los hospitales o las pocas ambulancias, el Gobierno sigui¨® diciendo que la isla era una potencia m¨¦dica.
Lo que sucede en estos momentos es que el problema ya no se trata solo de ausencia de medicamentos en farmacias, sino de la inexistencia de personal m¨¦dico en un pa¨ªs que en solo dos a?os ha reportado un ¨¦xodo de m¨¢s de 300.000 cubanos. De acuerdo con la Oficina Nacional de Estad¨ªstica e Informaci¨®n (ONEI), unos 12.000 m¨¦dicos salieron del sistema de salud p¨²blico cubano el pasado a?o.
¡°Ellos no lo dicen, pero en Cuba no hay m¨¦dicos, no lo quieren reconocer¡±, afirma desde Espa?a el doctor cubano Lucio Enr¨ªquez Nodarse, miembro del Gremio M¨¦dico Cubano Libre. ¡°Es algo m¨¢s grave de lo que cualquiera se imagina. Ellos jam¨¢s van a decir que la gran escuela de medicina cubana, la gran potencia, no tiene m¨¦dicos¡±.
Este a?o, el primer ministro Manuel Marrero Cruz no pudo m¨¢s que reconocer durante una reuni¨®n que ¡°la carencia de ingresos en divisas¡± imped¨ªa ¡°la adquisici¨®n de recursos que garanticen las demandas de salud¡± de la poblaci¨®n. Es decir, el Gobierno apenas puede ocuparse de sus enfermos.
En Cuba, con una poblaci¨®n de 11,2 millones de habitantes y donde 2,3 millones son menores de 18 a?os, las principales causas de muerte en menores de edad son los tumores malignos, la septicemia, los accidentes, las malformaciones cong¨¦nitas, deformidades y anomal¨ªas cromos¨®micas, de acuerdo con el Anuario Estad¨ªstico de Salud de 2022. Aunque se desconoce el n¨²mero total de ni?os que est¨¢n siendo desatendidos por el sistema de salud cubano, cada d¨ªa florecen las denuncias de padres en redes sociales reclamando ante esta situaci¨®n.
Yurislay Leyva Vasconcelo, madre de Yurisay Mar¨ªn Leyva, lleva a?os exigiendo una mejor calidad de vida para su hija que ahora tiene 22 a?os, y naci¨® con una acondroplasia (trastorno del crecimiento de los huesos), un glaucoma cong¨¦nito, y padece adem¨¢s de epilepsia, hipertensi¨®n y una gastritis medicamentosa.
¡°Nunca tiene los medicamentos que necesita, porque cuando no le falta uno, le falta otro, y hace un a?o no entra nada a la farmacia¡±, dice la madre de Yurisay, uno de los casos presentados ante Unicef.
Geobel Damir Ortiz Ram¨ªrez, de 9 a?os y otro de los casos expuestos ante el organismo de la ONU, est¨¢ diagnosticado con un neurofibroma plexiforme en el ojo derecho, entre otras enfermedades.
¡°El padecimiento de mi hijo es cr¨®nico y en Cuba no hay alternativas de operaci¨®n ni tratamiento para ¨¦l¡±, dice la madre, Eliannis Ram¨ªrez B¨¢ez. ¡°He denunciado la situaci¨®n hasta en el Minsap. He pedido ayuda por todos lados y nadie se inmuta a hacer nada. Estoy desesperada, angustiada, en ocasiones deprimida, sin fuerzas, porque es en vano todo en este pa¨ªs¡±.
Otro de los casos es el de la ni?a de 8 a?os Yoahira L¨ªa Zulueta Jorge, quien tiene una par¨¢lisis cerebral infantil (PCI), adem¨¢s de epilepsia, diabetes, asma y paladar hendido. Su madre no solo ha pedido ayuda por su salud, sino por las condiciones de vivienda en que permanece: ¡°La casa est¨¢ en peligro de derrumbe. He ido a todos los organismos y nada, solo me dicen que no hay recursos¡±, cuenta.
El quinto de los casos, Cristofer Antonio Olivera, de 4 a?os, lleva casi todo el tiempo que ha vivido esperando una operaci¨®n. Cuando ten¨ªa 1 a?o y reci¨¦n aprend¨ªa a caminar, tom¨® sosa c¨¢ustica por accidente, que le da?¨® para siempre el tubo g¨¢strico. Los m¨¦dicos le han comunicado a su abuela que no existen los insumos necesarios para operarlo, y mientras tanto Cristofer se alimenta con una jeringuilla y una sonda conectada a su est¨®mago.
Los encargados de Cristofer, como el resto de los padres antes mencionados, est¨¢n solicitando visas humanitarias con las que puedan salir de la Isla y atender a sus hijos en otros pa¨ªses. La activista Avana de la Torre, quien se present¨® ante las oficinas de la Unicef en Madrid, ha documentado desde entonces los casos de otros 1000 menores de edad desprotegidos por el gobierno cubano.
¡°Este es un grito de madres y abuelas de ni?os vulnerables en Cuba¡±, dice. ¡°Probablemente esta situaci¨®n no va a cambiar nada, m¨¢s que exponer al Gobierno cubano y la Unicef¡±.
A inicios de octubre, el director regional de Unicef para Am¨¦rica Latina y el Caribe, Garry Conille, visit¨® la isla y se reuni¨® con el mandatario Miguel D¨ªaz-Canel. Tras el recorrido, dijo que ¡°el contexto actual en Cuba crea limitaciones para las perspectivas de desarrollo de los ni?os y adolescentes¡±, y reiter¨® el compromiso de su organismo de ¡°ayudar a cerrar las brechas para satisfacer las necesidades de los ni?os, adolescentes y familias m¨¢s vulnerables¡±. Unicef, que el pasado a?o llev¨® a la isla 2,5 millones de d¨®lares de donantes p¨²blicos, de acuerdo con su reporte anual de 2022, ha reconocido que en el pa¨ªs persisten ¡°algunas carencias nutricionales¡± que afectan a los menores.
Desde sus oficinas en La Habana, la Unicef no ha brindado respuesta alguna a los reclamos y llamadas de los activistas. En declaraciones a EL PA?S, Sendai Zea, especialista en comunicaci¨®n de esa agencia dijo que ¡°Unicef comparte la preocupaci¨®n de c¨®mo la situaci¨®n de los ni?os, ni?as, adolescentes y familias se ha deteriorado debido a la prolongada crisis econ¨®mica en Cuba, afectando su acceso a los bienes y servicios necesarios para su bienestar y desarrollo¡±. Aunque Zea mencion¨® algunos de los programas y ¨¢reas en las que trabajan en Cuba, evit¨® pronunciarse sobre los casos de ni?os cuya vida peligra a falta de insumos y personal m¨¦dico.
Mientras los ni?os afectados y sus familias esperan respuestas, el doctor Enr¨ªquez Nodarse no es optimista con la situaci¨®n: ¡°No creo que vaya a pasar nada con estos ni?os, porque lo que va a salvar a los ni?os no es que la gente le mande una curita, un colch¨®n, o una silla de ruedas¡±, dice. ¡°Lo ¨²nico que va a salvar a los ni?os es que se acabe la dictadura. No hay una soluci¨®n a corto plazo¡±.
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