Daniel Ortega quita la nacionalidad a los 135 presos pol¨ªticos liberados y expulsados de Nicaragua

El r¨¦gimen de Daniel Ortega ha dado un nuevo golpe a las 135 personas liberadas el pasado jueves y expulsadas a Guatemala. La Corte Suprema de Justicia, controlada por el viejo guerrillero sandinista, ha informado la ma?ana de este lunes de que retira la nacionalidad nicarag¨¹ense a estos excarcelados, considerados presos pol¨ªticos por criticar o disentir del Gobierno autoritario de Managua. La Corte tambi¨¦n ordena el decomiso de todos los bienes de estas personas, que intentan rehacer su vida tras su liberaci¨®n y traslado a territorio guatemalteco tras una negociaci¨®n entre Estados Unidos y el r¨¦gimen de Ortega.

La Corte Suprema informa en su comunicado, emitido por la Sala Penal Uno del Tribunal de Apelaciones de Managua, las personas liberadas fueron condenadas ¡°por hechos delictivos que atentaron contra la soberan¨ªa, independencia y autodeterminaci¨®n del pueblo nicarag¨¹ense, incitando y promoviendo la violencia, el odio, el terrorismo y desestabilizaci¨®n econ¨®mica, alterando la paz, seguridad y el orden constitucional¡±. El aparato de justicia de Ortega ordena en su resoluci¨®n ¡°el decomiso de todos los bienes de los condenados, a fin de responder por los severos da?os materiales e inmateriales que las actividades delictivas de estos¡±. Para el r¨¦gimen, con esta decisi¨®n ¡°se hace justicia efectiva a las v¨ªctimas de estos delitos¡±. Esos ¡°delitos¡± fueron disentir de la dictadura de Managua, criticar al r¨¦gimen, exigir la libertad de los presos pol¨ªticos a apoyar a voces cr¨ªticas como el cura Rolando ?lvarez, una de las caras m¨¢s visibles de la disidencia pol¨ªtica nicarag¨¹ense.

Para la abogada Azahalea Sol¨ªs, defensora de derechos humanos exiliada en Costa Rica y a quien el r¨¦gimen tambi¨¦n despoj¨® de su nacionalidad, la decisi¨®n de Ortega es una muestra ¡°de que la profundizaci¨®n de la crisis pol¨ªtica y represiva de derechos humanos en Nicaragua es cada vez mayor¡± y que deja claro que tanto Ortega como su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, son sus perpetradores. Sol¨ªs, quien ha conversado con EL PA?S desde Ginebra, donde se encuentra para en las sesiones del Consejo de Derechos Humanos de la ONU que presentar¨¢ un informe de expertos sobre la situaci¨®n de Nicaragua, ha explicado que estos casos de los presos pol¨ªticos liberados el jueves y a quienes se les ha despojado de su nacionalidad pueden ser presentados en una denuncia contra Ortega ante la Comisi¨®n Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), pero tambi¨¦n pueden formar parte de una demanda ante la Corte Internacional porque ¡°convertir en ap¨¢trida a una persona es considerado un delito de lesa humanidad¡±, ha dicho. ¡°Estos casos se pueden llevar ante la Corte con sede en La Haya a trav¨¦s de uno de los pa¨ªs que aceptan su competencia, la jurisdicci¨®n universal¡±, ha explicado la experta, que adem¨¢s forma parte del Movimiento Aut¨®nomo de Mujeres (MAM), una de las principales organizaciones feministas de Nicaragua y de las primeras en ser perseguidas por el r¨¦gimen.

Sol¨ªs ha destacado que el Gobierno nicarag¨¹ense hizo p¨²blico el comunicado de la Corte Suprema en el momento cuando el grupo de expertos que analizan la situaci¨®n en Nicaragua presentaban un primer informe sobre las violaciones a los derechos humanos en el pa¨ªs centroamericano. Para Sol¨ªs es una estrategia del r¨¦gimen para desviar la atenci¨®n sobre las graves vejaciones que hoy eran denunciadas en Suiza. ¡°Es una canallada m¨¢s¡±, ha dicho Sol¨ªs.

El Gobierno de Joe Biden inform¨® la ma?ana del pasado jueves de que el r¨¦gimen de Ortega hab¨ªa decidido excarcelar a 135 presos pol¨ªticos y los env¨ªo en un avi¨®n con destino a Guatemala. ¡°La Administraci¨®n de Biden y Harris logr¨® la liberaci¨®n de 135 presos pol¨ªticos injustamente detenidos en Nicaragua, por razones humanitarias. Nadie debe ser encarcelado por ejercer pac¨ªficamente sus derechos fundamentales de libre expresi¨®n, asociaci¨®n y pr¨¢ctica de su religi¨®n¡±, dijo Jake Sullivan, asesor de Seguridad Nacional del Gobierno de Estados Unidos, a trav¨¦s de un comunicado publicado el jueves. Washington ha exigido al r¨¦gimen de Ortega un ¡°retorno pac¨ªfico a la democracia¡± y que libere a todos los presos pol¨ªticos en Nicaragua.

Los nicarag¨¹enses liberados han sido hospedados en varios hoteles de la llamada Zona 10 de la capital guatemalteca, donde se les ha provisto de ropa, alimentaci¨®n, atenci¨®n m¨¦dica y psicol¨®gica. Personal de ACNUR, la organizaci¨®n de Naciones Unidas para los refugiados, analiza cada caso y gestiona traslados a otras naciones para quienes quieran dejar Guatemala. El Gobierno del presidente Bernardo Ar¨¦valo les ha otorgado 90 d¨ªas de estad¨ªa legal y la posibilidad de quedarse de forma permanente. Una fuente de la Presidencia guatemalteca ha informado este jueves a EL PA?S de que los nicarag¨¹enses ¡°permanecen en Guatemala en la misma situaci¨®n, estatus ordinario de 90 d¨ªas. Desde el inicio ha sido un tema de car¨¢cter humanitario¡±. Y ha agregado: ¡°Seis han manifestado intenci¨®n de quedarse en Guatemala¡±.

Washington ha prometido visados para quienes quieran viajar a aquel pa¨ªs. Carlos Mart¨ªnez, ministro de Exteriores de Guatemala, ha dicho que el gesto de recibir a los nicarag¨¹enses ha sido una acci¨®n de solidaridad, sin esperar nada a cambio de parte de Estados Unidos. Cuando concedi¨® una entrevista a EL PA?S la ma?ana del pasado viernes, Ortega no hab¨ªa despojado de su nacionalidad a los nicarag¨¹enses. Al preguntarle si Guatemala estar¨ªa dispuesta a otorgarle la nacionalidad a estas personas, el ministro respondi¨®: ¡°Evidentemente hay que documentarlos. Hay aqu¨ª una secci¨®n consular de la embajada de Nicaragua, porque no hay embajador, y asumo que parte de este tr¨¢mite lo manejar¨¢ ACNUR¡±. Ortega ya hab¨ªa despojado de su nacionalidad a m¨¢s de 200 personas hace un a?o, entre ellos los escritores Sergio Ram¨ªrez, Premio Cervantes, y la poeta Gioconda Belli, Premio Reina Sof¨ªa de Poes¨ªa, adem¨¢s de a activistas, periodistas, acad¨¦micos y voces cr¨ªticas contra el r¨¦gimen.