¡®Nexus¡¯, de Yuval Noah Harari: un mundo ahogado en informaci¨®n
El historiador israel¨ª vuelve 10 a?os despu¨¦s de ¡®Sapiens¡¯ con una exploraci¨®n concienzuda y ambiciosa sobre las redes de comunicaci¨®n y su funci¨®n esencial en la organizaci¨®n humana
Diez a?os despu¨¦s de Sapiens, el libro que le convirti¨® en uno de los intelectuales m¨¢s influyentes del mundo, y tras haber vendido 45 millones de ejemplares de esa obra y dos secuelas, Yuval Noah Harari vuelve con Nexus, una exploraci¨®n concienzuda y ambiciosa sobre las redes de informaci¨®n y su funci¨®n esencial en la organizaci¨®n de las sociedades humanas a lo largo de la historia. Aunque se remonta a los tiempos anteriores a la invenci¨®n de la escritura, el libro tambi¨¦n se zambulle a fondo en las cuestiones m¨¢s candentes de la actualidad, con particular ¨¦nfasis en las redes sociales, la desinformaci¨®n y los riesgos de la inteligencia artificial, que ¨¦l considera una amenaza vital para la supervivencia no ya de la democracia, sino de la civilizaci¨®n en su conjunto.
La tesis central de Nexus es que la funci¨®n de la informaci¨®n no es representar la realidad, sino crear v¨ªnculos entre grandes grupos humanos. Harari admite que tres milenios de filosof¨ªa y cuatro siglos de ciencia nos han aportado vastas cantidades de informaci¨®n y un gran poder, pero no cree que por ello nos conozcamos mejor ni seamos m¨¢s sabios. Como historiador y como analista esc¨¦ptico de la ciencia y la tecnolog¨ªa, concede mucha m¨¢s importancia a la construcci¨®n de redes cooperativas mediante ficciones, fantas¨ªas e ilusiones sobre dioses, naciones y transacciones econ¨®micas. Desde esta perspectiva, la Biblia es mucho m¨¢s valiosa y poderosa que los Principia de Newton y El origen de las especies de Darwin juntos, como un bulo lo es m¨¢s que un mensaje veraz. La ignorancia es fuerza, como dijo George Orwell.
La teor¨ªa generalizada de que la informaci¨®n conduce a la verdad, y de ah¨ª a la sabidur¨ªa y al poder, es para Harari la ¡°idea ingenua de la informaci¨®n¡±. El autor se revuelve as¨ª contra los visionarios tecnol¨®gicos contempor¨¢neos que, como Mark Zuckerberg, Ray Kurzweil y el resto de la plana mayor de Silicon Valley, sostienen que las redes sociales promueven el entendimiento entre personas, crean un mundo m¨¢s abierto y generan un c¨ªrculo virtuoso del bienestar por donde fluyen ¡°la alfabetizaci¨®n, la educaci¨®n, la riqueza, la salud, la democratizaci¨®n y la reducci¨®n de la violencia¡± (Kurzweil). Algunas de las p¨¢ginas m¨¢s brillantes de Nexus se dedican a refutar de manera contundente, casi cruenta, ese espejismo candoroso.
Tomemos el caso de los rohiny¨¢, los habitantes musulmanes del oeste de Myanmar (antigua Birmania), un pa¨ªs de mayor¨ªa budista. Pese a las esperanzas de convivencia pac¨ªfica suscitadas a principios de los 2010, los rohiny¨¢ sufrieron en esa misma d¨¦cada unos torbellinos de violencia sectaria y racista promovidos en su mayor parte por las mentiras asesinas aparecidas y propagadas en Facebook, la red social del mismo Zuckerberg al que hemos visto m¨¢s arriba predicando las virtudes teologales de su negocio billonario. La campa?a de limpieza ¨¦tnica que, en 2016, destruy¨® los pueblos rohiny¨¢, asesin¨® a 20.000 civiles desarmados y expuls¨® de Myanmar a 700.000 musulmanes, se gest¨® y difundi¨® a trav¨¦s de las falsedades y los mensajes de odio que circularon por Facebook.
La ONU concluy¨® en 2018 que Facebook hab¨ªa desempe?ado un ¡°papel determinante¡± en la campa?a de limpieza ¨¦tnica, como ya hab¨ªa denunciado Amnist¨ªa Internacional y como le parecer¨¢ obvio a cualquier otro observador sensato. Pero ni Zuckerberg ni sus ejecutivos ni sus ingenieros pagaron el menor precio por ello, ni tampoco adoptaron ninguna medida de correcci¨®n en sus algoritmos. La jurisprudencia norteamericana libera de toda responsabilidad a las plataformas por las mentiras y los mensajes de odio que circulan por sus redes, y as¨ª seguimos seis a?os despu¨¦s pese a las iniciativas legales europeas ¡ªque se han topado con la fiera oposici¨®n de los abogados de Silicon Valley¡ª e incluso de una creciente suspicacia de parte de la clase pol¨ªtica estadounidense.
Pero el blanco de las cr¨ªticas de Harari no son los ejecutivos de Silicon Valley que han consentido toda esta inundaci¨®n de odio, ni menos a¨²n los ingenieros que han dise?ado los algoritmos. Su blanco son los propios algoritmos, porque la intenci¨®n del autor es avisar al mundo del riesgo, para ¨¦l inminente, de que las m¨¢quinas se hagan con el control de las sociedades humanas. ¡°Los ejecutivos de California no albergaban animadversi¨®n alguna hacia los rohiny¨¢¡±, escribe Harari. ¡°De hecho, apenas sab¨ªan de su existencia¡±. Algunos lectores se sorprender¨¢n de esta actitud exculpatoria hacia los responsables humanos de la propagaci¨®n del odio, m¨¢xime cuando el autor reconoce y documenta que el objetivo de la empresa era ¡°recopilar m¨¢s datos, vender m¨¢s anuncios y acaparar una proporci¨®n mayor del mercado de la informaci¨®n¡±. Pero el caso es que lo que realmente atormenta a Harari es el robot, no sus creadores.
El estilo discursivo de Nexus es puro Harari. El historiador tiene una habilidad endemoniada para exponer argumentos sofisticados sobre cuestiones complejas sin dolor para el lector, porque lo hace enlazando un ejemplo revelador tras otro, el arca de No¨¦ con Elon Musk, la mitolog¨ªa con la burocracia, la Biblia con ChatGPT. El libro est¨¢ exhaustivamente documentado y es producto de una reflexi¨®n profunda y perseverante, pero el lector se podr¨¢ beneficiar de todo ello sin sentir el menor dolor, ni fatiga, ni aburrimiento. Pocos pensadores pueden escribir 600 p¨¢ginas plagadas de ideas innovadoras y estimulantes que el lector puede absorber como quien da un paseo por el campo. Aunque sea un campo de minas.
Nexus
?Debate, 2024
608 p¨¢ginas, 23,90 euros
Nexus (edici¨®n en catal¨¢n)
Edicions 62, 2024
696 p¨¢ginas, 23,90 euros
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