Ronda la muerte, ronda
Casald¨¤liga es un ejemplo de globalizaci¨®n alternativa, de la esperanza, desde abajo
En 1971 era elegido obispo de S?o F¨¦lix do Araguaia, en el Mato Grosso (Brasil), el misionero claretiano P¨¨re Casald¨¤liga, nacido en Balsereny (Barcelona) hac¨ªa cuarenta y tres a?os en el seno de una familia campesina. Sus insignias episcopales fueron un sombrero de paja que le entreg¨® un l¨ªder campesino, un remo-borduna hecho de pau-brasilpor un indio tapirap¨¦, ofrecido por el jefe de la tribu, a guisa de b¨¢culo, un anillo donado por amigos espa?oles, que regal¨® a su madre. ¡°No tengo ning¨²n capisayo ni pienso llevar ninguna insignia¡±, confes¨®. Y lo ha cumplido.
El mismo d¨ªa de su consagraci¨®n episcopal public¨® una Carta Pastoral subversiva titulada Una Igreja da Amaz?nia em conflicto com o latifundio e a marginalizac?o, cuya difusi¨®n fue prohibida por el director de la polic¨ªa federal. ¡°En esta zona ¡ªescrib¨ªa¡ª se mata y se muere m¨¢s que se vive. Matar o morir es m¨¢s f¨¢cil aqu¨ª, m¨¢s al alcance de todos, que vivir¡±.
El prop¨®sito de Casald¨¤liga era construir una Iglesia comprometida con las aspiraciones y reivindicaciones de los indios, posseiros y peones, sin honras ni poder, en lucha contra el latifundio y toda forma de esclavitud y, por ello, perseguida por los due?os del dinero, de la tierra y de la pol¨ªtica, sin 'tiburones' ni explotadores del pueblo, formada por peque?as comunidades de base desparramadas por las calles y sert?os, con una estructura participativa, corresponsable y democr¨¢tica.
Ese modelo de Iglesia no se qued¨® en el papel, sino que se hizo pronto realidad en S?o Felix, como estaba sucediendo en otras iglesias de Am¨¦rica Latina, dando lugar al nacimiento de la iglesia de los pobres. Es esta iglesia popular la que se encuentra en la base de la teolog¨ªa de la liberaci¨®n ¡ªgu¨ªa ideol¨®gica de Casald¨¤liga¡ª, que ¨¦l mismo cultiva creativamente a trav¨¦s de sus libros de gran hondura espiritual, sentido m¨ªstico, inspiraci¨®n po¨¦tica, denuncia prof¨¦tica, car¨¢cter social, actitud revolucionaria y, sobre todo, con su ejemplo de vida. Una teolog¨ªa que, a pesar de las permanentes condenas de Roma, sigue viva y activa en el nuevo escenario latinoamericano, y se reformula en los nuevos procesos hist¨®ricos con la incorporaci¨®n de protagonistas emergentes como las comunidades ind¨ªgenas, campesinas, afrodescendientes, y los movimientos feministas, ecologistas, pacifistas, homosexuales, etc¨¦tera.
Fue en el Mato Grosso donde se despert¨® en ¨¦l la conciencia internacionalista, hasta convertirse en el obispo m¨¢s ¡°cat¨®lico¡± en el sentido etimol¨®gico del t¨¦rmino: ¡°universal¡±, que desarrolla a trav¨¦s de la defensa de las causas de los perdedores de la historia y del apoyo a los movimientos de liberaci¨®n del mundo entero. Casald¨¤liga es, en ese sentido, un ejemplo de globalizaci¨®n alternativa, de la esperanza, desde abajo.
Por todo ello no tardaron en lloverle las persecuciones de todos los poderes confabulados, militares, terratenientes y pol¨ªticos protectores de los latifundistas, incluido el Vaticano, tras la muerte de Pablo VI ¡ªque siempre lo protegi¨®¡ª. Se sucedieron las amenazas de muerte y los atentados contra su vida, en uno de los cuales fue asesinado el sacerdote Jo?o Bosco. Las ¨²ltimas amenazas de muerte han llevado a Casald¨¤liga a abandonar la modesta residencia donde ha vivido durante cuatro d¨¦cadas. El desencadenante ha sido el pronunciamiento judicial que obliga a la retirada de los ocupantes no-ind¨ªgenas de las tierras de Maraiwats¨¨d¨¨ y a su devoluci¨®n al pueblo Xavante, cuyos derechos garantiza la Constituci¨®n Federal de Brasil.
Pero Casald¨¤liga relativiza todas las persecuciones y amenazas. La poes¨ªa es su mejor respuesta y su forma de desmitificar la muerte, como demuestra en Romancillo de la muerte, tan lorquiano: ¡°Ronda la muerte, ronda/ la muerte rondera ronda./ Lo dijo Cristo/ antes que Lorca./ Que me rondar¨¢s morena,/ vestida de miedo y sombra./ Que te rondar¨¦, morena,/ vestido de espera y gloria./ Frente a la Vida,/ ?qu¨¦ es tu victoria?/... ?T¨² nos rondar¨¢s,/pero te podremos¡±. Es la m¨¢s bella traducci¨®n del desaf¨ªo de Pablo de Tarso a la muerte, cuando le dice con cierta arrogancia: ¡°?D¨®nde est¨¢, oh muerte, tu victoria? ?D¨®nde tu aguij¨®n?¡±. El obispo Casald¨¤liga, defensor de la vida de los empobrecidos, de los posseiros, de los ind¨ªgenas ¡ªtodos ellos excluidos del banquete neoliberal¡ª, es amenazado de muerte a diario ?Qu¨¦ paradoja!
El obispo catal¨¢n se sit¨²a en la mejor tradici¨®n de los obispos defensores de los indios en Am¨¦rica Latina, desde Bartolom¨¦ de las Casas hasta Leonidas Proa?o, obispo de Riobamba (Ecuador), y Samuel Ruiz, obispo de Chiapas (M¨¦xico).
Juan Jos¨¦ Tamayo es profesor de la Universidad Carlos III de Madrid. Su ¨²ltimo libro es Invitaci¨®n a la utop¨ªa (Trotta, Madrid, 2012)
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