El c¨¦sped brota en la plaza Mayor en su cuarto centenario
La intervenci¨®n del artista SpY permanecer¨¢ hasta el domingo en el emblem¨¢tico espacio madrile?o
Lleg¨® el oto?o y en la plaza Mayor de Madrid brot¨® el c¨¦sped. Esta ma?ana la plaza presentaba un aspecto campestre, con el empedrado sustituido por el verde, algo surreal, algo marciano, algo futbol¨ªstico. Madrile?os y visitantes se mov¨ªan confusos y extra?ados sobre la hierba. Algunos hac¨ªan uso del c¨¦sped: se sentaban, se tumbaban, aunque la mayor¨ªa (es el signo de los tiempos) prefer¨ªan hacerse selfis. El hombre invisible, un Minion y otros personajes de la plaza aprovechaban para sacar m¨¢s rendimiento a la jornada. El caballo met¨¢lico de Felipe III parec¨ªa querer bajar a trotar. Una ni?a daba volteretas. ¡°?Pondr¨¢n c¨¦sped en todas plazas?¡±, se preguntaba un peat¨®n.
La respuesta es no, aunque quiz¨¢s habr¨ªa que plante¨¢rselo, dada la dureza de muchas de las plazas madrile?as. El c¨¦sped de la plaza Mayor, cuya presencia parece transformar todo el concepto del espacio, es una intervenci¨®n del artista urbano SpY que se enmarca dentro de los eventos con los que el Ayuntamiento celebra el cuarto centenario de este coraz¨®n de Madrid. En realidad el c¨¦sped, que es natural y huele a campo, no cubre toda la plaza (deja espacio para las tradicionales terrazas), pero s¨ª ocupa una buena parte: un gran y perfecto c¨ªrculo en la parte central de 70 metros de radio, que asilvestra una superficie de 3.500 metros cuadrados. Se puede disfrutar hasta el 1 de octubre.
¡°La idea la sugiri¨® la propia historia de la plaza; empez¨® siendo de tierra, luego fue un jard¨ªn con ¨¢rboles y fuentes¡ Quer¨ªa recuperar el esp¨ªritu de ese espacio verde. El simbolismo del c¨ªrculo invita al encuentro, un punto central en el coraz¨®n de la capital donde espero que la gente pueda descubrir nuevos modos de disfrutarla¡±, explica el artista. El madrile?o tiene una dilatada experiencia en esto de las intervenciones urbanas, siempre d¨¢ndoles otra vuelta de tuerca a los espacios, con una mezcla de ingenio y mensaje que se ha dejado ver en Madrid, Barcelona, Bilbao, Par¨ªs, San Petersburgo, Colonia, Santiago de Chile o Nueva York.
Ha intervenido enormes fachadas, colgado una media luna nocturna de una gr¨²a, plastificado coches de polic¨ªa, modificado las l¨ªneas de campos de f¨²tbol o canchas de baloncesto o llenado una medianera de decenas de inquietantes c¨¢maras de seguridad, como hizo en 2013 en el barrio de Tetu¨¢n. ¡°Me gusta generar alg¨²n tipo de reacci¨®n con mi trabajo¡±, concluye el artista, ¡°procuro despertar y crear una conciencia m¨¢s l¨²cida con mis intervenciones¡±.
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