Un lugar donde alargar la sobremesa

Entre la ingente oferta de comida fusi¨®n y de tendencias culinarias siempre asoman propuestas que abordan la tradici¨®n, el esp¨ªritu y la est¨¦tica de las casas de comidas tradicionales. Es el caso de Casa Alicia (Recoletos, 7), que toma el relevo en el local donde El Borboll¨®n sirvi¨® cocina cl¨¢sica durante 35 a?os. En la carta apuestan por guisos, arroces, escabeches caseros o pescados, mientras la sala, acogedora y decorada como un sal¨®n palaciego invita a quedarse de sobremesa. El s¨®tano, reconvertido en cocteler¨ªa, y una barra donde picar unos torreznos o una estupenda tortilla de patata, completan la puesta en escena de un, a priori, atractivo espacio.

El jarrete de ternera con pur¨¦ y manzana, que sirven a modo de aperitivo, es una declaraci¨®n de principios del local que no se aleja en ning¨²n momento de la tradici¨®n sin dar pie a las sorpresas. En la carta no faltan las recurrentes alcachofas, en este caso fritas con jam¨®n y unas vieiras en ensalada con trigueros y tomate seco. Productos nobles bien servidos, pero que sobreabundan en diferentes versiones en demasiadas cartas. Est¨¢ bien tratado el pulpo asado "de roca" con parmentier, la merluza a la plancha con salsa de mejillones o las croquetas de jam¨®n, l¨¢cticas y con una textura muy suave. Destacan las cocochas rebozas y, entre los guisos, las lentejas con oreja. Una carta extensa donde se pueden encontrar carnes al carb¨®n, mariscos, ahumados o salazones. Cabe destacar que los pescados pueden prepararse al gusto del comensal.

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La mejor croqueta del mundo

Detr¨¢s de los fogones no se anuncia ning¨²n cocinero estrella. La apuesta es del Roura 21, un grupo de inversores con experiencia en la hosteler¨ªa. La cocina est¨¢ abierta de manera ininterrumpida y arropada por un servicio correcto en pleno rodaje. Convendr¨ªa cambiar el hilo musical: no parece el mejor momento para disfrutar de los ¨¦xitos de Cindy Laupper o Miguel Bos¨¦ a trav¨¦s de una suerte de emisora de bar de carretera. Entre los postres, brilla el tiramis¨², las fresas templadas con pimienta o los cr¨ºpes Suzette, que preparan en el momento delante del comensal.

La carta de vinos ofrece bastantes alternativas para pedir por copas y apuesta por opciones cl¨¢sicas con algunas referencias que despuntan como Louro o Do Ferreiro y una selecci¨®n de cavas tambi¨¦n cl¨¢sicos, pero de bastante nivel. En este apartado, en general, se echan en falta selecciones algo mas arriesgadas. En suma, un restaurante ubicado en un calle donde hay casi m¨¢s restaurantes que adoquines y que surge ante el apabullante ritmo de aperturas en la capital, deber¨ªa cuidar los detalles con mimo. Un local que apuesta por comida tradicional con buen producto es siempre una opci¨®n interesante si se encuentra el equilibrio y los precios son asequibles. El tique medio ronda los 50 euros por persona.