La caravana Abriendo Fronteras insta a derribar ¡°muros migratorios¡± en Andaluc¨ªa
El colectivo denuncia las deficiencias de la pol¨ªtica migratoria andaluza y la explotaci¨®n a migrantes
Las aguas andaluzas se han convertido en la fosa com¨²n de migrantes africanos que huyen de zonas de conflicto, pobreza extrema, emergencia clim¨¢tica, persecuci¨®n o vulneraci¨®n de sus derechos humanos. Durante el primer semestre del presente a?o, seg¨²n el ¨²ltimo informe de Salvamento Mar¨ªtimo, 81 personas han perdido la vida en aguas andaluzas.
Andaluc¨ªa recibi¨® 51.711 personas migrantes el a?o pasado. Sin embargo, la realidad que estas encuentran es muy diferente de la que esperaban una vez que zarparon. ¡°Cuando llegan, solo ven centros de atenci¨®n temporal o de internamiento de extranjeros que no prestan servicios m¨ªnimos, pol¨ªticas antimigratorias, sufren la explotaci¨®n¡±, explica Jim Corralejo, uno de los de los organizadores de Caravana Abriendo Fronteras, una iniciativa formada por distintas organizaciones y colectivos espa?oles que reclama la buena acogida y los derechos de libertad de movimiento para todas las personas, y que este viernes ha estado en Sevilla.
Bajo pancartas en las que se le¨ªa ¡°Nadie es ilegal¡± o ¡°Derribando muros, tendiendo puentes¡±, m¨¢s de 300 participantes han denunciado las ¡°graves deficiencias¡± del sistema de acogida en Andaluc¨ªa y el uso como ¡°chivo expiatorio¡± que el actual Gobierno andaluz hace de las personas migrantes para aumentar su influencia en la opini¨®n p¨²blica.
¡°La gesti¨®n que se hace desde los organismos p¨²blicos auton¨®micos, nacionales y europeos es pobre. A veces incluso nula¡±, ha criticado Corralejo. ¡°Siguen muri¨¦ndose personas que solo buscan ayuda. Personas como nosotros, independientemente de su color de piel, de su cultura o de su religi¨®n¡±, ha lamentado. Fue el caso de Souad, una madre tunecina que, perdi¨® a su hijo de 23 a?os cuando este intentaba cumplir su sue?o de tener una vida mejor en tierras europeas. ¡°Qued¨® con una organizaci¨®n de trata de personas, y pag¨® su importe. El chico lleg¨® a Italia e hizo una llamada telef¨®nica a su madre¡±, relata Nadia Azouzagh, una de las coordinadoras de la Caravana. Desde entonces, se le perdi¨® la pista. ¡°Su madre estuvo incluso all¨ª busc¨¢ndolo, pero nada¡±, indica.
Los miembros de la caravana han denunciado las graves condiciones de explotaci¨®n a las que se ven sometidas las personas migrantes en territorio andaluz, principalmente mujeres en la provincia de Huelva. Khadija Ainani, asistente en el evento y vicepresidenta de la asociaci¨®n marroqu¨ª de Derechos Humanos, la ¨²nica organizaci¨®n de esta ¨ªndole en este pa¨ªs africano, ha se?alado que cada a?o llegan 20.000 mujeres procedente del pa¨ªs vecino para trabajar en Andaluc¨ªa.
Pese a que todas ellas son informadas de sus derechos laborales antes de viajar a tierras andaluzas, una vez que llegan aqu¨ª muchas de ellas est¨¢n expuestas al abuso y a la violencia sexual por parte de algunos empresarios. Una alarma de la que, pese a que se hizo p¨²blica el pasado a?o, ya eran conscientes. ¡°Ya ten¨ªamos indicios de ellos. Es algo deplorable y humillante para estas mujeres¡±, afirma Ainani, quien reconoce que estas mujeres una vez que regresan a Marruecos jam¨¢s cuentan a sus familiares y a su entorno las pr¨¢cticas recibidas. ¡°Se sienten vejadas. Temen que la sociedad marroqu¨ª las relacione con el mundo de la prostituci¨®n¡±.
La caravana, que ha contado esta jornada con la colaboraci¨®n de organizaciones como la Plataforma de Solidaridad con Palestina, inici¨® su trayecto el pasado 12 de julio desde Granada y ha viajado durante nueve d¨ªas a la Frontera Sur de Europa pasando por Motril, Tarifa, Ceuta, Algeciras, Jerez, Sevilla, Lepe y la comarca de la huerta onubense.
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