El universo Gr?nholm

Cuatro aspirantes a conseguir un cargo ejecutivo en una multinacional se someten a la prueba final del proceso de selecci¨®n en un combate psicol¨®gico donde prima la astucia, la crueldad y la falta de escr¨²pulos: una reflexi¨®n sobre la condici¨®n humana y sus l¨ªmites. El m¨¦todo Gr?nholm regresa a Madrid (en el Teatro Cofidis Alc¨¢zar hasta junio de 2020) con una nueva producci¨®n y reparto, pero bajo la misma direcci¨®n. La obra del dramaturgo Jordi Galcer¨¢n ¨Cestrenada por primera vez en 2003¨C se ha convertido en ¡°un universo propio¡± ¨Ccomo define el propio autor¨C a lo largo de estos a?os en los que ha sido representada en casi 70 pa¨ªses, adaptada al cine e incluso referenciada en p¨¢ginas web de empleo y recursos humanos.

¡°Un texto contempor¨¢neo que se ha convertido en un cl¨¢sico, y como cl¨¢sico, da igual cu¨¢ndo se represente¡±, alaba el actor Luis Merlo que forma parte del nuevo reparto junto a Jorge Bosch, Marta Belenguer y Vicente Romero. ¡°Ese universo propio es precisamente lo que la convierte en atemporal. Por otro lado, los seres humanos somos atemporales debido a la conexi¨®n que se produce entre nosotros aqu¨ª¡±, dice Merlo toc¨¢ndose el lado izquierdo del pecho.

Fue precisamente el hermano del actor, el productor Pedro Larra?aga, el que propuso levantar de nuevo esta funci¨®n. Galcer¨¢n estaba de acuerdo y solo faltaba que Tamzin Townsend ¨Cdirectora del primer montaje que se mantuvo en distintas ciudades espa?olas hasta 2007¨C se sumase al nuevo proyecto. ¡°Yo me qued¨¦ prendado de la puesta en escena que cre¨® Tamzin¡±, dice Merlo que fue espectador de El m¨¦todo Gr?nholm cuatro veces. ¡°Una obra maestra teatral en la que no se ve al director por ning¨²n lado¡±, a?ade sentado junto a la directora y al dramaturgo de la obra en el teatro que los acoger¨¢ durante esta temporada. Townsend le responde agradecida: ¡°Eso es lo mejor que le pueden decir a un director¡±.

La directora teatral de origen brit¨¢nico ¨Cque tambi¨¦n ejerce como coach para empresas¨C asegura que ¡°lo que sucede sobre el escenario es lo que sucede en la vida real; es una parte de la condici¨®n humana, esa que muestra celos, rabia, desprecio, enfrentamientos¡­¡±. Un texto que refuerza humanamente a estos personajes a trav¨¦s del humor. ¡°Aunque sean situaciones que vayan evolucionando dram¨¢ticamente, a la vez, van adquiriendo un tono de surrealismo que no puede aterrizar en otra cosa que no sea la risa¡±, dice Galcer¨¢n y a?ade que ha tenido que realizar peque?as adaptaciones. ¡°Hay cosas que ya no son pol¨ªticamente correctas, cosas que antes d¨¢bamos por aceptadas y ahora no ser¨ªamos capaces de tolerar¡±.

Los tres profesionales coinciden en que la idea de este texto sigue estando vigente, aunque la sociedad haya cambiado. ¡°Ahora nos comunicamos de manera m¨¢s r¨¢pida, pero esta obra habla de ese deseo de gustar al otro, que siempre ha estado y sigue estando ah¨ª: gustar a una pareja, a un amigo, a un familiar, a una empresa¡­ Puede que ahora incluso se haya acentuado por esas vidas virtuales que hemos creado en las redes sociales¡±, dice el dramaturgo.

Aunque haya peque?as alteraciones en el texto, la puesta en escena sigue siendo la misma: cuatro personajes en una sala y siendo observados por una empresa. ¡°Parecen personajes aparentemente f¨¢ciles, pero precisamente por eso, no lo son. 'La dif¨ªcil facilidad' que se dec¨ªa en mi familia¡±, dice Merlo, tercera generaci¨®n de un clan dedicado en cuerpo y alma al teatro. ¡°El actor tiene que luchar por hacer creer al p¨²blico la premisa del personaje, en este caso, la de una persona que har¨ªa cualquier cosa por conseguir este trabajo. Estos actores hacen f¨¢cil lo dif¨ªcil¡±, dice Galcer¨¢n. ¡°La clave est¨¢ en no complicarte, en hacerlo natural, que el p¨²blico llegue a pensar 'eso lo har¨ªa yo perfectamente'¡±, a?ade Merlo que ya trabaj¨® anteriormente con el dramaturgo en otra de sus obras, El Cr¨¦dito, y con Townsend en Gorda.

M¨¢s de ocho millones de espectadores en medio mundo han visto ya El m¨¦todo Gr?nholm desde su estreno hace m¨¢s de 15 a?os; aunque autor, directora y actor recomiendan verla de nuevo. ¡°Hay cosas que no se pueden revelar para no destriparle la historia al p¨²blico que todav¨ªa no la haya visto, pero para los que s¨ª y saben lo que ocurre, les animamos a volver a verla porque reparar¨¢n en cosas en las que no repararon la primera vez¡±, concluye Galcer¨¢n.