El informe PNUD dice que el 57 % de los chilenos quiere cambios profundos pero graduales

El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Chile ha dado a conocer este mi¨¦rcoles los resultados de su informe sobre desarrollo humano, cuya primera versi¨®n se realiz¨® en 1996 y, de su ¨²ltima entrega, ha transcurrido casi una d¨¦cada. Es un periodo en que Chile ha vivido al menos tres procesos que lo han marcado: el estallido social de octubre de 2019 y dos intentos, fallidos, de cambiar su Constituci¨®n, en 2022 y 2023. El reporte, titulado ?Por qu¨¦ nos cuesta tanto cambiar?, precisamente aborda una serie de etapas y aspiraciones de los chilenos.

De acuerdo con la publicaci¨®n, los chilenos tienen la sensaci¨®n de que no han conseguido los cambios esperados o, al menos, no han sido suficientes en relaci¨®n con derechos sociales y aspectos claves para el avance del pa¨ªs. Destaca que el 59% de los consultados detecta un empeoramiento de la situaci¨®n del pa¨ªs en los ¨²ltimos a?os, lo que atribuyen a las pocas capacidades de la sociedad para empujar estas transformaciones.

En Chile se ha instalado un debate intenso sobre el alcance de los cambios desde la revuelta social ocurrida hace cinco a?os, lo que ha seguido latente tras los dos intentos de sacar adelante una nueva Constituci¨®n y las propuestas de reformas del Gobierno de Gabriel Boric. ¡°Mientras unos se?alan que Chile cambi¨® radicalmente a partir de las movilizaciones de 2019, dejando atr¨¢s una fase de conformismo de treinta a?os, otros sostienen que la pandemia modific¨® profundamente nuestra convivencia social, y hay tambi¨¦n quienes dicen que en realidad nada ha cambiado porque aquel impulso de 2019 se frustr¨®, o que las reformas de la ¨²ltima d¨¦cada han hecho retroceder al pa¨ªs. En cualquier caso, en la ¨²ltima d¨¦cada Chile habla de s¨ª mismo en clave de cambios, y el deseo de cambios profundos persiste entre las grandes mayor¨ªas¡±, apunta el informe.

La representante residente del PNUD en Chile, Georgiana Braga-Orillard, ha subrayado que los chilenos quieren cambios profundos, pero graduales. ¡°Tienen una visi¨®n pragm¨¢tica y diversa, con aspiraciones que son una mezcla de seguridad, derechos sociales y crecimiento econ¨®mico, sin encajar en agendas unidimensionales de cambio. Por ello, para estar a la altura de esas expectativas, es urgente construir las condiciones para que la sociedad chilena pueda conducir cambios exitosos¡±, ha explicado.

La cifra de quienes quieren estos cambios graduales ha aumentado de un 37%, en 2013, a un 57% el a?o pasado. De acuerdo con la publicaci¨®n, la mayor¨ªa est¨¢ dispuesta a apoyar un liderazgo cuyas promesas tarden en hacerse realidad, si es capaz de avanzar en la direcci¨®n correcta. Eduardo Candia, investigador del PNUD Chile, asegura que tras el fracaso de los procesos constituyentes la ciudadan¨ªa no tiene una preferencia unidimensional respecto del rol del Estado y c¨®mo solucionar los problemas de la vida en com¨²n. ¡°Las personas quieren m¨¢s seguridad pero, a la vez, avanzar en igualdad de g¨¦nero; quieren m¨¢s crecimiento econ¨®mico, pero con justicia social. Las propuestas tend¨ªan a ser m¨¢s unidimensionales¡±, ha precisado en una entrevista con Cooperativa.

Para un 67% de los encuestados, los liderazgos pol¨ªticos son responsables de obstaculizar acuerdos para resolver los problemas del pa¨ªs. Los que tienen esta opini¨®n apuntan a que los actores pol¨ªticos priorizan sus intereses personales, cuentan con poca experiencia o no conocen los problemas de la poblaci¨®n, privilegian su ideolog¨ªa o no tienen voluntad para alcanzar pactos.

Sin embargo, uno de los principales hallazgos es que, al menos dos tercios de las personas, reconocen que la resoluci¨®n de problemas t¨ªpicos de la vida social es una labor de gran dificultad. La conclusi¨®n de los investigadores es que ¡°esta posici¨®n puede reflejar un estado de resignaci¨®n ante las deudas del cambio, pero un aprendizaje derivado de experiencias de cambio frustrantes de los ¨²ltimos a?os¡±, lo que sugiere una ¡°ciudadan¨ªa m¨¢s paciente y realista que antes¡±.

Adem¨¢s de analizar algunos de los obst¨¢culos para llevar a cabo las demandas sociales, el PNUD tambi¨¦n identifica oportunidades para superar las dificultades. Resalta que el Estado chileno ha demostrado capacidades relevantes para la conducci¨®n de los cambios, ya que en el pasado ha sido capaz de implementar pol¨ªticas p¨²blicas de forma proba, eficiente y eficaz. Y estose refleja en su informe, el cual asegura que la mayor¨ªa de la poblaci¨®n considera que el Estado es clave en la vida social y debe tener un papel fundamental en ¨¢mbitos como la salud, la educaci¨®n, el sistema de pensiones, entre otros aspectos.

Entre las condiciones que detectadas por el PNUD para construir en Chile resalta reconocer que el crecimiento econ¨®mico desempe?a un papel fundamental en la concreci¨®n de cambios sociales, pues con la expansi¨®n de los recursos disponibles a trav¨¦s de una mayor actividad econ¨®mica, el Gobierno puede implementar programas que directamente mejoren el bienestar de la ciudadan¨ªa y reduzcan las desigualdades socioecon¨®micas.

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