C¨®mo encontrar vida en Venus

El descubrimiento de un posible marcador de vida en la atm¨®sfera de Venus anunciado esta semana ha resucitado el inter¨¦s por volver a este planeta. Este mundo es el m¨¢s cercano a la Tierra, el m¨¢s parecido en tama?o y en origen. Durante m¨¢s de 2.000 millones de a?os puede que existiesen oc¨¦anos y un ambiente apto para que surgiese la vida. Algo muy parecido sucedi¨® en nuestro otro vecino, Marte. En ambos mundos algo se torci¨®, el equilibrio qued¨® roto y perdieron la mayor¨ªa de su agua. Es posible que antes de esos desastres surgiese la vida y tal vez pudo sobrevivir refugiada bajo tierra en el caso de Marte o suspendida en las nubes altas de la atm¨®sfera en Venus. Esta ¨²ltima es una teor¨ªa que se propuso a finales de los a?os sesenta y que apenas se explor¨® despu¨¦s. Tras unas primeras d¨¦cadas de gran inter¨¦s en Venus, los humanos viramos completamente nuestro inter¨¦s explorador en el espacio hacia Marte. Una de las principales razones fue que es mucho m¨¢s f¨¢cil llegar all¨ª que a Venus.

La superficie de Venus est¨¢ a casi 500 grados, suficiente para fundir el plomo. Las monta?as y planicies del planeta son imposibles de visitar para los humanos no solo por ser abrasadoras, tambi¨¦n porque las dens¨ªsimas nubes de su atm¨®sfera ¡ª90 veces m¨¢s espesa que la de la Tierra¡ª hacen que la presi¨®n sea equivalente a estar a un kil¨®metro bajo el mar. Incluso las naves m¨¢s exitosas que han visitado este mundo solo pudieron sobrevivir en su superficie unas horas antes de fundirse. Por eso Venus sigue siendo un planeta desconocido.

La primera misi¨®n que podr¨ªa regresar a Venus est¨¢ impulsada por la NASA. Todav¨ªa est¨¢ en estudio y que no despegar¨ªa antes de 2026

Esta semana se anunci¨® el hallazgo en las nubes altas de Venus del gas fosfina, que en la Tierra est¨¢ casi siempre vinculado a la vida. Se trata de una observaci¨®n muy preliminar que se va a intentar confirmar usando diferentes tipos de telescopios terrestres. Pero estos instrumentos probablemente no puedan responder la pregunta m¨¢s importante: ?qu¨¦ ha generado ese gas, un proceso geoqu¨ªmico desconocido o un microbio flotando en las gotas de ¨¢cido sulf¨²rico que llueven sobre el planeta? Responder esta pregunta requiere ir all¨ª, y eso es exactamente lo que planean ya las principales agencias espaciales del mundo.

La primera misi¨®n que podr¨ªa regresar a Venus est¨¢ impulsada por la NASA. Se trata de una expedici¨®n que todav¨ªa est¨¢ en estudio y que no despegar¨ªa antes de 2026. El coraz¨®n de esta misi¨®n, llamada Davinci+, es una esfera met¨¢lica de un metro de di¨¢metro con pinta de batiscafo cuyo objetivo es atravesar toda la atm¨®sfera del planeta hasta alcanzar su superficie en un viaje que durar¨¢ una hora. Esta sonda ir¨ªa equipada con instrumentos similares a los que lleva el rover de exploraci¨®n marciana Curiosity y que aportar¨ªan la descripci¨®n m¨¢s detallada de la composici¨®n de la atm¨®sfera. ?Podr¨ªa confirmar o descartar la existencia de vida m¨¢s all¨¢ de toda duda? ¡°Eso depende de muchos factores, como la qu¨ªmica desconocida del planeta y sobre todo si esta permite la existencia de mol¨¦culas biol¨®gicas¡± necesarias para que haya vida, explica James Garvin, jefe cient¨ªfico del Centro Goddard de la NASA y l¨ªder de la misi¨®n.

¡°No hay que hacer una misi¨®n para buscar vida en Venus, sino para entender c¨®mo funciona la qu¨ªmica en este planeta¡±

Jorge Pla-Garc¨ªa, astrof¨ªsico del Centro de Astrobiolog¨ªa de Madrid

Davinci+ tambi¨¦n lleva un m¨®dulo orbital que estudiar¨¢ el planeta desde su exterior y contribuir¨¢ a entender la geograf¨ªa ¨²nica de Venus, en especial las regiones plagadas de barrancos y crestas de hasta 4.000 metros de altitud que no tienen una comparaci¨®n clara en la superficie terrestre. La misi¨®n compite con otras tres para ser finalmente financiada por la NASA, algo que se decidir¨¢ el pr¨®ximo a?o.

Uno de los principales objetivos es analizar los gases nobles, que son ¡°como f¨®siles que pueden decir c¨®mo era el planeta hace millones de a?os y saber si ten¨ªa oc¨¦anos y era habitable¡±, explica Jorge Pla-Garc¨ªa, astrof¨ªsico del Centro de Astrobiolog¨ªa de Madrid. ¡°No hay que hacer una misi¨®n para buscar vida en Venus, sino para entender c¨®mo funciona la qu¨ªmica en este planeta¡±, advierte. ¡°En los a?os setenta se cometi¨® el error de dotar a las sondas Viking con instrumentos para buscar vida en lugar de entender primero la qu¨ªmica del suelo. El resultado fueron falsos positivos de la existencia de vida en el planeta. Lo que sucede ahora en Venus con la fosfina es exactamente igual; no estamos seguros de si la detecci¨®n es correcta y si lo fuese no tiene por qu¨¦ deberse a un proceso biol¨®gico¡±, opina.

La qu¨ªmica de la fosfina y sus posibles or¨ªgenes no est¨¢ clara ni siquiera en la Tierra. Los responsables del hallazgo anunciado esta semana mantienen que la producen microbios que viven en entornos sin ox¨ªgeno, como los intestinos de muchos animales, incluidos los humanos, el fondo de lagos, campos de arroz y aguas fecales. Pero estos entornos no se han explorado en detalle as¨ª que no se sabe si la fosfina es un resultado indirecto de la descomposici¨®n de materia org¨¢nica o si los microbios que en teor¨ªa la producen lo hacen para algo. Los autores del estudio en Venus defienden que puede ser un mecanismo de defensa, pues es un gas t¨®xico que incluso se ha usado como arma qu¨ªmica. Pero si no est¨¢ claro que solo se pueda formar fosfina en presencia de vida, la fosfina no ser¨ªa un biomarcador inconfundible.

¡°La sonda estudiar¨¢ el campo gravitacional y la composici¨®n de la atm¨®sfera. No buscar¨¢ vida de forma directa, pero s¨ª estudiar¨¢ si el clima era menos hostil en el pasado como para poder ser habitable¡±

Dimitri Titov, responsable cient¨ªfico del proyecto EnVision

Renbin Zhu, cient¨ªfico planetario de la Universidad de Ciencia y Tecnolog¨ªa de China, ha analizado la fosfina en la atm¨®sfera terrestre y la ha hallado en grandes cantidades en las rocas cubiertas de excrementos de ping¨¹inos y aves de la Ant¨¢rtida. El investigador explica su opini¨®n sobre el descubrimiento de esta semana: ¡°Varios estudios indican que se puede producir fosfina por procesos bioqu¨ªmicos como la reducci¨®n bacteriana de fosfatos¡±, se?ala. ¡°Tambi¨¦n hay evidencias de que se puede producir por procesos no biol¨®gicos a partir de minerales con fosfatos como apatita, estruvita y brushita. Si hay microbios en Venus, la fosfina se producir¨ªa por la reducci¨®n de fosfatos. Pero es m¨¢s probable que esta venga de un proceso abi¨®tico; la fosfina vendr¨ªa de la reducci¨®n de los fosfatos en rocas con apatita y brushita. Hay que estudiar ambas posibilidades en detalle¡±, resalta.

Si la misi¨®n de la NASA se hace realidad, el siguiente paso en la exploraci¨®n de Venus puede llegar con EnVision, una misi¨®n rob¨®tica de la Agencia Espacial Europea en colaboraci¨®n con la agencia estadounidense que est¨¢ en estudio y que podr¨ªa lanzarse en 2032 si finalmente es aprobada. Esta misi¨®n ¡°har¨¢ un mapa detallado de la superficie de Venus y tambi¨¦n de su subsuelo¡±, explica Dimitri Titov, responsable cient¨ªfico del proyecto. ¡°La sonda estudiar¨¢ el campo gravitacional y la composici¨®n de la atm¨®sfera para entender la geolog¨ªa del planeta y su evoluci¨®n¡±, se?ala. ¡°No buscar¨¢ vida de forma directa, pero s¨ª estudiar¨¢ si el clima era menos hostil en el pasado como para poder ser habitable¡±, a?ade.

Durante dos d¨¦cadas, el pa¨ªs que m¨¢s hizo por la exploraci¨®n de Venus fue la Uni¨®n Sovi¨¦tica, a la que se le debe buena parte del conocimiento inicial de este planeta. Explorando Venus la URSS fue el primer pa¨ªs que entr¨® en una atm¨®sfera extraterrestre ¡ªen 1967 con Venera 4¡ª; que aterriz¨® en otro planeta ¡ª1970 con Venera 7¡ª y que envi¨® las primeras im¨¢genes de la superficie de otro planeta ¡ªen 1975 con Venera 9¡ª. El programa finaliz¨® en 1984. Ahora Rusia quiere revisitar los hitos de la era comunista en Venus con Venera D, una misi¨®n que podr¨ªa lanzarse en 2026 y que intentar¨¢ llegar hasta la superficie con una sonda y mantener una nave orbital.

Rusia quiere revisitar los hitos de la era comunista en Venus con ¡®Venera D¡¯, una misi¨®n que podr¨ªa lanzarse en 2026 y que intentar¨¢ llegar hasta la superficie con una sonda

Posiblemente, la ¨²nica forma de demostrar que hay vida en Venus es tray¨¦ndola a la Tierra. Para eso har¨ªa falta una misi¨®n rob¨®tica que tome muestras y las env¨ªe a nuestro planeta, lo que requiere una tecnolog¨ªa muy avanzada que por ahora solo se est¨¢ proyectando para Marte. ¡°Nuestro conocimiento de Venus y su geolog¨ªa es el que ten¨ªamos de Marte en los a?os setenta¡±, dice Titov. ¡°A¨²n no hemos explotado todas las posibilidades que nos dan las naves orbitales, las sondas de descenso, los globos y los m¨®dulos de aterrizaje¡±, a?ade.

Dentro de unas d¨¦cadas, cuando ya se hayan agotado todas esas posibilidades, llegar¨¢ el verdadero reto. Si la posibilidad de que haya vida en Venus sigue abierta, habr¨¢ que pensar en c¨®mo detectarla. Para ello, dice Jorge Pla-Garc¨ªa, ya no bastar¨¢ captar fosfina, que es un biomarcador equ¨ªvoco, pues se puede formar sin necesidad de que haya vida, sino que habr¨¢ que ver l¨ªpidos, p¨¦ptidos, ADN o ARN, compuestos realmente exclusivos de la vida tal y como la conocemos. En cualquier caso, advierte, nunca deber¨ªamos traer a la Tierra supuestas formas de vida de Venus. ¡°Es una cuesti¨®n de protecci¨®n planetaria, pues podr¨ªa haber una contaminaci¨®n cruzada con la vida terrestre, podr¨ªa ser peligroso. Lo ideal ser¨ªa estudiarlo en la Estaci¨®n Espacial Internacional o en la futura estaci¨®n orbital que se crear¨¢ en la Luna¡±, explica. Si alg¨²n d¨ªa encontramos venusianos, tendremos que mantenernos alejados.