Emilio Chuvieco, ge¨®grafo: ¡°Lo que antes era un conato ahora son 4.000 hect¨¢reas quemadas¡±
El ambient¨®logo dirige un proyecto europeo para prevenir y reducir el riesgo y el impacto de los incendios usando sat¨¦lites y un sistema de l¨¢seres
Emilio Chuvieco (Madrid, 62 a?os) lleva la mitad de su vida estudiando el fuego, desde que inici¨® su carrera investigadora en la Universidad de Berkeley (Estados Unidos) en 1987. En todo este tiempo ha sido testigo de la emergencia de un nuevo tipo de incendios, los de sexta generaci¨®n, vinculados al cambio clim¨¢tico, pero tambi¨¦n al demogr¨¢fico. Director de la c¨¢tedra de ¨¦tica ambiental de la Universidad de Alcal¨¢ de Henares, coordina tambi¨¦n el Grupo de Investigaci¨®n en Teledetecci¨®n Ambiental del centro alcala¨ªno. Su equipo usa los sat¨¦lites y el sistema LIDAR (l¨¢ser aerotransportado) para prevenir los incendios, analizar sus da?os y su posible recuperaci¨®n. Galardonado en 2022 con el Premio Jaume I a la Protecci¨®n del Medio Ambiente, es el responsable cient¨ªfico de FirEUrisk, un proyecto impulsado por la Comisi¨®n Europea 2022 para determinar y minimizar el riesgo de incendios extremos en Europa. En esta entrevista deja claro que no basta con tener aviones, que el fuego hay que apagarlo mucho antes de que se inicie.
Pregunta. Tradicionalmente, estos meses eran para limpiar los bosques de cara al verano. Pero no ha dado ni tiempo a montar los equipos. Incendios en Castell¨®n y Teruel, en Asturias y Cantabria, en Galicia¡ ?Qu¨¦ est¨¢ pasando?
Respuesta. En Espa?a siempre ha habido fuegos a finales del invierno, inicios de la primavera, en el norte. En el Mediterr¨¢neo es muy poco frecuente y este a?o es un caso bastante an¨®malo. No sabemos si va a mantenerse la tendencia. Hace unos a?os, en un congreso de ecolog¨ªa del fuego, en California, el responsable de la gesti¨®n forestal del Estado nos dec¨ªa que ellos ten¨ªan ya estaci¨®n de incendios pr¨¢cticamente todo el a?o. No s¨¦ si va a pasar eso en Espa?a tambi¨¦n, pero quiz¨¢ en las zonas del sur puede ocurrir. Lo cierto es que hemos tenido un invierno muy seco y en cuanto sube un poco el calor y hay condiciones de tormentas secas y de vientos fuertes, pues es muy dif¨ªcil de controlar.
P. Pero el incendio de Castell¨®n dur¨® una semana ?No es demasiado?
R. Cuando los incendios son muy extensos, como parece que ha sido en este caso, los medios a¨¦reos hacen lo que pueden. Y en una zona de mucho relieve, los medios terrestres tambi¨¦n hacen lo que pueden. Cuando el fuego se mete una zona de relieve muy fuerte, por ejemplo en zonas de ca?¨®n, puede aumentar su velocidad. Lo mejor que puedes hacer en estos casos es estar lo m¨¢s lejos posible. En las condiciones de viento que hubo y con la vegetaci¨®n tan seca es muy complicado apagar. Hay quienes piensan que con tener tres aviones puedes apagar cualquier incendio. Pero no es as¨ª.
P. Y mientras en el norte se desatan decenas de incendios en Asturias, Cantabria y Galicia.
R. Siempre ha habido muchos incendios en el norte ligados a la gesti¨®n del pasto. La ganader¨ªa extensiva all¨ª usa el fuego para limpiar el matorral y que accedan las vacas. De hecho, hab¨ªa un programa hace unos a?os en el que el propio Ministerio y las comunidades aut¨®nomas ayudaban a los ganaderos a quemar, o sea, lo que se llama las quemas prescritas. Pero a veces se les va de las manos y se queman otras zonas. Por otro lado, est¨¢ el fen¨®meno de los vientos foehn que, cuando pasan la cordillera Cant¨¢brica, caen a la otra vertiente muy secos y hacen que las condiciones de ignici¨®n aumenten mucho. Se combinan dos cosas, la gesti¨®n humana y la cuesti¨®n clim¨¢tica.
¡°Hay quienes piensan que con tener tres aviones puedes apagar cualquier incendio. Pero no es as¨ª¡±
P. Seg¨²n un documento del proyecto FirEUrisk, el 95% de los incendios son provocados y la mayor parte debido a imprudencias o mala praxis agr¨ªcola. Pero esas pr¨¢cticas tradicionales han estado siempre ah¨ª. ?Qu¨¦ ha cambiado para que lo que no era imprudencia en el pasado, ahora s¨ª lo sea?
R. Siempre se habla del cambio clim¨¢tico y es importante. Pero en Espa?a tambi¨¦n hemos tenido un cambio social muy importante. Mucho territorio que antes se gestionaba ya no se gestiona, el bosque no tiene un uso econ¨®mico como ten¨ªa en el pasado, mucha de la ganader¨ªa extensiva fue abandonada, la poblaci¨®n rural ha envejecido¡ Todo eso hace que el combustible se acumule y cuando hay un accidente, lo que antes era un conato ahora son 4.000 hect¨¢reas quemadas.
P. ?C¨®mo se trabaja sobre el factor humano?
R. Mientras que en Jap¨®n todo el mundo sabe qu¨¦ hacer cuando hay un terremoto, en Espa?a no sabemos c¨®mo proceder si hay un incendio. Las personas, en especial las que viven en n¨²cleos rurales o que pasan tiempo en el campo, deben estar formadas. Si vas a un congreso de incendios, hay much¨ªsimos forestales. Hay mucha gente que trabaja en la mec¨¢nica, la propagaci¨®n del fuego. Pero no ves tantos soci¨®logos o tantos ge¨®grafos humanos que trabajen en estas cuestiones.
P. Los incendios de Australia de 2020, los de Siberia de 2019, los recurrentes de California, el pasado verano austral en Chile... ?El planeta se quema?
R. Venimos utilizando el fuego desde hace 450.000 a?os. O sea, ha convivido con el hombre desde hace mucho tiempo y es un factor natural en muchos ecosistemas. De hecho, la vegetaci¨®n mediterr¨¢nea est¨¢ adaptada al fuego. ?Qu¨¦ es lo que est¨¢ pasando ahora? A escala global estamos viendo una serie de anomal¨ªas. Acabamos de publicar un estudio con colegas franceses y chinos sobre los incendios en las zonas boreales, tanto Siberia como Canad¨¢ y Alaska, de 2021. Los datos son muy an¨®malos porque es el primer a?o en que ha habido anomal¨ªas de sequ¨ªa fuerte en las dos regiones a la vez. En Australia se quemaron en algunas zonas del sureste del pa¨ªs siete veces m¨¢s que la media de los ¨²ltimos 20 a?os. Son incendios de sexta generaci¨®n, que se producen en condiciones de sequ¨ªa y de olas de calor muy an¨®malas. Se denominan as¨ª porque se observan patrones de comportamiento no vistos en otros momentos, particularmente en lo que afecta a la energ¨ªa del fuego (longitud e intensidad del frente de llama) y las velocidades de propagaci¨®n. Los sistemas est¨¢ndar de prevenci¨®n no est¨¢n pensados para esto. Es en lo que hay que cambiar el chip: invertir mucho m¨¢s en prevenci¨®n. Y eso significa gesti¨®n pastoral, fomentar econom¨ªas rurales. Si el campo no tiene personas, si no tiene una cierta actividad econ¨®mica de gesti¨®n del territorio, pues obviamente cuando hay un incendio como el de Castell¨®n, se produce el desastre.
¡°Si el campo no tiene personas, si no tiene una cierta actividad econ¨®mica de gesti¨®n del territorio, se produce el desastre¡±
P. ?Van a dejar de ser anomal¨ªas para convertirse en la norma?
R. Parece que la tendencia va por ah¨ª. Cuando hablamos de cambio clim¨¢tico, estamos hablando de series de tiempo largas, de 30 a?os, no de un a?o que ocurre algo an¨®malo. Y claro, si los 15 a?os m¨¢s c¨¢lidos del registro instrumental, o sea los ¨²ltimos 150 a?os, han ocurrido en este siglo, empieza uno a darse cuenta de que ya no es tanta anomal¨ªa, sino tendencia.
P. Una de las bases del proyecto FirEUrisk es determinar el riesgo. ?Qu¨¦ es lo que no se hac¨ªa y se quiere hacer?
R. Los sistemas de riesgo de incendio se basan casi exclusivamente en la parte meteorol¨®gica, que es muy importante. Pero tienes que considerar tambi¨¦n el nivel de exposici¨®n al riesgo y el nivel de vulnerabilidad que tienen las zonas potencialmente quemables. Y eso es lo que estamos haciendo en este proyecto, no solamente tener en cuenta los aspectos meteorol¨®gicos, sino adem¨¢s las caracter¨ªsticas del combustible. Por ejemplo, la humedad del combustible muerto se suele valorar con variables meteorol¨®gicas. Es lo que primero arde, pero la situaci¨®n del combustible vivo casi nunca se considera. Y eso lo estamos haciendo con im¨¢genes de sat¨¦lite. Tambi¨¦n es relevante la abundancia del combustible. Esto lo estamos viendo tambi¨¦n con datos de sat¨¦lite y con el LIDAR, l¨¢ser aeroportado. Por otro lado, tambi¨¦n est¨¢ la parte de la vulnerabilidad, en lo que no se ha hecho nada.
P. ?Vulnerabilidad?
R. No hay casi ning¨²n sistema que tenga en cuenta que hay espacios que son m¨¢s vulnerables, porque son m¨¢s valiosos, o porque tienen menor adaptaci¨®n al fuego. Por ejemplo, un alcornocal tiene una corteza muy fuerte y aguanta m¨¢s. Y otras especies que con un poco de fuego se mueren directamente. Hay las que rebrotan m¨¢s f¨¢cilmente, las que rebrotan de ra¨ªz, como los robles o el rebollo, que lo tendr¨¢n m¨¢s f¨¢cil. Mientras, a las especies germinadoras, como los pinos, les cuesta mucho m¨¢s. Por otro lado, la zona puede ser m¨¢s vulnerable por tener una poblaci¨®n envejecida, porque cuesta mucho m¨¢s evacuarla o para afrontar el incendio. La gesti¨®n del riesgo no es solamente comprar m¨¢s aviones y m¨¢s medios de extinci¨®n, sino sobre todo intentar reducirlo antes de que ocurra el evento.
¡°La gesti¨®n del riesgo no es solamente comprar m¨¢s aviones, sino sobre todo intentar reducirlo antes de que ocurra el evento¡±
P. ?Qu¨¦ aportan el sistema LIDAR y los sat¨¦lites?
R. Los sat¨¦lites te permiten estimar las condiciones pre incendio, principalmente a trav¨¦s de la humedad del combustible vivo. Las plantas reflejan m¨¢s en determinada banda del espectro cuanto m¨¢s secas est¨¢n. Con el LIDAR y tambi¨¦n los sat¨¦lites, estudiamos las caracter¨ªsticas estructurales de la vegetaci¨®n, la biomasa, su altura, su densidad¡ Uno de los trabajos que estamos haciendo es con un LIDAR que est¨¢ en la Estaci¨®n Espacial Internacional y que toma datos de la mayor parte del planeta.
P. ?Qu¨¦ tipo de incendio puede detectar un sat¨¦lite?
R. Depende de la resoluci¨®n. Los sat¨¦lites de la NASA tienen un sensor que tiene 375 metros de resoluci¨®n. Pero como la energ¨ªa emitida por un punto de calor no es lineal, sino exponencial, supone que no necesitas que est¨¦ el p¨ªxel entero ardiendo para detectarlo. Con el actual Meteosat tienes peor resoluci¨®n, de dos kil¨®metros. As¨ª que los incendios que puede detectar son mucho m¨¢s grandes, pero tenemos im¨¢genes cada 10 minutos, mientras que los de la NASA detectan una vez al d¨ªa. El actual Meteosat se est¨¢ usando mucho para los incendios en zonas con poca informaci¨®n terrestre, como en ?frica. Pero aqu¨ª en Europa no se est¨¢ utilizando todav¨ªa porque se considera poco preciso. Ahora se est¨¢ desplegando el Meteosat de tercera generaci¨®n, que tendr¨¢ m¨¢s resoluci¨®n tanto temporal como espacial y tiene un canal para detectar incendios.
¡°Hacer quemas controladas, algo que ya se va introduciendo en Europa, antes era anatema¡±
P. Otra de las patas de FirEUrisk es la reducci¨®n del riesgo, ?qu¨¦ elementos son claves aqu¨ª?
R. El incendio es consecuencia b¨¢sicamente de tres factores: del clima, de la vegetaci¨®n y de la acci¨®n humana. En el clima no puedes hacer mucho pero s¨ª con el combustible y el factor humano. ?Qu¨¦ puedes hacer con el combustible? Pues reducir su cantidad ?Y c¨®mo se reduce? Pues hay tres medios, principalmente quemarlo, hacer quemas controladas, algo que ya se va introduciendo en Europa. Antes era anatema. El segundo medio es el pastoreo, el m¨¢s adecuado para m¨ª, porque las quemas tienen sus riesgos. Pero el pastoreo requiere personas, requiere ganado. Aqu¨ª tenemos de nuevo el problema demogr¨¢fico. Y el tercer medio es la eliminaci¨®n mec¨¢nica de combustible. Si pudi¨¦ramos instalar peque?as centrales de biomasa en zonas forestales, la biomasa es energ¨ªa renovable y ser¨ªa una manera de solucionar dos problemas. Reducir biomasa generando a la vez energ¨ªa. Tambi¨¦n hab¨ªa toda una econom¨ªa de la madera que hemos abandonado. Queremos reducir el uso del papel. Pero no hemos de olvidar que el papel es carbono tambi¨¦n, que est¨¢ almacenado de manera estable. Cortar ¨¢rboles y plantar otros es bastante razonable. Pero parece que cortar un ¨¢rbol es una especie de sacrilegio a d¨ªa de hoy.
P. ?Y desde el ¨¢mbito pol¨ªtico se puede hacer algo m¨¢s?
R. A veces la legislaci¨®n que se hace con mentalidad urbanita no funciona mucho en estos lugares. Est¨¢ por ejemplo la silvicultura preventiva. Es muy dif¨ªcil hacer gesti¨®n forestal con toda una normativa que te complica much¨ªsimo las cosas. De eso se quejan los propietarios forestales, que no pueden cortar, y eso obviamente hace que el combustible tenga una continuidad que no deber¨ªa tener. Tiene que haber zonas de protecci¨®n, parques naturales, ¨¢rea de protecci¨®n natural, no cabe duda, pero hay otras muchos muchas zonas que hay que gestionarlas. Creo que hay que cortar ¨¢rboles, siempre que los replantes despu¨¦s.
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