Bruselas logra un acuerdo con Alemania para el fin de los veh¨ªculos de combusti¨®n, tras semanas de fricciones
Berl¨ªn accede a desbloquear un pacto clave en la estrategia europea de lucha contra el cambio clim¨¢tico al lograr una excepci¨®n a ciertos combustibles neutros
La Comisi¨®n Europea ha anunciado este s¨¢bado que ha alcanzado un acuerdo con Alemania para desbloquear la aprobaci¨®n de la norma que fija el fin de los veh¨ªculos de combusti¨®n. Y lo ha hecho al incluir de forma clara una excepci¨®n a los autom¨®viles que usan cierto tipo de combustible, los llamados sint¨¦ticos o e-fuels, clim¨¢ticamente neutros. Berl¨ªn hab¨ªa paralizado durante semanas la regulaci¨®n europea, ya pactada y negociada, que persigue que a partir de 2035 no puedan matricularse en la Uni¨®n coches con motores contaminantes. El veto alem¨¢n y las formas de hacerlo hab¨ªan causado grandes fricciones con Bruselas y con otros Estados miembros.
¡°Hemos llegado a un acuerdo con Alemania sobre el futuro uso de combustibles sint¨¦ticos en los coches¡±, ha asegurado en Twitter el vicepresidente de la Comisi¨®n encargado del Pacto Verde, Frans Timmermans. El ministro de Transporte alem¨¢n, Volker Wissing, ha confirmado el pacto: ¡°Los veh¨ªculos equipados con un motor de combusti¨®n pueden registrarse despu¨¦s de 2035 solo si usan combustibles neutros en t¨¦rminos de emisiones de CO?¡±, ha dicho. Bruselas quiere que se adopte el reglamento de est¨¢ndares de CO? lo antes posible, ha dicho Timmermans.
Durante los ¨²ltimos d¨ªas, Berl¨ªn se hab¨ªa mostrado abierta a aceptar la propuesta de la Comisi¨®n Europea de crear una categor¨ªa nueva de veh¨ªculos que utilicen e-fuels una vez entre en vigor, en 2035, la prohibici¨®n europea de vender coches nuevos con motores t¨¦rmicos propulsados con combustibles f¨®siles. Sin embargo, el acuerdo solo ha llegado una vez terminada la cumbre de l¨ªderes de la UE celebrada el jueves y el viernes.
El Ejecutivo de Olaf Scholz desat¨® la tormenta cuando anunci¨® a principios de marzo que votar¨ªa contra los planes para prohibir los coches con motores de combusti¨®n a partir de 2035, a menos que se incluyera una excepci¨®n para los llamados combustibles sint¨¦ticos o e-fuels. Lo hizo de forma sorpresiva y a ¨²ltima hora, despu¨¦s de una negociaci¨®n de dos a?os que hab¨ªa dado como resultado un acuerdo de Comisi¨®n, Parlamento y Consejo, y que solo hac¨ªa falta ratificar.
Detr¨¢s de la exigencia de ¨²ltima hora de Berl¨ªn est¨¢n los liberales, socios de la coalici¨®n tripartita de Scholz, que han querido erigirse ante la opini¨®n p¨²blica como defensores de los intereses de la potente industria automovil¨ªstica alemana. El paso del Gobierno alem¨¢n, que le ha puesto en contra a la Comisi¨®n y a no pocos Estados europeos, no se explica sin conocer los delicados equilibrios de poder en Berl¨ªn. Los liberales, hundidos en las encuestas y tras una mala racha de derrotas elecciones regionales, necesitaban plantar cara a Scholz y, sobre todo, a los Verdes, demostrando perfil propio.
Su ministro de Transportes, Volker Wissing, ha hecho suyos los argumentos de una parte de los fabricantes, que defienden que es necesario dejar la puerta abierta a que coches con motores de combusti¨®n puedan usar en el futuro combustibles que no generen emisiones. El partido, que apenas representa el 5% de la intenci¨®n de voto actual, tiene adem¨¢s de su lado a una mayor¨ªa de alemanes, el 67%, que creen que no se deber¨ªan prohibir los coches nuevos con motor de combusti¨®n a partir de 2035, seg¨²n una encuesta reciente encargada por la televisi¨®n p¨²blica.
Esa puerta, en realidad, ya estaba abierta, aseguran fuentes de la Comisi¨®n. El redactado de la norma era lo suficientemente ambiguo como para permitir el uso de carburantes clim¨¢ticamente neutros en cualquier tipo de motor. Adem¨¢s, fuentes de Bruselas aseguran que el esp¨ªritu de la medida tambi¨¦n se entend¨ªa al reglamento. Pero los liberales, y por extensi¨®n Alemania, han estado presionando para que esa excepci¨®n quede fijada en alg¨²n texto legal de forma literal. Exig¨ªan el compromiso por escrito de que se regular¨¢ en concreto el uso de e-fuels. Algunos fabricantes alemanes, sobre todo de gama alta, llevan a?os trabajando en el desarrollo de los combustibles sint¨¦ticos y, en cambio, llevan retraso en el despliegue del veh¨ªculo el¨¦ctrico, un sector en el que China e incluso Estados Unidos llevan la delantera a la industria alemana.
La maniobra germana ha hecho temer a la Comisi¨®n Europea y a algunos Estados miembros que otros pa¨ªses reclamaran que se reabriese todo el acuerdo (Italia, por ejemplo exige una soluci¨®n separada para los biocombustibles). Ello har¨ªa peligrar el paquete m¨¢s extenso, llamado Fit for 55, que persigue garantizar que la UE reduzca sus emisiones de gases de efecto invernadero en al menos un 55% ¨Dcomparados con los niveles de 1990¨D para 2030, se?alan fuentes de Bruselas.
Los ministros de Energ¨ªa de los Veintisiete revisar¨¢n el acuerdo el martes, pero se prev¨¦ que sea de nuevo solo la propuesta original, ya que se espera que la exenci¨®n que ha logrado Alemania se quede en lo que se conoce como un acto delegado (un texto legal que modifica o complementa un reglamento), y eso puede hacerse m¨¢s adelante, cuando acaben de encajarse algunos detalles t¨¦cnicos, explican las mismas fuentes.
Los e-fuels son combustibles artificiales clim¨¢ticamente neutros (como el e-metano o el e-queroseno), que se producen con electricidad verde, como la renovable o baja en carbono. Por ahora, est¨¢n en las primeras etapas, son muy caros de producir, por lo que escasean, y distintos estudios se?alan que tampoco para 2035 ser¨¢n una opci¨®n barata y abundante, sino todo lo contrario. La organizaci¨®n Transport&Environment ha calculado esta semana que incrementar¨ªan el coste medio de llenar un dep¨®sito hasta los 210 euros. En 2030 este tipo de combustibles costar¨ªan alrededor de 2,8 euros el litro, un 50% m¨¢s que los f¨®siles (gasolina y di¨¦sel) que se usan actualmente.
En la propuesta que hizo la Comisi¨®n esta semana a Berl¨ªn para tratar de vencer su resistencia se explicita que los coches con motores de combusti¨®n deber¨¢n incluir una soluci¨®n tecnol¨®gica, en forma de sensores, que detecte el tipo de combustible que se est¨¢ empleando, de forma que el veh¨ªculo ni siquiera pueda arrancar si se reposta con f¨®siles. La legislaci¨®n europea dicta que a partir de 2035 no se vender¨¢n m¨¢s coches que utilicen gasolina o di¨¦sel, pero los ya matriculados todav¨ªa podr¨¢n seguir circulando unos cuantos a?os y repostando en gasolineras tradicionales. Bruselas quiere asegurarse de que la excepci¨®n no permita la picaresca de seguir llenando el dep¨®sito con combustibles f¨®siles a coches que solo deber¨ªan funcionar con e-fuels clim¨¢ticamente neutros.
Tras conocerse el acuerdo, uno de los ministros socialdem¨®cratas de Scholz, Karl Lauterbach, de Sanidad, ha tuiteado algo que en realidad sab¨ªa todo el mundo: ¡°Los coches con e-fuels emplean seis veces m¨¢s electricidad que los el¨¦ctricos. Son productos de nicho, nunca se pondr¨¢n de moda¡±. Los expertos aseguran que este tipo de combustibles son m¨¢s ¨²tiles en sectores de dif¨ªcil electrificaci¨®n, como el de la aviaci¨®n o el transporte mar¨ªtimo. Dif¨ªcilmente se podr¨¢n generalizar en el caso de los coches. Por eso en Bruselas se ha asistido con sorpresa e indignaci¨®n al papel de Alemania. Muchos aliados lo consideran una deslealtad institucional que abre una puerta muy peligrosa, porque si Berl¨ªn, en teor¨ªa un socio confiable, se atreve a poner en peligro una norma clave en materia medioambiental y econ¨®mica, ?qui¨¦n podr¨¢ frenar a otros socios que constantemente desaf¨ªan la unidad legislativa del bloque?
Voces como la de la vicepresidenta tercera espa?ola y ministra de Transici¨®n Ecol¨®gica han definido el acuerdo alcanzado este s¨¢bado como una ¡°buena noticia¡± que ¡°desatasca¡± lo que se hab¨ªa convertido en un punto de fricci¨®n importante.
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