¡°Los avances en el conocimiento cient¨ªfico muestran la intensificaci¨®n del cambio clim¨¢tico¡±
Val¨¦rie Masson-Delmotte, copresidenta del grupo de expertos del IPCC que ha realizado la mayor revisi¨®n cient¨ªfica del calentamiento del planeta, explica que el fen¨®meno no se ha acelerado, pero s¨ª genera ya eventos m¨¢s intensos y frecuentes
Una de las consecuencias de aplazar un a?o la cumbre mundial del clima de Glasgow (COP26) es que el tiempo a?adido ha permitido llegar a esta nueva conferencia de Naciones Unidas habiendo realizado antes la mayor revisi¨®n cient¨ªfica sobre el calentamiento del planeta: el ¨²ltimo informe del grupo I del principal panel de expertos sobre cambio clim¨¢tico, el IPCC, copresidido por Val¨¦rie Masson-Delmotte (50 a?os, Nancy). Esta climat¨®loga francesa, que ha tenido que aprender a separar sus emociones de los datos cient¨ªficos para no dejarse llevar por la angustia o la impotencia, explica que el cambio clim¨¢tico no se ha acelerado, pero s¨ª se est¨¢ intensificando, con eventos meteorol¨®gicos m¨¢s intensos y frecuentes. Como recalca, la escala y la velocidad de las perturbaciones actuales en el clima no tienen precedentes en los ¨²ltimos milenios.
Pregunta. ?Qu¨¦ destaca de su informe cient¨ªfico sobre cambio clim¨¢tico del IPCC?
Respuesta. Los avances en el conocimiento cient¨ªfico muestran la intensificaci¨®n del cambio clim¨¢tico, su efecto generalizado en todas las regiones del mundo, y la influencia humana en el clima global y en eventos extremos, como olas de calor, fuertes lluvias o sequ¨ªas. Tenemos una comprensi¨®n m¨¢s fina del efecto de nuestras emisiones de di¨®xido de carbono, y tambi¨¦n de metano, para comprender c¨®mo perturbamos el clima.
P. ?El calentamiento del planeta es hoy m¨¢s r¨¢pido de lo previsto por los cient¨ªficos?
R. La evoluci¨®n del calentamiento es como se esperaba, las tendencias que observamos fueron anticipadas a finales de los a?os ochenta. De hecho, el premio Nobel de F¨ªsicas de este a?o ha sido otorgado a pioneros de la modelizaci¨®n del clima [los climat¨®logos Syukuro Manabe y Klaus Hasselmann, junto a Giorgio Parisi]. El ¨²nico punto en el que ha habido realmente una aceleraci¨®n, un aumento del ritmo, es en la subida del nivel del mar.
P. ?Qu¨¦ significa entonces que se est¨¦ produciendo una intensificaci¨®n del cambio clim¨¢tico?
R. Esto quiere decir, en particular, eventos extremos m¨¢s intensos y frecuentes. Adem¨¢s, tambi¨¦n hay una intensificaci¨®n en el sentido en que toca los l¨ªmites de los ecosistemas o las infraestructuras que existen. Corremos detr¨¢s del clima; vemos que nuestras infraestructuras o nuestras pr¨¢cticas agr¨ªcolas actuales no est¨¢n adaptadas al clima de hoy. Hay que tener en cuenta este diagn¨®stico m¨¢s fino y esta intensificaci¨®n en la toma de decisiones para prepararse. Muchas de las acciones de la actualidad, como construcciones, se llevan a cabo teniendo en cuenta el clima de los ¨²ltimos 100 a?os. Se realizan mirando al pasado, hacia atr¨¢s, es como ver por el retrovisor.
P. ?Hasta qu¨¦ punto se est¨¢ perturbando el clima?
R. En el conjunto del planeta, la escala y la velocidad de los cambios actuales suponen una ruptura con respecto a las variaciones clim¨¢ticas naturales de los ¨²ltimos milenios. El calentamiento del ¨²ltimo siglo es in¨¦dito en m¨¢s de 2.000 a?os, la subida del nivel de mar en m¨¢s de 3.000 a?os, el propio contenido de CO? de la atm¨®sfera en varios millones de a?os. Estamos perturbando realmente en profundidad el sistema clim¨¢tico. El oc¨¦ano ha acumulado cerca del 90% del calor suplementario, pero el tiempo de mezcla del oc¨¦ano es de varios siglos, as¨ª que el cambio que ya ha tenido lugar es irreversible a largo plazo. Cuando se emite CO?, una parte entra en el oc¨¦ano, acidific¨¢ndolo, otra va a la vegetaci¨®n, y cerca de la mitad se queda en la atm¨®sfera: entre un 15% y 40% de las emisiones puestas en la atm¨®sfera anualmente van a continuar actuando sobre el clima en una escala de mil a?os.
P. El informe incide en que algunos de estos cambios resultan ya irreversibles para cientos o miles de a?os.
R. Una subida del nivel del mar es irreversible en escalas de tiempo de siglos a miles de a?os, pero tambi¨¦n mostramos hasta qu¨¦ punto la evoluci¨®n del futuro del clima depende de elecciones que podemos hacer. Si reduj¨¦ramos de forma realmente fuerte las emisiones por todo el mundo ver¨ªamos muchos beneficios: para la calidad del aire ser¨ªan muy r¨¢pidos, en algunos a?os; para la evoluci¨®n de la temperatura en la superficie de la Tierra, al cabo de una veintena de a?os; no es mucho a la escala de una vida humana.
P. ?C¨®mo hace psicol¨®gicamente para trabajar todo el rato con informaciones tan alarmantes?
R. Hace 30 a?os que trabajo en estas cuestiones y es realmente importante apartar las emociones que pueden paralizar, como la angustia, el sentimiento de impotencia o, a veces, la c¨®lera, por una reacci¨®n demasiado lenta. En mi caso, prefiero subrayar c¨®mo el progreso de los conocimientos cient¨ªficos permite entender mejor qu¨¦ va a ocurrir en cada regi¨®n. Si no tenemos conocimientos, avanzamos en la oscuridad. Ahora espero que estos conocimientos, este diagn¨®stico, conduzcan a acciones m¨¢s ambiciosas y eficaces.
P. Este informe del IPCC usa un lenguaje mucho m¨¢s duro que los anteriores: ?es porque se sabe m¨¢s del fen¨®meno ahora o por decisi¨®n propia de este organismo?
R. Se ha avanzado en el conocimiento cient¨ªfico, pero tambi¨¦n hemos hecho un esfuerzo no para ser m¨¢s duros, sino m¨¢s claros. A menudo, en los informes anteriores del IPCC, cuando la gente los le¨ªa se ahogaba en un vocabulario demasiado t¨¦cnico y con t¨¦rminos sobre niveles de confianza que resultaban incomprensibles para un ciudadano normal.
P. La pandemia oblig¨® a realizar este informe trabajando a distancia, por internet, con varios cientos de cient¨ªficos de todo el mundo. ?C¨®mo fue la experiencia?
R. S¨ª, desde febrero de 2020. La dedicaci¨®n de los autores fue extraordinaria, pues ha requerido trabajar en franjas horarias distintas y fuera de los horarios habituales, lo que interfiere mucho en la vida familiar. Para permitir participar a distancia a 234 investigadores de 65 pa¨ªses, en las distintas franjas horarias, cada reuni¨®n la hac¨ªamos dos veces, una por la ma?ana muy pronto y otra por la tarde.
P. ?Esto deber¨ªa ser un ejemplo para otras reuniones clim¨¢ticas, como la cumbre que comienza ahora en Glasgow?
R. Yo estoy muy atenta a limitar mis emisiones de gases de efecto invernadero y mis desplazamientos, en particular, en avi¨®n. En el IPCC, hasta 2020 la norma era tener reuniones en las cuatro esquinas del mundo, pero numerosos cient¨ªficos del clima hab¨ªan mostrado sus reservas, pues para ellos era contradictorio. Yo hab¨ªa pedido hacer reuniones virtuales y me dijeron que no era posible. Lo que no era posible antes de 2020, ahora se ha convertido en la norma. Hemos aprendido lecciones. No es f¨¢cil. La aprobaci¨®n final del informe se hizo durante dos semanas: en la primera semana el horario de trabajo para nosotros en Europa era de mediod¨ªa a medianoche y en la segunda, de las cinco de la madrugada a las dos de la tarde, pero en Sudam¨¦rica les toc¨® trabajar en mitad de la noche 15 d¨ªas seguidos.
P. ?C¨®mo ve la cumbre de Glasgow? ?Estamos a tiempo de parar lo peor del cambio clim¨¢tico?
R. En nuestro informe vemos cinco grandes escenarios con las emisiones: de gran aumento, de aumento, de estancamiento, de bajada o de muy fuerte bajada. El escenario de gran aumento es hoy menos posible, por las pol¨ªticas clim¨¢ticas en marcha y por la ruptura tecnol¨®gica con la electricidad baja en carbono. Si se cumplen los compromisos actualizados para la reducci¨®n de emisiones de los pa¨ªses para 2025 y 2030, es decir, las promesas, no las acciones puestas en marcha, lo que sale es algo parecido a nuestro escenario de estancamiento y esto significa dos grados de m¨¢s en 2050 y tres grados al comienzo del pr¨®ximo siglo. Ahora mismo hay una brecha muy chocante entre los compromisos adquiridos de los pa¨ªses y los objetivos del Acuerdo de Par¨ªs sobre el clima.
P. En contra de lo que piensa mucha gente, el IPCC no realiza estudios propios.
R. As¨ª es, el IPCC no produce conocimientos nuevos, pasa revista a los ya existentes de manera met¨®dica, objetiva, rigurosa y neutra. Participa en lo que yo llamo la maduraci¨®n de los conocimientos.
P. ?Qu¨¦ piensa de las denuncias de presiones para influir en otros informes del IPCC?
R. En realidad, el IPCC es tambi¨¦n una coproducci¨®n y trabaja con un sistema de relectura abierta. Cada informe es el resultado de varias revisiones sucesivas que son realizadas por aquellos que quieran de la comunidad cient¨ªfica, miles de cient¨ªficos, y luego por los representantes de los distintos pa¨ªses, que tambi¨¦n pueden tener, por supuesto, unas perspectivas geopol¨ªticas. Esos comentarios son tenidos en cuenta, pero no es la opini¨®n expresada por el representante de un pa¨ªs lo que va a decidir un an¨¢lisis cient¨ªfico. Nosotros nos apoyamos en los estudios, los datos, los conocimientos que son robustos, y que al final se imponen, aunque choquen con las agendas de algunos pa¨ªses. Cuando un informe del IPCC se publica en su versi¨®n final, el conjunto de comentarios recibidos en las relecturas son igualmente publicados.
P. ?Entonces no lo considera presiones?
R. El informe del que habla es un borrador del informe del grupo III y algunos comentarios se han realizado por algunos gobiernos en relectura, que es una de las etapas de la preparaci¨®n. En el informe del grupo I que publicamos este verano, esa etapa de relectura por los gobiernos nos ha ayudado a ser m¨¢s claros en nuestras conclusiones, sin ambig¨¹edades. Veo una oportunidad en el hecho de poder tener esa producci¨®n colectiva.
Puedes seguir a CLIMA Y MEDIO AMBIENTE en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.