Insultos y galanter¨ªas en la Feria del Libro

Nada m¨¢s entrar al Paseo de Coches, entre las casetas de la Feria del Libro de Madrid que se acaban de secar al sol tras una inauguraci¨®n imaginaria, dice el altavoz: ¡°Esteban Beltr¨¢n firmar¨¢ hoy su libro ¡®La jodida intensidad de vivir¡¯, editado por Vaso Roto¡±. Cre¨ªamos que Kundera hab¨ªa roto el techo con su insoportable levedad del ser, pero ahora todo se ha vuelto indignado y desapacible como un anochecer de mayo, amigos, todo se ha llenado de granizo y palabrota, de dicterio y escarnio. La jodida intensidad de vivir marca el garbeo de este paseante distra¨ªdo por una feria abrumadora que esconde sus significados en lo m¨¢s insignificante, porque lo dem¨¢s est¨¢ muy visto y porque el diablo mora en los detalles, como sabe todo el que haya tratado con ¨¦l.

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Llueve sobre mojado en la Feria del Libro de Madrid

ESPECIAL | Todo sobre la Feria

Ni la caseta de los tebeos se libra de la marea: El integral de los insultos del Capit¨¢n Haddock, presenta Albert Algoud en Norma Editorial. Y dos casetas m¨¢s all¨¢: Diccionario de insultos para pol¨ªticos, de Pancracio Celdr¨¢n. Pero Celdr¨¢n, licenciado en lengua y doctor en filosof¨ªa, est¨¢ firmando en la caseta de Distriforma junto a una estrella de esta feria, el actor Pepe Viyuela, que presenta su Bestiario del teatro. Viyuela tiene cola de paseantes distra¨ªdos y el pobre Celdr¨¢n firma poco, pese a que su ¨²ltimo libro ha marcado un cambio de tendencia digno de rese?ar. No va de insultos ni de malos rollos, sino que se llama Diccionario de elogios, piropos y voces galantes. Entre que su soledad me da pena y que el t¨ªtulo es irresistible, no puedo evitar hacerme con un ejemplar dedicado por el autor.

¨C?Qu¨¦ tal se est¨¢ al lado de Pepe Viyuela?

¨CViyuela es un monstruo¨C, responde Celdr¨¢n.

¨C?S¨ª, de feo!¨C, le replica el actor mientras sigue firmando sin parar y sin que por ello la cola parezca reducirse en absoluto.

La palabra monstruo?viene recogida en el diccionario de galanter¨ªas del doctor Celdr¨¢n, por supuesto. ¡°Se dice de modo antifr¨¢stico¡±, leemos all¨ª, ¡°remitiendo a la acepci¨®n principal del t¨¦rmino, porque tanta estupefacci¨®n causa la fealdad extrema como su opuesto, la belleza suma, visto todo ello como portento y maravilla¡±. O sea, que Viyuela es un monstruo como podr¨ªa haber sido un huevudo, que es ¡°un t¨ªo estupendo, en la l¨ªnea del carajudo, el cojonudo y el pelotudo¡±, en palabras de Rafael Garc¨ªa Serrano que podemos tambi¨¦n conocer en el diccionario de galanter¨ªas del doctor. Pero nadie sospeche aqu¨ª de micromachismo, porque Celdr¨¢n tambi¨¦n recoge piropos dedicados a las mujeres, como ¡°tener buenas aldabas¡±, ¡°estar ca?¨®n¡±, ¡°cuchicuchi¡±, ¡°jamona¡± y ¡°chochete¡±. Esta edici¨®n todav¨ªa no recoge ¡°pib¨®n¡±. Es la jodida intensidad de vivir.