Spike Lee, a la caravana migrante: ¡°Dios os bendiga, no hac¨¦is nada malo¡±

Spike Lee evita mentar el nombre de Donald Trump, prefiere llamarlo ¡°agente naranja¡± o en algunas ocasiones le dice simplemente ¡°hijo de puta¡±. ¡°En mi mente suena mejor as¨ª¡±, sostiene mientras r¨ªe. Es un f¨¦rreo opositor a las pol¨ªticas del estadounidense, un duro activista que acostumbra a usar el nombre del arma qu¨ªmica empleada por Washington en la guerra de Vietnam para denominar al mandatario.

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Lee responde directo y muy tajante: ¡°Es un racista¡±. Sus frases, rotundas y concisas, destellan en la habitaci¨®n del resort de lujo en el que atiende a la prensa. Vestido con zapatillas de deporte, gorra y una chaqueta plateada, el cineasta mira fijamente a trav¨¦s de sus grandes gafas azules antes de seguir hablando: ¡°?No le has escuchado decir que los mexicanos son unos violadores, asesinos y narcotraficantes?¡±, cuenta a EL PA?S, desde el festival de cine de Los Cabos.

Sus palabras suenan a¨²n m¨¢s contundentes en territorio mexicano y no demasiado lejos de la frontera que Donald Trump se empe?a en fortificar. Tijuana, el punto m¨¢s cercano desde Los Cabos al l¨ªmite con EE UU, ser¨¢ tambi¨¦n la puerta de entrada de la caravana migrante que tanto ha enfurecido al presidente estadounidense. ¡°Que Dios os bendiga, no hac¨¦is nada malo¡±, les dice el cineasta, sin demasiada esperanza, a los integrantes de la marcha.

Lanza dardos envenenados contra el presidente estadounidense y le faltan adjetivos para calificar su pol¨ªtica migratoria. ¡°Separar a las madres de sus hijos es algo diab¨®lico y una barbarie¡±, sostiene y, de hecho, concentra sus esperanza en que esto no ocurra tras la inminente llegada de los m¨¢s de 6.000 centroamericanos que se dirigen hacia el puesto fronterizo de Tijuana. ¡°Solo intentan tener una vida mejor y est¨¢n haciendo un gran sacrificio para lograrlo¡±, recuerda Lee.

Pero su cruzada no solo va dirigida contra el mandatario estadounidense, sino que se extiende por el resto del planeta. "No es ¨²nicamente el agente naranja, el de Brasil tambi¨¦n es malo. Es un fen¨®meno global", asegura posteriormente en un encuentro con la prensa. La victoria de Jair Bolsonaro o la irrupci¨®n de partidos populistas en Europa le llevan a mantenerse alerta ante la llegada de viejos fantasmas del pasado.¡°Usan el miedo de la gente. Esto no es nuevo, es la forma habitual de jugar del fascismo¡±.

De hecho, su ¨²ltima pel¨ªcula esconde un mensaje para los racistas del mundo y en especial para el republicano Donald Trump. Infiltrado en el KKKlan, que ha presentado por primera vez en M¨¦xico durante el Festival de cine de Los Cabos, cuenta la incursi¨®n de un agente negro en un grupo supremacista blanco de Estados Unidos en los a?os 70.

Una historia basada en hechos reales que aunque viaje 40 a?os en el tiempo queda perfectamente relacionada en la pel¨ªcula con lo ocurrido en Charlottesville en 2017. Entonces una persona muri¨® y 19 resultaron heridas despu¨¦s de que un coche embistiese a una multitud que protestaba contra una manifestaci¨®n de supremacistas blancos que se celebrada en esta localidad. Lee deja en evidencia en esta cinta al propio mandatario al incluir sus declaraciones tras las marchas en este municipio de Virginia. El presidente no quiso mencionar el racismo, ni condenar el supremacismo, simplemente se limit¨® a condenar ¡°la violencia de muchas partes¡±, asegur¨® ante la prensa.

"En 2020 [con las elecciones presidenciales en EE UU] habr¨¢ un refer¨¦ndum sobre hacia donde queremos que camine nuestro pa¨ªs. Tendremos que elegir entre el odio y el amor. Ah¨ª se ver¨¢ el alma de Estados Unidos".

Spike Lee tiene muy claro qu¨¦ bando ocupa en las batallas. Responde siempre alto y fuerte y nunca se atisba un resquicio de duda en sus palabras. No titubea cuando ¨¦l mismo pregunta si Madrid o Bar?a. Lee afirma contundente que su equipo es el Bar?a. Ni tampoco se muestra dubitativo cuando asegura ser partidario de la independencia catalana. ¡°S¨ª, s¨ª, s¨ª¡±, llega a responder, con insistencia y en espa?ol, durante la entrevista.