Hacia la saturaci¨®n de plataformas televisivas

Para ver el fen¨®meno Stranger Things, debe tener Netflix. La superproducci¨®n?Westworld solo se disfruta en HBO Espa?a.?Arde Madrid, una de las producciones espa?olas m¨¢s jaleadas del a?o pasado, est¨¢ en Movistar +. Una de las favoritas de los cr¨ªticos, The Marvelous Mrs. Maisel, solo puede verla en Amazon Prime Video. La alabada actuaci¨®n de Benedict Cumberbatch en Patrick Melrose la encontrar¨¢ en Sky. Para muchas otras tiene que navegar por Filmin, Rakuten TV, Facebook Watch, Orange Series, Flixol¨¦, Fox Now, AXN Now...

Los servicios de v¨ªdeo bajo demanda, tanto de pago como gratuitos, se multiplican en un momento en el que la industria televisiva vive una permanente revoluci¨®n. Cada uno intenta atraer a los espectadores con contenido propio y exclusivo. En enero lleg¨® a Espa?a Acorn TV (4,99 euros al mes), disponible en smartphones y con producciones televisivas de Reino Unido, Irlanda, Canad¨¢ y Australia. Y ya prepara su aterrizaje en marzo Dazn (precio por anunciar), centrada en el deporte y que llegar¨¢ con la MotoGP, la Premier League y la Euroliga de baloncesto.

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Si m¨¢s de una docena de opciones?ya parecen muchas, a estas se podr¨ªan sumar pr¨®ximos lanzamientos que, casi con total seguridad, recalar¨¢n en Espa?a. Disney + arrancar¨¢ a finales de a?o en Estados Unidos con una inversi¨®n de unos 500 millones de d¨®lares en contenido original para su lanzamiento. Apple tambi¨¦n pondr¨¢ en marcha su plataforma este a?o, que cuenta en sus filas ya con actores y creadores como Jennifer Aniston, Reese Witherspoon o J.J. Abrams. Warner lanzar¨¢ su propio servicio de v¨ªdeo bajo demanda a finales de a?o.

El panorama televisivo ya estaba muy fragmentado por la proliferaci¨®n de canales en la televisi¨®n tradicional. Ahora hay que sumar la presencia de plataformas de v¨ªdeo bajo demanda. Los usuarios ven c¨®mo el programa que les han recomendado est¨¢ en una plataforma que no tienen contratada, la factura al final del mes no hace m¨¢s que subir. Si alguien estuviera suscrito a las siete principales plataformas en su versi¨®n b¨¢sica, pagar¨ªa 135 euros al mes (el salario m¨ªnimo en Espa?a es de 900 euros al mes y el sueldo medio, 1.951 euros). Seg¨²n la consultora Leichtman Research Group, el 43% de los hogares estadounidenses est¨¢n suscritos a m¨¢s de una plataforma: la media son dos o tres servicios de v¨ªdeo en streaming por hogar y casi siempre uno de ellos es Netflix.

"Una cosa es el rumbo que est¨¢ tomando el mercado televisivo y otra bien distinta, la masa de suscriptores que sean capaces de ara?ar dichos servicios", opina Elena Neira, profesora de los estudios de Comunicaci¨®n de la Universitat Oberta de Catalunya. Para Neira, ya es indiscutible que los grupos audiovisuales deben contar con una vertiente dedicada al streaming. "Los medios tradicionales han comprendido que el presente supone asumir la fragmentaci¨®n de consumos y la multiplicaci¨®n de agentes", a?ade. Para otras compa?¨ªas, sus servicios de v¨ªdeo bajo demanda son solo un medio para un objetivo mayor. La finalidad de Apple es vender sus dispositivos. Amazon incluye sus series dentro de la suscripci¨®n a Amazon Prime. Facebook busca retener m¨¢s tiempo a los usuarios dentro de la red social. Movistar solo oferta su televisi¨®n en paquetes con telefon¨ªa e Internet.

?Cu¨¢nto aguantar¨¢ el mercado a este ritmo antes de saturarse de plataformas? "Depender¨¢ del dinero que puedan invertir estas compa?¨ªas, su capacidad para escalar el negocio globalmente y para sobrevivir con escasos m¨¢rgenes", contesta Neira. Esta multiplicaci¨®n de jugadores ya ha tenido alguna v¨ªctima. Las series que ofrec¨ªa YouTube Premium?(t¨ªtulos como Cobra Kai, que recuperaba los personajes y actores de Karate Kid, o la historia de ciencia ficci¨®n Impulse)?han pasado a ser accesibles gratis desde enero. El pago por sus ver sus episodios no ha funcionado.

"La batalla parece favorecer a las plataformas pioneras, muy especialmente a Netflix. Tienen mucho terreno ganado porque han dedicado mucho tiempo y recursos a ganar cuota de mercado y a trasladar la percepci¨®n al espectador medio de que cuenta con un cat¨¢logo muy amplio de ocio y entretenimiento", dice Neira. Otras voces se?alan a los servicios que se dirigen a un p¨²blico m¨¢s definido y de nicho como los que m¨¢s posibilidades tienen de sobrevivir en esta jungla de opciones. La ¨²ltima palabra, en cualquier caso, la tienen unos espectadores convertidos en usuarios y clientes.

Ante esta fragmentaci¨®n, en Estados Unidos ya se habla de la posible oferta de paquetes que agrupen algunos de estos servicios para tratar de facilitar la vida a los usuarios con ofertas y una misma factura. En ese sentido, en Espa?a Vodafone tiene acuerdos con HBO Espa?a y Filmin, mientras que Movistar se ali¨® con Netflix en una uni¨®n que acaba de cumplir dos meses. En una entrevista con EL PA?S el a?o pasado, Sergio Osl¨¦, presidente de Movistar +, antes de que se hiciera oficial esa alianza, ya apuntaba a la vinculaci¨®n entre plataformas como algo ineludible: "Hay mucho contenido, quiz¨¢ demasiado, y quiz¨¢ demasiados distribuidores, y esto llegar¨¢ a ser malo para el consumidor. En alg¨²n momento, el usuario nos va a parar y va a decir que esto es demasiado complicado".