Goya, Benlliure, Barcel¨®... viven en Las Ventas junto a figuras del toreo

Francisco de Goya, Mariano Benlliure, Miquel Barcel¨® y otros muchos artistas, pintores, escultores, cartelistas, viven en la plaza de toros de Las Ventas junto a algunas de las grandes figuras del toreo de todos los tiempos. Colindante con el patio de caballos, el Museo Taurino de la Comunidad de Madrid, creado en 1951, es un tesoro que guarda obras de arte, carteles, objetos, recuerdos, reliquias y documentos hist¨®ricos de la larga y fecunda vida de la tauromaquia desde el siglo XVIII.

Este sagrario taurino ha adquirido, adem¨¢s, movimiento y vida gracias a las nuevas tecnolog¨ªas; desde el pasado mes de febrero funciona la llamada ¡®sala inmersiva¡¯, un espacio de 22 metros cuadrados, flanqueado por tres pantallas gigantes que trasladan a los visitantes a la vida del toro en el campo, al ecosistema de la dehesa, y los convierte en testigos directos de las faenas m¨¢s relevantes acaecidas en el ruedo madrile?o.

Por el momento, se pueden ¡®tocar¡¯ los toros de la ganader¨ªa gaditana de Gavira y disfrutar con los triunfos de puerta grande alcanzados el pasado San Isidro por los diestros Alejandro Talavante, Alberto L¨®pez Sim¨®n y Sebasti¨¢n Castella. Pero este no es m¨¢s que el comienzo de una inmersi¨®n en im¨¢genes palpitantes, que promete nuevas y emocionantes entregas de campo y plaza, para que los asistentes al museo, la mayor¨ªa de ellos de nacionalidad francesa, seguidos a poca distancia por los chinos, se sientan aficionados y toreros virtuales a pocos metros donde los de luces se la juegan de verdad.

El Papa P¨ªo V excomulg¨® a los pr¨ªncipes cristianos que consintiesen las corridas de toros

Mientras los visitantes se asustan ante los astifinos pitones o se envalentonan junto a los heroicos espadas, reconocidos artistas duermen cada noche junto a figuras inmortales de la torer¨ªa.

Este museo no es solo un ¡®cementerio¡¯ de recuerdos manchados de sangre o sentimientos. Hay objetos, muchos, referentes a toreros inolvidables, como Manolete, que cuenta con un rinc¨®n propio, casi un t¨²mulo mortuorio, en el que figuran el traje, las medias, las zapatillas, la camisa, la montera, la casta?eta y el corbat¨ªn que luci¨® la tarde mortal de Linares; incluso la jeringa con la que se le hizo la primera transfusi¨®n de sangre en el hospital pone el detalle t¨¦trico al hist¨®rico escaparate. Otra vitrina guarda el vestido de torear de Juanita Cruz, primera mujer que alcanz¨® la categor¨ªa de matadora de toros; capotes de paseo de Juan Belmonte, Bombita, Domingo Ortega, Juan Posada, Gregorio S¨¢nchez¡­; trajes de Anto?ete; Marcial Lalanda, Vicente Pastor¡­; monteras de El Espartero, Paquiro, Reverte¡­, cabezas de toros famosos, estoques, y hasta las tijeras con las que cortaron la coleta a Joselito tras su muerte en Talavera.

Y junto a los toreros y su av¨ªos, los artistas¡­

El m¨¢s conocido es don Francisco de Goya, cuya personal visi¨®n de la fiesta queda reflejada en 40 estampas grabadas al aguafuerte, que constituyen la denominada ¡®Tauromaquia de Goya¡¯, fechadas entre 1801 y 1815.

El escultor Mariano Benlliure muestra su conocida obra ¡®El encierro¡¯, y Barcel¨® dej¨® su impronta art¨ªstica en el cartel de la gran corrida de Beneficencia de 1990.

Pero no son los ¨²nicos. Tambi¨¦n se pueden admirar obras de los pintores Daniel V¨¢zquez D¨ªaz y su famoso cuadro de Belmonte; Manuel Benedito y el dibujo a carboncillo del rostro de Joselito el Gallo, Roberto Domingo, Manuel Ortega, Francisco Reig¨®n, Manuel Ortega, Antonio Carnicero, Antonio Lucas, Ferm¨ªn V¨¢zquez, Manuel de Coss¨ªo, Jano, Antonio Delgado Raya¡­, y otros desconocidos a quienes la historia les ha guardado reconocimiento en las im¨¢genes de toreros tan sobresalientes como Manuel Dom¨ªnguez ¡®Desperdicios¡¯, Curro C¨²chares, Joaqu¨ªn Rodr¨ªguez Costillares, Pedro Romero, Pepe Hillo, Lagartijo, Frascuelo¡­

En el siglo XVIII se prohibieron los juegos de pelota en el entorno de la plaza de Madrid

Escultores de la talla de Joaqu¨ªn Roca Rey, Raimundo Cobo, Pablo Lozano, Sebasti¨¢n Miranda, Eleuterio Mateos, Luis Sanguino, Raymundo Cobo, Manuel Revelles¡­

Y cartelistas como Arroyo, ?rculo, P¨¦rez Villalta, Manuel Alcorlo y Alicia Ochoa.

Y el museo se completa con curios¨ªsimos documentos hist¨®ricos, entre los que destaca un ejemplar de la Bula del Papa P¨ªo V, escrita en el siglo XVI, en la que prohib¨ªa la fiesta de los toros del siguiente modo: ¡°Bula por la que se excomulga y anatematiza a los Pr¨ªncipes cristianos que consintiesen las corridas de toros y a todas aquellas gentes que se solacen con ellas, negando asimismo sepultura eclesi¨¢stica a los que muriesen a consecuencia de las mismas¡±.

M¨¢s informaci¨®n

Un veterinario y un bi¨®logo, contra los mitos de la tauromaquia moderna Antonio Lorca 10/03/2019 - 11:05 CET

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El museo expone, tambi¨¦n, ¡°el repartimiento de balcones en la Plaza Mayor de Madrid para fiesta de toros con motivo del casamiento del Pr¨ªncipe de Asturias, futuro Carlos IV, con Mar¨ªa Luisa de Parma, en 1765¡±, el mismo que en 1805, siendo ya rey promulg¨® una c¨¦dula real ¡°por la que se proh¨ªbe absolutamente en todo el reino, sin excepci¨®n de la Corte, las fiestas de toros y novillos de muerte, con lo dem¨¢s que se expresa¡±.

Ante la proliferaci¨®n de los juegos de pelota en la plaza de toros de la Puerta de Alcal¨¢ (1749-1874), don Antonio Jos¨¦ Galindo, del Consejo de Su Majestad Carlos III, dict¨® un bando prohibi¨¦ndolos ¡°para evitar los considerables perjuicios que se causan a este edificio, desfigurando la fachada y descascarando mucha parte de sus paredes¡±.

Un cartel de seda anuncia las dos corridas que se organizaron los d¨ªas 6 y 7 de noviembre de 1892 en Madrid para conmemorar el IV Centenario del Descubrimiento de Am¨¦rica. Se lidiaron ocho toros cada tarde y los festejos tuvieron un car¨¢cter ben¨¦fico.

Todo esto y mucho m¨¢s guardan las cuatro paredes del Museo Taurino de la Comunidad de Madrid, que en 2017 recibi¨® 102.534 visitantes, y 106.390 al a?o siguiente, cifras que espera aumentar a partir de ahora con esa ¡®sala inmersiva¡¯ que pretende acercar los toros y los toreros a quienes demuestren curiosidad y valor.