¡®In¨¦s del alma m¨ªa¡¯, de Isabel Allende, ser¨¢ una miniserie de televisi¨®n

La escritora m¨¢s le¨ªda en espa?ol tiene ganas de ver a su In¨¦s Su¨¢rez en pantalla. Isabel Allende (Lima, 76 a?os) ya puede contar que su novela In¨¦s del alma m¨ªa, traducida a 30 idiomas, tendr¨¢ adaptaci¨®n a la televisi¨®n, en forma de miniserie de ocho cap¨ªtulos. Un formato perfecto, dice, para la historia de una protagonista ¡°extraordinaria¡±, In¨¦s Su¨¢rez, una extreme?a del siglo XVI, pobre y costurera, que form¨® parte de la expedici¨®n a Chile del conquistador Pedro de Valdivia y acab¨® participando en la fundaci¨®n de Santiago de Chile.

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?A la escritora, creadora compulsiva -publica una novela, de media, cada dos a?os- no le preocupa c¨®mo se trasladar¨¢ al audiovisual la historia de In¨¦s, una coproducci¨®n internacional de Radiotelevisi¨®n Espa?ola, Boomerang TV y Chilevisi¨®n a¨²n sin fecha de estreno pero ya en fase de preproducci¨®n. Varias novelas de la chilena han sido llevadas al cine y televisi¨®n, con m¨¢s o menos fortuna (La casa de los esp¨ªritus, en 1993, con Meryl Streep, Antonio Banderas, Glenn Close, Jeremy Irons y Winona Ryder; De amor y de sombras, en 1994, con Banderas y Jennifer Connelly). Y es que ella, sostiene, sabe que las obras no le pertenecen cuando las acaba, y procura no meterse en las interpretaciones de otros creadores. ¡°Se han hecho pel¨ªculas, obras de teatro, ballet, ¨®pera¡­ y cada uno de esos creadores conoce su oficio. En La casa de los esp¨ªritus hab¨ªa que meter en dos horas una epopeya de 70 a?os que sal¨ªa de un libro de 560 p¨¢ginas¡±. A Rosa, el personaje que ten¨ªa el pelo verde, el director le tuvo que cambiar ese detalle porque lo que uno imagina en un libro no siempre puede trasladarse al lenguaje visual. Allende es optimista y apuesta a que la miniserie sobre In¨¦s del alma m¨ªa aportar¨¢ algo incluso a quienes ya conocen la novela: ¡°Por mucha imaginaci¨®n que tenga, un lector no puede imaginarse lo que era una batalla con 10.000 ind¨ªgenas y un pu?ado de 50 espa?oles¡±.

¡°No me interesa escribir sobre mujeres que no son fuertes.?Desde que empec¨¦, hace m¨¢s de 30 a?os, todos mis personajes femeninos son feministas¡±

?Por qu¨¦ fue elegida ahora esta obra, publicada en 2006? ¡°Es una historia muy chilena y muy espa?ola, la historia del pu?ado de aguerridos conquistadores en un tiempo que nadie quer¨ªa ir a Chile porque no hab¨ªa oro ni plata¡±, apunta Allende, menuda, de mirada y tono contundentes, en una sala de la Casa de Am¨¦rica de Madrid, donde est¨¢ presentando su ¨²ltima novela, Largo p¨¦talo de mar (Plaza y Jan¨¦s). ¡°Ellos fueron por la gloria y los acompa?¨® In¨¦s Su¨¢rez, la ¨²nica mujer espa?ola¡±. Era un personaje feminista en una ¨¦poca en que no exist¨ªa un t¨¦rmino apropiado para definir a quien, ¡°mientras los conquistadores iban perdiendo la salud y la vida en las batallas, con gran sentido com¨²n y pr¨¢ctico, contaba gallinas y adquir¨ªa territorios¡±. ¡°In¨¦s quer¨ªa pacificar. Lleg¨® a ser la segunda mujer m¨¢s rica del reino, ten¨ªa un gran sentido administrativo y com¨²n, y enorme poder pol¨ªtico- fue compa?era del general Pedro de Valdivia y de Pedro de Quiroga, dos veces gobernador de Chile-¡±. Representa, sostiene, al ¨²nico tipo de mujer del que quiere contar historias. ¡°No me interesa escribir sobre mujeres que no son fuertes. Desde que empec¨¦, hace m¨¢s de 30 a?os, todos mis personajes femeninos se puede decir que son feministas¡±, resume. Ya lo dice en la novela: ¡°Las mujeres con temple ponen en peligro el desequilibrio del mundo, que favorece a los hombres, por eso se ensa?an en vejarlas y destruirlas. Pero son como las cucarachas: aplastan a una y salen m¨¢s por los rincones.¡±?

El proyecto de la miniserie de In¨¦s del alma m¨ªa se empez¨® a hablar en 2015.?Aunque todav¨ªa no se conoce el reparto de actores, los productores s¨ª han adelantado que se rodar¨¢ en distintos escenarios naturales de Chile, Per¨² y Espa?a. Un proyecto internacional para una escritora que escribe constantemente, de una forma u otra, sobre el exilio. ¡°Ahora soy ciudadana americana pero soy una inmigrante, soy latina y hablo ingl¨¦s con acento. Siempre me voy a sentir extranjera. Si me preguntas qu¨¦ soy, te digo chilena, pero cuando voy a Chile me siento tambi¨¦n extranjera a la semana. Me doy cuenta de que el pa¨ªs que yo llevo adentro es el pa¨ªs antiguo. Como desde hace muchos a?os no vivo ah¨ª, vuelvo en busca de ese pa¨ªs y encuentro otro¡±. Por eso la ¨²nica patria, asegura, son los afectos. ¡°En Chile estaba mi madre y mi padrastro, que ador¨¦, pero con su muerte siento que una parte importante de mi ra¨ªz termin¨®. Mis nietos me dicen que yo tengo un pueblo en la cabeza y que vivo en ese pueblo. Ese pueblo son los libros que escribo¡±.

Allende ve poca televisi¨®n -alguna pel¨ªcula con Roger, su nuevo amor-. ¡°Tengo que pasar muchas horas en silencio, escribiendo y estudiando¡±. Arranca siempre sus libros el d¨ªa 8 de enero, la fecha en la que la gente a su alrededor sabe que no est¨¢ disponible para nada. ¡°Cada vez necesito concentrarme para usar mis horas. Antes pod¨ªa escribir 10 diarias, pero produc¨ªa lo mismo que ahora en seis¡±. Y dice que, de sus m¨¢s de 100 libros pasados, le gustar¨ªa especialmente ver dos trasladados a la pantalla: Hija de la fortuna, sobre la fiebre del oro en California, y el nuevo Largo p¨¦talo de mar, ¡°una epopeya sobre el tema candente de los refugiados¡±.