Listas distantes
En Internet, las p¨¢ginas m¨¢s buscadas valen m¨¢s. Es como en la vida: quien est¨¢ m¨¢s solicitado suele ser el m¨¢s importante
Hay un documento de car¨¢cter confesional que la gente suele dejarse en el carro del supermercado: la lista de la compra. Alguna vez leo esos papeles e imagino al personaje que escribe as¨ª, come as¨ª, limpia as¨ª y olvida en el carro ese boceto de autorretrato parcial, de m¨ªnimo testimonio autobiogr¨¢fico. Las grandes fiestas mercantiles, los d¨ªas de regalos de temporada ¡ªla fiesta cristiana de la Navidad, por ejemplo¡ª son propicios a las grandes listas de la compra: ropa, l¨¢mparas, lecturas, m¨²sica, comida y cosm¨¦tica, tel¨¦fonos, filatelia, dispositivos electr¨®nicos, todas las secciones del centro comercial, todo lo que cabe en los escaparates. Un escaparate es una lista visual, y tan escaparate es una vitrina como un tel¨¦fono m¨®vil.
Son d¨ªas de listas en los medios de comunicaci¨®n: los expertos proponen listas de ropa, m¨²sica, dispositivos inteligentes, arte, coches, libros y animales de compa?¨ªa, cine, vinos y radiotelevisi¨®n, todo lo que consideran lo mejor del a?o. Barthes dec¨ªa: ¡°Me gusta, no me gusta: esto no tiene ninguna importancia para nadie, no tiene sentido. Solo quiere decir: mi cuerpo no es igual al tuyo¡±. Pero creo que, adem¨¢s de presentar una confesi¨®n de los gustos del experto, una declaraci¨®n ritual de sus principios est¨¦ticos, ¨¦ticos y pol¨ªticos en general, las listas de productos preferidos, con su tono pol¨¦mico o discutible, did¨¢ctico o publicitario, ofrecen estos d¨ªas sugerencias de m¨¢s listas: listas de la compra avaladas por los especialistas.
Me voy a Google, esa lista de todas las listas. Empiezo a escribir la palabra ¡°lista¡± en la casilla de b¨²squeda y cuando llevo escritas las tres primeras letras el motor de b¨²squeda me propone tres elementos como posibles objetivos de mi indagaci¨®n: Lisboa, aproximadamente 250 millones de resultados en Google en 0,68 segundos; Listeriosis, cerca de 4 millones de resultados en 0,42 segundos, y Lista Robinson, unos 20 millones de resultados en 0,32 segundos. Cuando completo las cinco letras de ¡°lista¡±, me facilitan en 0,47 segundos una lista de aproximadamente 2.700 millones de enlaces. Las listas de p¨¢ginas que presenta Google pueden contar con millones de elementos a los que se les ha dado un orden, una jerarqu¨ªa. No se trata de listas arbitrarias.
Para imponer orden, Google recurr¨ªa a la familia de algoritmos PageRank, marca registrada, patente caduca desde septiembre de este a?o, o eso dice Wikipedia. PageRank (cerca de 23 millones de resultados en 0,47 segundos) situaba a las distintas p¨¢ginas en un ranking, de mayor a menor rango. Sus autores, Larry Page y Sergey Brin, lo ve¨ªan como un m¨¦todo para valorar y ordenar las p¨¢ginas web de un modo objetivo y mec¨¢nico; Wikipedia lo define as¨ª: ¡°Familia de algoritmos utilizados para asignar de forma num¨¦rica la relevancia de los documentos (o p¨¢ginas web) indexados por un motor de b¨²squeda¡±.
Seg¨²n sus autores, PageRank es democr¨¢tico: se basa en lo buscada que est¨¢ una p¨¢gina. Las p¨¢ginas m¨¢s buscadas valen m¨¢s. Es como en la vida: quien est¨¢ m¨¢s solicitado y recibe m¨¢s visitas suele ser el m¨¢s importante. Los enlaces son votos, y votos ponderados. As¨ª se mide la relevancia de un cient¨ªfico: por el n¨²mero de veces que lo citan otros cient¨ªficos y la categor¨ªa de las publicaciones en las que se le cita. No s¨¦ si, combinando el sistema PageRank y los procedimientos electr¨®nicos que Franco Moretti recomienda para el estudio de las obras literarias, ser¨ªa factible fabricar listas electr¨®nicas, autom¨¢ticas, de la mercanc¨ªa preferida por los expertos sin necesidad de preguntarles a ellos.
Esas listas podr¨ªan publicarse como curiosidad junto a las listas habituales. El m¨¦todo de Moretti, la lectura distante (poco m¨¢s de 14 millones de resultados en 0,39 segundos), aprovecha la posibilidad de b¨²squedas veloc¨ªsimas en las bases de datos digitales para analizar cuantitativamente en un momento las formas y rasgos esenciales de un n¨²mero extens¨ªsimo de obras literarias, algo que en otros tiempos ocupar¨ªa a?os y siglos a los estudiosos. Ni siquiera hay que leer los libros, pero, seg¨²n Moretti, su m¨¦todo permite profundizar en unidades mucho m¨¢s peque?as y mucho m¨¢s grandes que un texto: rasgos caracter¨ªsticos, recursos, temas, figuras, g¨¦neros y sistemas.
Para redactar las nuevas listas autom¨¢ticas se recurrir¨ªa a los modos de leer electr¨®nicos: las m¨¢quinas filtrar¨ªan el inacabable hipertexto de todas las p¨¢ginas web disponibles, con la ayuda de PageRank elegir¨ªan a los expertos m¨¢s expertos y propensos a opinar, y aplicando las t¨¦cnicas de Moretti deducir¨ªan sus gustos ¡ªtomo como ejemplo el caso de los libros y los vinos¡ª por las alusiones que hubieran hecho en alg¨²n punto de la Red, por sus opiniones conocidas, por sus temas y man¨ªas estil¨ªsticas, por su proximidad a unas bodegas y a unas editoriales o a otras, por sus amistades, afinidades y desafinidades personales. Las listas autom¨¢ticas ser¨ªan a la vez objetivas y subjetivas, y ofrecer¨ªan, a trav¨¦s de las m¨¢quinas inform¨¢ticas, una lectura detallada, atenta, ¨ªntima y a la vez distante del estado del gusto en un momento hist¨®rico determinado.
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