Vuelve Manolito a lo grande
En su 25? aniversario, el personaje de Elvira Lindo se prepara para ir a la universidad y tendr¨¢ una serie de producci¨®n estadounidense
Manolo (ya no Manolito) se prepara para ir a la universidad y, si puede, independizarse. Estudiar¨¢ Periodismo. Una carrera que no le complique mucho la vida. Elvira Lindo, la creadora de este antih¨¦roe madrile?o del sur del r¨ªo Manzanares, barrunta c¨®mo transitar¨¢ su personaje m¨¢s popular de la adolescencia a ?la madurez? en un momento clave en su vida: en 2019 se han cumplido 25 a?os desde que Alfaguara publicara el primer libro de Manolito que recog¨ªa el fen¨®meno radiof¨®nico, primero de RNE y luego en la cadena SER. ¡°Seguir¨¢ siendo ese chaval de Carabanchel agobiado por su familia. Tendr¨¢ que afrontar sus primeras experiencias sexuales. Y todo lo har¨¢ como siempre, siendo un poco desastroso¡±, augura la autora en un banco de ese barrio de Madrid.
Por el momento, los seguidores tendr¨¢n que esperar un poco. La versi¨®n m¨¢s adulta de Manolito a¨²n da vueltas por la cabeza de Lindo. Desde 2012, cuando el ni?o se convirti¨® en adolescente en Mejor Manolo, la ¨²ltima entrega publicada por Seix Barral, el personaje ha permanecido en letargo. Pero solo literario. Este aniversario ha servido para despertarlo. ¡°Hay un resurgimiento¡±, reconoce la autora. Lo que no hay es una sola respuesta para explicar la habilidad de Manolito para sortear el olvido.
Por un lado, est¨¢ la capacidad de este ni?o de transitar entre generaciones gracias a los tributos que Lindo le otorg¨®: un barrio, una familia y una manera de relacionarse con los amigos. La universalidad encerrada en un chaval que permiti¨® que sus historias se tradujeran a m¨¢s de 20 idiomas (es popular en Ir¨¢n y en China ha llegado a vender m¨¢s de medio mill¨®n de copias).
Y luego est¨¢n ¡°los profes que lo prescriben para que sus alumnos cuenten y compartan su yo¡±, reconoce la escritora sacando su historia de los cuartos donde padres e hijos le¨ªan los cap¨ªtulos de Manolito. ¡°Es ideal para ejercicios de lectura y escritura, para aprender espa?ol¡±. El espa?ol coloquial, el de las calles.
La manera de hablar de Manolito ¡ªinventada por su autora¡ª se col¨® en el habla de una generaci¨®n de espa?oles y a¨²n pervive. ¡°Mundo mundial¡±; ¡°un silencio bastante sepulcral¡±; ¡°el principio de los tiempos¡±; ¡°la olla camboya¡±; ¡°el pollo repollo¡±. Frases manolitescas permeadas por el lenguaje de los barrios de Madrid. ?El nuevo Manolo hablar¨¢ como los millennial, los centennial, con anglicismos? ¡°Inventar¨¦ otras expresiones¡±, adelanta consciente del reto que tiene por delante. ¡°Nunca ha sido una copia real, sino una recreaci¨®n de c¨®mo suena el lenguaje popular¡±.
El feminismo, por el contrario, lleva a?os instalado en esta casa de Carabanchel. La madre siempre tuvo las riendas, aunque en los ¨²ltimos tiempos ya no solo desde dentro de esas paredes. ¡°El padre es un hombre con poca personalidad¡±, recuerda Lindo. Tuvo que dejar el cami¨®n ¡ªprincipal sustento de la familia¡ª por un problema de salud, y Cata, la madre, se puso a trabajar. En la ¨²ltima entrega de la serie, adem¨¢s, lleg¨® otro miembro femenino: la Chirli, la hermana peque?a capaz de hacerle sombra a su madre.
¡°El feminismo estar¨¢ de una forma sutil porque al fin y al cabo es un cuento. No es el formato para dar lecciones. Aparecer¨¢ en el sentido en que est¨¢ en la sociedad¡±, plantea la escritora. Manolo tendr¨¢ que lidiar con los desaf¨ªos que le planteen las mujeres en esta nueva etapa. ¡°Su car¨¢cter no es el del chulo, sino todo lo contrario. Es un ni?o al que le superan las circunstancias con mucha frecuencia¡±, recuerda Elvira Lindo.
El otro problema actual que Manolo ya conoce es la crisis. Si en 1994, la familia Garc¨ªa Moreno no sab¨ªa qu¨¦ era eso del bombazo econ¨®mico espa?ol, en la nueva d¨¦cada del siglo XXI, el joven universitario tendr¨¢ que lidiar con la precariedad de su generaci¨®n. ?Conseguir¨¢ un trabajo para poder salir de casa? ?Tendr¨¢ que dedicar m¨¢s del 90% de su sueldo al alquiler?
¡°Los libros de Manolito, desde el principio, hablaron de dinero, algo que era inaudito en libros que pudieran leer ni?os. Por eso son para todos los p¨²blicos¡±, aclara Elvira Lindo. ¡°Para m¨ª no va a suponer ning¨²n salto porque ¨¦l siempre est¨¢ con esas cosas. Desde el primer libro dice que la herencia que va a tener de sus padres ser¨¢n las letras del cami¨®n¡±.
En Hollywood
¡°Hace unos meses recib¨ª un correo electr¨®nico de Sunset Boulevard. Pens¨¦ que era una broma, se lo pas¨¦ a mi editora, se puso en contacto con una productora americana muy potente y quieren hacer Manolito, les interesa el personaje¡±, adelanta la autora. La carta llegaba de Exile Content Studio, una productora con sede en Los ?ngeles, M¨¦xico y Miami, enfocada en la producci¨®n de series hispanoamericanas, como El Chapo, para Netflix.
El proyecto, como la nueva entrega de Manolito en libro, est¨¢ en preparaci¨®n. Elvira Lindo asesorar¨¢ a la productora. El objetivo, cuenta, es que se respete al personaje. No ser¨¢ un Manolito latino, ni un joven de familia trabajadora de Queens, en Nueva York. Seguir¨¢ siendo el ni?o de Carabanchel. ¡°La serie tiene que ser aqu¨ª. Este es su mundo, si no, es otro personaje¡±, puntualiza. Otra cosa es que, por fin, Manolito acabe con la condena familiar y por fin salga de Espa?a.
Como sucede con los libros, Lindo defiende que ser¨¢ para todos los p¨²blicos. ¡°Como cuando vuelves a ver Aquellos maravillosos a?os o Seinfeld, la edad no importa¡±, pone de ejemplo. Desde el momento en que Manolito sali¨® de la categor¨ªa de infantil y juvenil, Elvira Lindo sinti¨® cierta liberaci¨®n. ¡°Si los libros hubieran empezado a publicarse ahora hubieran tenido problemas¡±, reconoce. ¡°La suerte que tuve es que salieron en un momento en el que la correcci¨®n pol¨ªtica era algo que suced¨ªa en Am¨¦rica, no aqu¨ª¡±.
En 2019, una vez adquirida la etiqueta de cl¨¢sico al cumplir los 25, los problemas que le pudo acarrear el nombre de un personaje como Bragas Sucias parecen haber desaparecido. ¡°No quiero tener responsabilidades pedag¨®gicas ni educar a los ni?os. No es mi papel¡±. Manolito ha sido capaz, hasta ahora, de sortear todas esas vicisitudes. La televisi¨®n del mundo mundial es su siguiente reto.
¡°No va a ser eterno¡±, anuncia la escritora. Tampoco est¨¢ entre sus planes matar un mundo que pervive de generaci¨®n en generaci¨®n. ¡°Manolito es mucho m¨¢s popular que yo. Es un personaje que tiene vida propia¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.