Los datos secretos de la industria editorial

La pandemia ha agudizado el dominio de los grupos editoriales. Entre los 60 t¨ªtulos m¨¢s vendidos en Espa?a de enero a agosto de este a?o, s¨®lo ocho no fueron publicados por Penguin Random House, Planeta, Anaya o RBA, con la llamativa cu?a del ensayo El infinito en un junco de Irene Vallejo (Siruela) en el puesto 11. Si se atiende solo a ficci¨®n, de los 130 m¨¢s vendidos, ¨²nicamente cuatro fueron presentados por editoriales independientes: Los asquerosos de Santiago Lorenzo (Blackie Books), Lectura f¨¢cil de Cristina Morales y Canto jo i la muntanya balla, de Irene Sol¨¤ (ambos en Anagrama) y la primera parte de la saga de literatura fant¨¢stica El ¨²ltimo deseo de Andrzej Sapkowski (Alamut). Los dos gigantes, Penguin y Planeta, copan el 67,36% del mercado de ficci¨®n adulta, cuando el a?o pasado era el 62,83%, seg¨²n datos del ¨²ltimo informe de la consultura GFK al que ha tenido acceso EL PA?S.

Las editoriales mantienen selladas bajo siete llaves las cifras de mercado de sus libros, ampar¨¢ndose en la dificultad de saber con exactitud los ejemplares vendidos por cada una de las librer¨ªas. La consultora GFK es la ¨²nica que ha podido resolver el misterio, mediante un muestreo de ventas reales en librer¨ªas de todos los tama?os, incluida Amazon, y sus datos ofrecen una fiabilidad casi del 100 %. El problema es su alto coste, m¨¢s de 50.000 euros, y la cl¨¢usula de confidencialidad que hace firmar a sus privilegiados clientes. De ah¨ª que sus datos sean el secreto m¨¢s codiciado por el sector.

El informe se?ala una ca¨ªda de la facturaci¨®n hasta agosto del 12% con respecto al mismo per¨ªodo del a?o anterior, lo que representa una p¨¦rdida, de momento, de 70 millones de euros, aunque numerosas editoriales han sufrido un desplome de m¨¢s del 30%. La anulaci¨®n del d¨ªa de Sant Jordi en Catalu?a (se facturan 22,6 millones) y la feria madrile?a del Retiro (casi 10 millones), m¨¢s el cierre de librer¨ªas, pesa como una losa. Solo hay dos libros que superan los 100.000 ejemplares vendidos: El enigma de la habitaci¨®n 622, de Joel Dicker, que sali¨® en mayo y es el primero, si se suman las cifras de las ediciones espa?ola (Alfaguara) y catalana (La Campana) seguido de Reina Roja de Juan G¨®mez-Jurado (Ediciones B, 2018), que adem¨¢s tiene Loba negra (2019) en el puesto seis.

A estos les siguen algunas de las contadas novedades aparecidas este a?o: Episodios de una guerra interminable de Almudena Grandes (publicado por Tusquets en febrero) y Un cuento perfecto de El¨ªsabet Benavent (Suma de Letras, novedad tambi¨¦n de febrero). ?nicamente los 10 primeros superan los 50.000 ejemplares, es decir que las listas de superventas no reflejan la rica diversidad de gustos del lector espa?ol, pues las listas top 10 solo supone el 3% del mercado.

El cuadro de m¨¢s vendidos ofrece un panorama que poco tiene que ver con las listas de hace una d¨¦cada, m¨¢s all¨¢ de que, salvo excepciones, coinciden en su objetivo de buscar el entretenimiento sin hacer muchas preguntas. Predominan el thriller y la novela hist¨®rica, con la irrupci¨®n de la novela rom¨¢ntica, uno de los g¨¦neros que permanec¨ªa oculto en Espa?a a pesar de sus enormes ventas y que ha salido de su nicho. Si el ¨¦xito del ciclo de 50 sombras de Grey sac¨® del anonimato la novela er¨®tica, ?por qu¨¦ no hacer lo mismo con la antes tambi¨¦n llamada novela rosa, dejando atr¨¢s los modelos sumisos del pasado?

En el top 50 abundan las sagas, series y trilog¨ªas. La mayor¨ªa de las protagonistas son mujeres independientes, fuertes y resolutivas, como la romana Julia, de Santiago Posteguillo, sagaces y solitarias como Antonia Scott, de G¨®mez-Jurado, o sentimentales y en crisis permanente como las veintea?eras de Benavent, una influencer (@BetaCoqueta) que dice inspirarse en la cantante Dua Lipa y en la instagramer Mery Turiel, y cuya obra, ¡°escrita como una teleserie¡±, ha sido adaptada ya por Netflix.

Si antes se buscaban autores medi¨¢ticos, ahora se buscan tambi¨¦n autores Big Data. La popularidad ya no la marca en exclusiva la televisi¨®n. Algunos vienen de la autoedici¨®n (Javier Castillo, G¨®mez-Jurado, Eloy Moreno), ocultan su identidad como Carmen Mola o utilizan pseud¨®nimo como Megan Maxwell (con t¨ªtulos del tenor Los pr¨ªncipes azules tambi¨¦n desti?en). Entre estas novelas y un batiburrillo de libros de autoayuda, infantiles, recetas televisivas de Masterchef, la epopeya del Cid de P¨¦rez Reverte (Sidi) y Una Espa?a mejor, del sorprendente Mariano Rajoy, se intercalan autores literarios: Almudena Grandes, Javier Cercas, Manuel Vilas y Luis Landero. O la no ficci¨®n de Irene Vallejo (Siruela, 2019, 46.233 ejemplares), Sapiens, de Yuval Noah Harari (que ya acumula 295.000 libros vendidos desde su publicaci¨®n en 2014 por Debate) y las memorias de Woody Allen, A prop¨®sito de nada (44.220, salieron en mayo en Alianza). Fernando Aramburu es un caso excepcional. A los 719.000 ejemplares que ya hab¨ªa vendido desde 2016 sigue sumando este a?o m¨¢s de 40.000, aupado por la serie de HBO y ya supera, sumando otros formatos, los 800.000 vol¨²menes. Del top 10, Patria (Tusquets) es adem¨¢s el ¨²nico libro que ha conseguido ventas significativamente notables en otras lenguas.

La autoedici¨®n, sin vivir el auge de la m¨²sica o de los instagramers, se est¨¢ consolidando con fuerza, mediante empresas que cobran por la edici¨®n de libros. Antonio Mar¨ªa ?vila, director de la Federaci¨®n del Gremio de Editores, dice que en la Feria del Retiro dieron cabida a 28. Algunas de ellas ya son el n¨²mero 13 por facturaci¨®n y han colocado verdaderos ¨¦xitos.

M¨¢s de 20 ficciones nuevas al d¨ªa

La lectura de las estad¨ªsticas suele ser compleja. El hecho de que este a?o se aplazaran centenares de novedades dispara el libro de fondo, pero el nuevo, m¨¢s caro, ya representaba habitualmente solo una tercera parte de las ventas del a?o. Tambi¨¦n hay que anotar que cuando se habla del auge de la no ficci¨®n, junto al ensayo, actualidad pol¨ªtica y feminismo (que siguen viviendo un aut¨¦ntico boom), y biograf¨ªas y memorias, hay tambi¨¦n multitud de publicaciones de repaso escolar, lunarios, evangelios o gu¨ªas de yoga, estilos de vida, horticultura, cocina, estilos de vida, mapas, viajes...

De los 82.000 t¨ªtulos nuevos, el a?o pasado se editaron 7.500 de novela contempor¨¢nea, incluyendo thriller y ciencia-ficci¨®n: m¨¢s de 20 al d¨ªa. Del mismo modo, la sinceridad de los encuestados que fijan el ¨ªndice de lectura en Espa?a hay que compararla con el dato de que es uno de los pa¨ªses cuya poblaci¨®n gasta menos per c¨¢pita en libro: 22 euros frente a los 52 de Francia. Tambi¨¦n se suele dejar al margen de los an¨¢lisis la potencia de los libros infantiles (El principito) y juveniles (Los juegos del hambre, de Suzanne Collins) y la literatura fant¨¢stica, con ventas jugosas.

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En el sector hay coincidencia en asegurar que no se regresar¨¢ a las cifras previas a la crisis del 2011. La explicaci¨®n es m¨²ltiple. No todos los a?os salen s¨²perventas, dependencia de las pantallas (y su fatiga, lo que explica el escaso ¨¦xito del ebook), h¨¢bitos digitales en contraste con la generaci¨®n anal¨®gica, descabalgamiento del prestigio social del escritor por la popularidad del famoso. La necesidad cong¨¦nita del ser humano de explicarse mediante relatos la est¨¢ ocupando las teleseries, que a diferencia del cine ocupan 14 o 15 horas por temporada, a precios de suscripci¨®n m¨¢s econ¨®micos. De ah¨ª que los grupos multinacionales busquen participar del control tecnol¨®gico y tiendan a rentabilizar el libro en todos los formatos posibles: f¨ªsico, electr¨®nico, audio, televisi¨®n, transmedia o cine para dar continuidad cultural al ecosistema ante el imperio Amazon.

Los autores literarios, tanto de las editoriales independientes como de los sellos de los grandes grupos, aguantan la crisis relativamente bien. Por enumerar algunos ejemplos, Ordesa, de Manuel Vilas acumul¨® ventas desde su publicaci¨®n por Alfaguara en 2018 de m¨¢s de 85.000 ejemplares, Lluvia fina (Tusquets, 2019) de Luis Landero, m¨¢s de 75.000; Lectura f¨¢cil de Cristina Morales (Anagrama, 2019), 44.000; Los errantes, de la Nobel Olga Tokarczuk (Anagrama), salido en octubre del pasado a?o, 18.000; El guardi¨¢n en el centeno de J.D. Salinger, 152.000; La monta?a m¨¢gica de Thomas Mann, 40.000; Serotonina (Anagrama, enero de 2019) de Michel Houellebecq, 30.000. En ensayo, Chimamanda Ngozi Adichie (Todos deber¨ªamos ser feministas, Literatura Random House, 2019) llega a los 100.000 y el voluminoso y ¨¢rido Thomas Piketty (Capital e ideolog¨ªa, Deusto, 2019) a los 13.000. Lo que no cambiar¨¢ es que, como siempre ha ocurrido, muy pocos escritores puedan vivir de su obra. Vender 5.000 ejemplares ya es todo un ¨¦xito.

El libro f¨ªsico aguanta

Entre las novedades que ha tra¨ªdo la pandemia est¨¢ la consolidaci¨®n de la compra de libro f¨ªsico por Internet, que, seg¨²n Carles Rev¨¦s, director editorial de Planeta, propietaria de la Casa del Libro, llegar¨¢ a ser una cuarta parte, con muchas librer¨ªas que ya garantizan la entrega del ejemplar a domicilio el mismo d¨ªa del encargo, mientras la entusiasta red de nuevas y antiguas librer¨ªas modernizadas garantiza la pervivencia de la bibliodiversidad. En salvar el ecosistema est¨¢n unidos los grandes grupos, independientes y libreros. Otra novedad es que el teletrabajo ha potenciado las librer¨ªas de barrio a costa de las del centro en las grandes ciudades y que el libro electr¨®nico, seg¨²n fuentes de Penguin, ha aumentado la pirater¨ªa a trav¨¦s de WhatsApp, Telegram y Facebook, algo que ya est¨¢ siendo atajado por las plataformas de mensajer¨ªa y que es una de las batallas que mantienen los editores con el inmenso poder de las plataformas tecnol¨®gicas.

Rev¨¦s cree que la ca¨ªda de la facturaci¨®n acabar¨¢ estando en torno al 8-9%. En la segunda semana de septiembre era ya del 10,9%, seg¨²n GFK, cuando en el peor mes del confinamiento, abril, se hab¨ªa llegado a una ca¨ªda de casi el 70% en comparaci¨®n con abril del 2019, gracias a que la gente dispone de m¨¢s tiempo y, si no ha visto mermado su sueldo, m¨¢s ahorros. La previsi¨®n, si ello es posible, es que la desaparici¨®n de los n¨²meros rojos est¨¢ a¨²n lejana, a¨²n cuando la segunda ola de la pandemia no traiga m¨¢s calamidades.