Garry Winogrand, un mito de la fotograf¨ªa tambi¨¦n en color
El KBr de Barcelona expone, por primera vez en Espa?a, la mirada del creador norteamericano sobre la vida en su pa¨ªs desde la d¨¦cada de 1950, m¨¢s all¨¢ de sus ic¨®nicas im¨¢genes en blanco y negro
Tras el final de la Segunda Guerra Mundial en los Estados Unidos se vivi¨® un boom econ¨®mico y social; unos a?os que dejaron paso, ya en la d¨¦cada de los sesenta, a un periodo de inquietud y desilusi¨®n ante la amenaza nuclear, los disturbios raciales, las guerras de Indochina y Vietnam y el magnicidio en noviembre de 1963 del presidente Kennedy. Y hubo muchos fot¨®grafos que se echaron a la calle para captar con su c¨¢mara esa ¨¦poca: el bullicio, la energ¨ªa y la efervescencia de las calles de ciudades como Nueva York y el trasiego de sus gentes an¨®nimas, que disfrutaban de la vida, pero tambi¨¦n protestaban contra todo lo que consideraban injusto.
Entre ellos, Lee Friedlander y Diane Arbus. Pero ninguno como Garry Winogrand, nacido en el Bronx en 1928 y fallecido en Tijuana, M¨¦xico, en 1984, a los 56 a?os, despu¨¦s de haber realizado miles de fotograf¨ªas, mucha de ellas in¨¦ditas. Como las que conten¨ªan los 6.500 carretes que dej¨® sin revelar, en los que abundan las im¨¢genes llenas de vida de los transe¨²ntes en las avenidas neoyorquinas: j¨®venes mujeres, hombres de negocios de Wall Street, casi siempre trajeados, pero tambi¨¦n hippies, ni?os, actores y deportistas, el mundo del espect¨¢culo, manifestantes contra la guerra, animales y coches, dos de sus pasiones. ¡°A veces siento como si [...] el mundo fuera un lugar para el que he comprado una entrada. Es un gran espect¨¢culo para m¨ª, como si no fuese a suceder si yo no estuviera all¨ª con una c¨¢mara¡±, dijo Winogrand en 1980.
Una selecci¨®n de 169 im¨¢genes de esta vasta producci¨®n puede verse hasta el 5 de septiembre en la exposici¨®n Garry Winogrand, que organiza el KBr de la Fundaci¨®n Mapfre de Barcelona. Comisariada por Drew Sawyer, conservador de fotograf¨ªa del Museo de Brooklyn, en la muestra se proyectan por primera vez en Espa?a 152 de las 45.000 diapositivas en color que Winogrand realiz¨® de forma paralela a sus im¨¢genes en blanco y negro, con la intenci¨®n de arrojar una nueva luz en la carrera de este artista fundamental de la fotograf¨ªa. Los temas son los mismos: luminosas escenas de playa, bulliciosas calles, parques y edificios de oficinas de la ciudad. De hecho, Winogrand llevaba dos c¨¢maras, una con pel¨ªcula en blanco y negro y otra con color y si se cotejan unas y otras es posible comprobar que alternaba los dos aparatos, pero sus colores han quedado eclipsados por su conocida producci¨®n en blanco y negro.
¡°Era muy caro revelar estas pel¨ªculas; del orden del 200% m¨¢s que las de blanco y negro¡±, subraya el comisario. Por eso, Winogrand las utiliz¨® solo para ilustrar algunas de sus clases en la Universidad de Texas desde 1973. En 1967 las mostr¨® (solo 80) por primera vez durante la exposici¨®n New Documents en el MoMA de Nueva York, en la que comparti¨® cartel con Friedlander y Arbus. Pero tras un fallo del proyector, que acab¨® quemando una decena de ellas, ya no volvi¨® a ense?arlas m¨¢s y son muy poco conocidas.
En palabras de Winogrand, ¡°la fotograf¨ªa es una forma de pensar, de ver, de sentir, no es pintura, ni poes¨ªa, ni otra cosa que fotograf¨ªa en s¨ª misma¡±. Seg¨²n el comisario, ¡°consideraba que la importancia de las fotograf¨ªas no estaba en lo que narraban, sino en lo que preguntaban y por eso se aleja del fotoperiodismo para ser un artista¡±. De ah¨ª que en sus im¨¢genes, realizadas siempre con una Leica de 35 mil¨ªmetros con un gran angular y a base de planos inclinados, abunden los temas, y pocas veces haya un solo punto focal, obligando al espectador a recorrer la imagen de parte a parte para poder captar las intenciones ¨²ltimas de su trabajo. ¡°Winogrand se sumerg¨ªa en el caos de la ciudad para intentar reproducirlo y as¨ª capturar el flujo de la vida¡±, prosigue Sawyer.
Como una de sus piezas m¨¢s ic¨®nicas, la de la pareja elegantemente vestida de 1967 que lleva en brazos dos bebes chimpanc¨¦s tan bien vestidos como ellos en medio de la multitud. O la que le hizo al presidente Kennedy en la convenci¨®n de 1960 en la que aparece dando un discurso, de espaldas y su cara solo se ve por una televisi¨®n, visualizando el creciente poder de la pantalla frente a las revistas y diarios. Tambi¨¦n, en la fotograf¨ªa en la que cuatro emperifolladas ancianas pasean por una calle de Nueva York en 1970. A su lado cuatro o cinco enormes bolsas de basura. Detr¨¢s, una joven en vaqueros, ¡°y posiblemente sin sujetador¡±, apunta Sawyer, por si hubiera duda del desfase generacional.
A Winogrand le interesaba hacer fotos, pero no imprimirlas, editar libros o exponerlas. Por eso su trabajo no se entender¨ªa sin el papel del jefe de fotograf¨ªa del MoMA desde 1962, John Szarkoswki, una de las personas m¨¢s influyentes en la formaci¨®n del gusto contempor¨¢neo en el campo de la fotograf¨ªa. Szarkoswki consideraba a Winogrand el ¡°fot¨®grafo m¨¢s importante de su generaci¨®n¡±. Fue ¨¦l quien organiz¨® la primera exposici¨®n individual del artista en un museo, The Animals, en 1969, con sus fotos de zoos y acuarios de Nueva York, y el encargado de positivar y llevar a contactos 2.500 de los 6.500 carretes que dej¨® sin editar Winogrand tras su muerte; un material que vio la luz en la retrospectiva Figments from the Real World, organizada en el MoMA en 1988, una muestra can¨®nica de este fot¨®grafo desde entonces. ¡°Nos queda la duda de si esa es la imagen que a Winogrand le hubiera gustado dar a conocer de su trabajo¡±, concluye Sawyer.
El arte de envejecer de Nicholas Nixon
El KBr de Barcelona programa, desde que se inaugur¨® en octubre de 2020, dos exposiciones a la vez. Comenz¨® con Bill Brandt y Paul Strand. Sigui¨® con Claudia Andujar y la colecci¨®n de daguerrotipos del Centre de Recerca i Difusi¨® de la Imatge de Girona. A partir de este viernes, junto a la de Winogrand estar¨¢ la dedicada a Las hermanas Brown, la serie m¨¢s famosa de Nicholas Nixon, sobre su mujer, Bebe, y sus tres hermanas, Heather, Mimi y Laurie, que realiza desde 1975 de forma ininterrumpida y en la que se ve a las cuatro envejecer, a?o tras a?o.
Retratadas siempre en el mismo orden y mirando el objetivo, la serie se va completando con nuevas entregas cada a?o que reciben los centros ¡°a modo de suscripci¨®n¡±, comenta Carlos Gollonet, conservador jefe de fotograf¨ªa de la Fundaci¨®n Mapfre. La ¨²ltima fotograf¨ªa, la de 2020, marcar¨¢ un hito en esta popular serie, ya que por primera vez, las cuatro hermanas no pudieron reunirse por la pandemia para la imagen y Nixon tuvo que capturar sus rostros v¨ªa Zoom.
Garry Winogrand / Nicholas Nixon
KBr Fundaci¨®n MAPFRE (Avenida del Litoral, n? 30, Barcelona)
11 de junio ¨C 5 de septiembre
infokbr@fundacionmapfre.org
Lunes (no festivos): cerrado / Martes a domingos (y festivos): 11 ¨C 20 horas.
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