Mariano Barroso: ¡°Hay que redefinir d¨®nde est¨¢ ahora la m¨ªstica del cine, ya no se da solo en las salas¡±

En el despacho de presidencia de la Academia de Cine apenas quedan unas posesiones de Mariano Barroso. ¡°Tampoco es que tuviera mucho... Es la oficina del presidente, no m¨ªa. El ordenador me lo llev¨¦ a casa ayer, y me falta por sacar algunas revistas y aquella americana¡±, explica. Al fondo, en un perchero, cuelga una chaqueta de color azul. ¡°Es la que uso para las firmas institucionales¡±. El pr¨®ximo s¨¢bado la asamblea de la instituci¨®n elegir¨¢ una nueva terna presidencial (presidente y dos vicepresidentes) entre cuatro candidaturas. Se acabar¨¢ as¨ª el mandato de Barroso (Sant Just Desvern, Barcelona, 62 a?os), que lleg¨® al cargo de forma interina tras sufrir Yvonne Blake, su predecesora, un ictus en enero de 2018. Como primer vicepresidente, el cineasta asumi¨® el reto, y finalmente se adelantaron las elecciones a junio de 2018, donde su candidatura fue la ¨²nica en presentarse. ¡°Me han propuesto repetir, pero ya he cumplido mi tiempo. Es m¨¢s, a algunas de las personas que me lo dijeron yo mismo les respond¨ª que se presentaran ellas, y as¨ª ha sido¡±.

Ayer martes por la ma?ana, en la Academia se preparaba el anuncio de que la nueva edici¨®n de los premios Goya se celebrar¨¢ en Sevilla, aunque a¨²n no han concretado la fecha. Solo que ser¨¢ en 2023. ¡°Tenemos un recuerdo excelente de la gala que hicimos en Sevilla¡±, contaba Barroso. ¡°Ha habido muchas otras ciudades que han pujado. Por ejemplo, Valladolid, que est¨¢ muy por la labor. Pero Sevilla hemos constatado todo lo que sus ciudadanos e instituciones quieren al cine espa?ol, empezando por el Ayuntamiento. Y encima tienen el Palacio de Congresos FIBES, que parece concebido para que all¨ª, de forma natural, se celebren los Goya. Un patio de butacas de m¨¢s de 3.000 localidades, un escenario perfecto. Desde 2019, en Sevilla han querido que volvi¨¦ramos¡±.

Por la Academia han pasado 16 presidentes en 36 a?os de historia. La instituci¨®n no tiene ning¨²n poder, aunque es el rostro m¨¢s visible del cine espa?ol. Representa al gremio. Desde 2006, cuando fue elegida ?ngeles Gonz¨¢lez-Sinde tras la presidencia de Mercedes Sampietro, ning¨²n presidente, por muy distintas razones, ha completado su periodo de gobierno hasta este final de mandato de Barroso. ¡°Esto es una monta?a rusa, por el nivel de ruido y de exposici¨®n¡±, comenta. ¡°Muchas veces me he preguntado por qu¨¦ estoy aqu¨ª, aunque al momento me respond¨ªa. Es muy saludable para la instituci¨®n que completemos el mandato¡±.

?Pel¨ªculas de plataformas en los Goya?

El ¨®rgano directivo de la instituci¨®n es la junta directiva, conformada por dos vocales de cada una de las 15 especialidades que la conforman. Este s¨¢bado, adem¨¢s de votar nuevo presidente o presidenta, y sus vicepresidentes, se renueva la mitad de la junta. ¡°Es cierto que es una estructura peculiar, porque por esa separaci¨®n la junta no es el gobierno de la presidencia. Y por ello a veces se abre el debate¡±, dice educado Barroso. Un ejemplo: Antonio Resines dimiti¨® por sus ¡°serias discrepancias con parte de la junta directiva que han imposibilitado en los ¨²ltimos meses el trabajo diario de la terna presidencial¡± en 2016. ¡°Cierto. Yo me he sentido apoyado, aunque alguna vez he perdido votaciones. Se asume con deportividad¡±.

Uno de esos desencuentros naci¨® del pensamiento de Barroso de que ¡°los acad¨¦micos contamos historias para todo tipo de pantallas¡± como ya apunt¨® en su discurso de la gala de 2019 y abriendo as¨ª la posibilidad de tener en cuenta en los Goya otros productos audiovisuales. Semanas m¨¢s tarde, en marzo, la junta directiva cerr¨® la puerta a esa posibilidad. ¡°Es un debate a afrontar, sobre todo el de las pel¨ªculas hechas para plataformas. Es evidente que hay un nuevo paradigma en la distribuci¨®n y exhibici¨®n. Antes o despu¨¦s, la Academia tendr¨¢ que volver a esta reflexi¨®n. Hay que redefinir d¨®nde est¨¢ ahora la m¨ªstica del cine. Por mucho que nos queramos resistir, la situaci¨®n ha cambiado y ya no se da solo en las salas. A nuestras casas llega una avalancha de producci¨®n audiovisual que antes no exist¨ªa. ?D¨®nde est¨¢ ahora la conexi¨®n con el cine? ?En las salas, as¨ª lo creen las nuevas generaciones? Hay que reflexionar. Y recuerda que hablamos desde Madrid. Un espectador que viva en una aldea de Pontevedra o en un pueblo de Almer¨ªa ha sufrido durante d¨¦cadas la carencia de no ver estrenos. Eso ha cambiado. A cambio, obviamente, las salas lo pasan mal. Y hoy por hoy, la Academia, por sus estatutos, es la academia del cine en salas¡±. ?Est¨¢ preparado el cine espa?ol para eso? ¡°Cuando est¨¢s aqu¨ª te das cuenta de que el cine espa?ol es muy complejo, con muchas y distintas opiniones¡±.

Barroso confiesa que los mejores momentos los ha disfrutado con la puesta en marcha de las distintas iniciativas ¡ªcomo el programa de residencias¡ª y su recibimiento. ¡°Los Goya son el macguffin de la Academia. Son imprescindibles, pero son el d¨ªa del esmoquin y el traje de noche. Los otros 364 est¨¢s en mono de trabajo. Y yo creo en que hay que seguir desarrollando nuestras conexiones y encuentros con la industria; solo un punto de los diez que conforman el Estatuto de esta instituci¨®n se centra en los Goya¡±, rememora, antes de subrayar que, por supuesto, ni la junta ni la terna presidencial cobran por su trabajo. ¡°Lo peor, como en otras muchas profesiones, fue la incertidumbre de la pandemia. No sab¨ªamos hacia d¨®nde iba a ir el cine, ni el futuro de las salas¡±.

Es una torpeza pol¨ªtica no apoyar a la producci¨®n independiente¡±

El presidente no quiere entrar a debatir sobre los comentarios realizados por el productor Agust¨ªn Almod¨®var al acabar la ¨²ltima ceremonia de los Goya, donde Madres paralelas no se llev¨® ning¨²n premio, tras tampoco haber sido seleccionada como la representante espa?ola en los Oscar. ¡°Hay tantos comentarios que quiz¨¢ lo que sobran son los comentarios, el ruido. En este despacho representas a todo el colectivo, que, por otra parte, es un grupo muy emocional, nos afectan mucho los reconocimientos y la valoraci¨®n externa¡±, reflexiona. ¡°?Sabes cu¨¢l es nuestra principal labor? Ser un servicio p¨²blico, luchar por cubrir el relato de lo colectivo, de lo que est¨¢ pasando en Espa?a, y hacer buenos filmes¡±, explica Barroso. ¡°Por eso apoyamos las reivindicaciones de la producci¨®n independiente ante la Ley de Comunicaci¨®n Audiovisual. Porque esa ley es cortoplacista, injusta, aplica la visi¨®n pol¨ªtica a corto plazo sobre algo de largo recorrido, el arte. Pienso que en alg¨²n momento, en el Senado o m¨¢s tarde en Europa, se recuperar¨¢ la coherencia. No se puede hacer una ley en contra del esp¨ªritu de la directiva europea que traspone. Es una torpeza pol¨ªtica no apoyar a la producci¨®n independiente, que m¨¢s all¨¢ de los numerosos puestos de trabajo que conlleva, hace que existan Furtivos, El esp¨ªritu de la colmena, las pel¨ªculas de Carlos Saura... La producci¨®n independiente crea el relato de nuestro pa¨ªs¡±.