2023: el a?o de Stefan Zweig
La obra del escritor austriaco pasa a ser de dominio p¨²blico y se espera una gran riada de ediciones en Espa?a
Ya no hay dudas. Tras un par de conflictos que han acabado en los tribunales, desde el 1 de enero de este nuevo a?o la obra de Stefan Zweig es de dominio p¨²blico, por lo que se espera una riada de ediciones de sus obras en Espa?a, donde se le rinde una devoci¨®n m¨¢s religiosa que literaria. El panorama se parece al que se abri¨® en las carreteras en enero de 1993, cuando ...
Ya no hay dudas. Tras un par de conflictos que han acabado en los tribunales, desde el 1 de enero de este nuevo a?o la obra de Stefan Zweig es de dominio p¨²blico, por lo que se espera una riada de ediciones de sus obras en Espa?a, donde se le rinde una devoci¨®n m¨¢s religiosa que literaria. El panorama se parece al que se abri¨® en las carreteras en enero de 1993, cuando se acab¨® el monopolio de hidrocarburos de Campsa y en el paisaje florecieron gasolineras de todos los colores y marcas. La obra de Zweig, hasta ahora gestionada y mimada por Acantilado ¡ªcuyos libros elegant¨ªsimos se reconocen al primer vistazo al entrar en cualquier librer¨ªa y resaltan en cualquier biblioteca, con sus franjas rojas o amarillas rematando el lomo negro¡ª, se va a replicar en mil dise?os y formatos editoriales. Esto es un acontecimiento: pocos autores cl¨¢sicos han devenido objetos de codicia librera tan deseados. En muchos despachos editoriales se esperaba con ansiedad el momento de abalanzarse sobre esta herencia liberada.
En 2021 y 2022 ya se rompi¨® el monopolio. Ediciones 98 public¨® hace casi dos a?os una edici¨®n de los diarios sin pedir permiso a la agencia que vende los derechos del autor austriaco, y en 2022, Hermida Editores hizo lo mismo con Novela de ajedrez y la poes¨ªa completa. Argumentaban ambos editores que Zweig pas¨® a dominio p¨²blico con el Brexit, dado que el escritor adquiri¨® la nacionalidad brit¨¢nica en 1940. Por tanto, en el nuevo marco legal, tras la salida del Reino Unido, prevalec¨ªa la ley brit¨¢nica. Seg¨²n la espa?ola, hab¨ªa que esperar hasta el 31 de diciembre de 2022, por lo que Quaderns Crema (propietaria de Acantilado) y F¨®rcola Editores litigaron contra Ediciones 98 y Hermida, aduciendo que poseen en exclusiva los derechos en espa?ol de la obra de Zweig, adquiridos mediante una agencia de Barcelona.
F¨®rcola public¨® en 2021 Cuerdas de plata, una antolog¨ªa po¨¦tica biling¨¹e con pr¨®logo de C¨¦sar Antonio Molina, edici¨®n que cuenta con las bendiciones legales de los herederos y tambi¨¦n de Acantilado, que se ha quedado con la prosa y la sustancia de Zweig, autor que compone la espina dorsal de su cat¨¢logo y una buena parte de sus ingresos. En los ¨²ltimos veinte a?os, esta editorial independiente ha publicado casi toda su obra narrativa, biogr¨¢fica y ensay¨ªstica, as¨ª como vol¨²menes de correspondencia y diarios, hasta sumar 43 t¨ªtulos, la mayor¨ªa de ellos reeditados con frecuencia y muy accesibles en cualquier librer¨ªa. El ¨²ltimo, reci¨¦n aparecido, es un estuche que contiene una edici¨®n especial de sus biograf¨ªas, pensado para que los fanes lo pidan a los Reyes Magos.
El compromiso de Acantilado con Zweig es de los m¨¢s s¨®lidos en la historia de la edici¨®n. Lo inaugur¨® el fundador de la editorial, Jaume Vallcorba, y lo mantiene con firmeza su sucesora, Sandra Ollo, quien dirige el sello desde la muerte del primero, en 2014. Por mucho que se liberalice la obra de Zweig, va a ser muy dif¨ªcil que Acantilado deje de ser su referencia en espa?ol. Se replicar¨¢n los t¨ªtulos m¨¢s populares, pero es improbable que otra casa invierta tantos recursos y tanto cari?o (porque esta dedicaci¨®n tiene tanto de pasional como de comercial, y hay en ella m¨¢s filolog¨ªa que balances contables) en mantener viva una obra tan extensa. Los lectores espa?oles se han acostumbrado a asociar al autor vien¨¦s con la editorial barcelonesa, y el h¨¢bito es una fuerza casi invencible en la industria cultural.
Hay, no obstante, ofensivas en marcha contra el monopolio. La m¨¢s fuerte es la que va a emprender Alianza, que forma parte del grupo franc¨¦s Hachette y cuenta con su poder¨ªo comercial y financiero para situarse como nueva referencia de Zweig en espa?ol. Su lanzamiento m¨¢s destacado es El mundo de ayer, que aparecer¨¢ en r¨²stica con una nueva traducci¨®n de Eduardo Gil Bera. Le seguir¨¢n, pero ya en la colecci¨®n fetiche de la editorial, el Libro de Bolsillo, Momentos estelares de la humanidad (con traducci¨®n de Carmen Gauger); un volumen que contendr¨¢ Carta de una desconocida y Veinticuatro horas en la vida de una mujer (traducci¨®n de Isabel Garc¨ªa Ad¨¢nez), y en otro volumen, Novela de ajedrez y Mendel el de los libros (traducci¨®n de Adam Kovacsis).
Anaya, que pertenece al mismo grupo que Alianza, publicar¨¢ tambi¨¦n en su colecci¨®n juvenil Miedo, una novela breve que se incluye en los programas de lecturas de algunos centros educativos, donde Anaya tiene una importante cuota de mercado. Los profesores de literatura son una parte notable del apostolado de Zweig, pero Acantilado no trabaja con el p¨²blico estudiantil. Esta edici¨®n puede ser el principio de una invasi¨®n zweigiana de los institutos.
Este mismo mes de enero se suma a la avalancha P¨¢ginas de Espuma, con una edici¨®n ambiciosa de los Cuentos completos, traducidos por Alberto Gordo. La editorial madrile?a, especializada en el g¨¦nero corto, tiene una l¨ªnea de cl¨¢sicos que se ha convertido en uno de sus negocios m¨¢s rentables, y en ella encaja perfectamente la prosa de Zweig, de quien no hay que olvidar que conoci¨® en vida una fama similar a la que disfruta en muerte, despertando las envidias de los grandes escritores de su tiempo, como Thomas Mann, que no pod¨ªa ni verlo.
Si los libreros no se resisten y el p¨²blico no se empacha, pronto habr¨¢ m¨¢s traducciones y reediciones de las biograf¨ªas y de los t¨ªtulos m¨¢s populares de un autor que casi siempre est¨¢ de moda en Espa?a, pa¨ªs que lleva rendido a su genio desde el principio. Las primeras noticias de Zweig llegaron en 1929, cuando la editorial madrile?a Cenit public¨® Tres maestros (Balzac, Dickens, Dostoievski). Cenit era una de las editoriales m¨¢s importantes de Espa?a, pero tambi¨¦n era un sello militante de propaganda comunista, por lo que no deja de ser curioso que fuera la introductora de un autor que con el tiempo ha quedado asociado a la nostalgia burguesa. De hecho, en la memoria de los lectores de m¨¢s edad, los libros de Zweig no llevan las portadas elegantes y tipogr¨¢ficamente modernas de Acantilado, sino las solemnes y un poco rancias de la editorial Juventud, que coloc¨® miles de ejemplares de las biograf¨ªas de Fouch¨¦ y Mar¨ªa Antonieta en las casas m¨¢s respetables de Espa?a a partir de la d¨¦cada de 1960.
Tal vez por eso al autor austriaco se le hizo poco caso en los primeros a?os de la democracia, pues los lectores j¨®venes lo relacionaban con las estanter¨ªas m¨¢s plomizas de la biblioteca de sus padres. La edici¨®n en 2002 en Acantilado de las memorias p¨®stumas El mundo de ayer, con el subt¨ªtulo Memorias de un europeo, reaviv¨® enormemente el inter¨¦s por un autor que ya no se le¨ªa como el simp¨¢tico y ameno bi¨®grafo de personajes hist¨®ricos que fue en la d¨¦cada de 1930, sino como una figura que resum¨ªa con su vida y su muerte la tragedia europea y dejaba un testimonio que resonaba hondo en una sociedad ya obsesionada por la memoria hist¨®rica. Desde entonces, el libro ha agotado 31 ediciones y es la puerta de entrada de la mayor¨ªa de los lectores a la obra del austriaco. Muchos de sus pasajes e ideas han devenido lugares comunes que salpican la discusi¨®n pol¨ªtica e intelectual en Espa?a. Quiz¨¢ nuestros hijos vean las ediciones de Acantilado (y las que van a venir) como antig¨¹edades insufribles de las bibliotecas de sus padres, pero cuando un autor empapa tanto a tantas generaciones, ha alcanzado ya la eternidad y sobrevivir¨¢ a todos los olvidos.