?rica Rivas, actriz: ¡°He recibido mucho odio por ser feminista¡±
La int¨¦rprete argentina que salt¨® a la fama internacional con ¡®Relatos salvajes¡¯ representa en Madrid la adaptaci¨®n teatral de la novela ¡®Matate, amor¡¯, de Ariana Harwicz
El mundo entero descubri¨® el poder¨ªo interpretativo de la actriz argentina ?rica Rivas (Buenos Aires, 48 a?os) cuando la pel¨ªcula Relatos salvajes compiti¨® en los Oscar en 2015. Ahora acaba de terminar de rodar para Netflix la versi¨®n cinematogr¨¢fica de la novela Elena sabe, de Claudia Pi?eiro. Tambi¨¦n deslumbra cuando hace teatro y Espa?a la conoci¨® en esa faceta cuando hizo gira por el pa¨ªs con Ricardo Dar¨ªn en 2015 con la obra Escenas de la vida conyugal. Ahora ha vuelto a Madrid para representar de jueves a domingo en los Teatros del Canal la adaptaci¨®n de Matate, amor, el libro con el que su compatriota Ariana Harwicz sorprendi¨® tambi¨¦n al mundillo literario internacional en 2012 por su brutal visi¨®n sobre la maternidad, la locura y las mujeres. Ambas comparten un f¨¦rreo compromiso personal y art¨ªstico con el feminismo: Rivas perdi¨® recientemente un trabajo ¡°de mucha plata¡± por eso. ¡°?No he querido hacer el c¨¢lculo!¡±, dice entre risas y l¨¢grimas.
La int¨¦rprete ha viajado a Espa?a acompa?ada de la directora de Matate, amor, Maril¨² Marini, tambi¨¦n actriz de gran trayectoria en su pa¨ªs y en Francia, donde reside desde los a?os setenta y donde ha trabajado con grandes figuras teatrales como Peter Brook o Ariane Mnouchkine. Excepcionalmente, Marini estar¨¢ sobre el escenario en las funciones de Madrid, como una especie de testigo del mon¨®logo de Rivas. Una ocasi¨®n ¨²nica para ver juntas a dos divas de distintas generaciones.
Pregunta. ?Qu¨¦ le atrajo de la novela de Ariana Harwicz para llevarla al teatro?
Respuesta. Me lleg¨® en 2014 a trav¨¦s de una productora que quer¨ªa adaptarla y me qued¨¦ pasmada. Me sorprendi¨® que alguien estuviera escribiendo as¨ª sobre la maternidad, la locura, las mujeres, el feminismo¡ De esa manera tan salvaje y a la vez graciosa. En aquel momento no sali¨® el proyecto, pero a?os despu¨¦s me contact¨® por Facebook la propia Ariana Harwicz, retomamos la idea y estrenamos en Buenos Aires en 2018.
P. ?Y triunfaron!
R. S¨ª¡ llenamos siempre. Porque adem¨¢s estrenamos en plena efervescencia del feminismo en Argentina. En 2015 hab¨ªan empezado las manifestaciones contra la violencia machista y en 2018 est¨¢bamos en plena discusi¨®n de la ley del aborto, trabajando much¨ªsimo desde el feminismo, visibilizando muchas cosas.
P. ?No tuvieron reacciones negativas precisamente por eso?
R. La verdad es que no. Hay que tener en cuenta que esto est¨¢ contado desde la ficci¨®n. Y no solo trata de la maternidad, sino tambi¨¦n de la locura, de c¨®mo a las mujeres se nos ha tratado de hist¨¦ricas o de brujas a lo largo de la historia. ?Pero c¨®mo no vamos a volvernos locas si los hombres han armado la sociedad a su medida! Es buena para ellos, claro; pero si no eres blanco y heterosexual, la padeces.
P. Algo hemos avanzado, ?no?
R. El feminismo est¨¢ haciendo su trabajo. Muchos hombres tambi¨¦n conectan con esta obra, quiz¨¢ no la entiendan como la pueda entender una mujer, pero quieren acercarse. Creo que muchos sienten que el patriarcado tambi¨¦n les oprime a ellos. Les cuesta empatizar m¨¢s a los mayores, que se han educado de esa manera y se han beneficiado durante toda su vida de los privilegios del patriarcado. Es m¨¢s f¨¢cil para los j¨®venes.
P. A pesar de esos avances, usted perdi¨® recientemente un trabajo por su militancia feminista. En 2020 la echaron del proyecto para adaptar al teatro la sitcom argentina Casados con hijos porque no acept¨® hacer ciertos chistes, a pesar de que interpretaba a uno de los personajes m¨¢s populares. No mucha gente se juega el pan de esa manera.
R. Pero no pod¨ªa hacer otra cosa. Habr¨ªa traicionado a todas aquellas que me convocaron para leer el manifiesto de las marchas contra la violencia machista en Argentina. Yo quer¨ªa participar en esa obra, pero el mundo ha cambiado desde que se estren¨® la serie en 2005. Y yo tambi¨¦n: sal¨ª del cl¨®set del feminismo. No puedo re¨ªrme ya de un se?or que intenta ligar con una chica de 14 a?os. No me quiero re¨ªr de una mujer que tiene bigotes ni de una travesti ni de un gordo ni de ninguna persona vulnerable. No me da risa eso.
P. Pero el humor no debe tener l¨ªmites, ?no?
R. Es que no son inocentes esos chistes, ?eh! Forman parte de la maquinaria que sostiene el patriarcado. Para m¨ª el humor est¨¢ para re¨ªrse del poder, no de los oprimidos.
P. ?Y la libertad de expresi¨®n?
R. Los medios de comunicaci¨®n tienen la responsabilidad de generar sentido com¨²n. Y yo tambi¨¦n porque ocupo un espacio de representaci¨®n. Si yo cuento un chiste machista por televisi¨®n lo van a replicar despu¨¦s en las oficinas. No quiero seguir replicando esa violencia. Ni en ese proyecto ni en ning¨²n otro de ese tipo.
P. Eso implica ponerse a tiro de cr¨ªticas y odios, ?no?
R. Claro. He recibido mucho odio. Pero tambi¨¦n much¨ªsimo apoyo de gente que ni me lo imaginaba. Y eso es conmovedor. Que me digan: ¡®Mir¨¢, yo estoy con vos¡¯. Me llegan historias de gente que lo ha pasado tan mal. Lo recuerdo y me emociono¡ [deja de hablar porque se le saltan las l¨¢grimas].
P. ?Llora mucho?
R. ?Y c¨®mo no vamos a llorar? Si nos siguen pegando, asesinando, violando. No es por victimizarse, pero ser¨ªamos de piedra si no llor¨¢ramos. En las marchas feministas siempre estamos llorando. Juntas. Nada m¨¢s mirarnos, lloramos.
P. ?La efervescencia del feminismo en Argentina se est¨¢ reflejando en la cultura?
R. Desde luego que s¨ª. En la literatura, el cine, el teatro. Y no solo el feminismo, tambi¨¦n la lucha de la comunidad LGTBI+, el mundo trans con autoras como Camila Sosa. Es muy fuerte lo que est¨¢ pasando y l¨®gicamente repercute en la cultura.
P. ?En qu¨¦ se nota?
R. Bueno, el teatro en Argentina siempre ha sido mucho m¨¢s pol¨ªtico o combativo que en Europa y esto tambi¨¦n lo est¨¢ recogiendo. ?Y viste las directoras tan maravillosas que tenemos? Por ejemplo, Anah¨ª Berneri, con la que acabo de rodar Elena sabe. Adem¨¢s de Lucrecia Martel, Natalia Smirnoff, Paula Hern¨¢ndez... Ellas est¨¢n cambiando por fin los temas. Yo estoy todo el tiempo diciendo que cu¨¢ndo vamos a dejar de ver siempre pel¨ªculas o series sobre hombres asesinos, guerras, h¨¦roes. No digo que no est¨¦n bien, pero basta ya de lo mismo. Necesitamos otras historias, otras miradas, otras voces silenciadas hasta ahora.
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